Capítulo 232
Jimena desestimó las amenazas de Rocío, ni siquiera le dedicó una mirada.

Héctor, con las manos en los bolsillos, sonrió tranquilamente hacia Jimena.

—Hace mucho que no veía un espectáculo. Tu hermana, con su estupidez, no me decepciona. Este viaje ha valido la pena.

Jimena, resignada, sabía que él era solo un aficionado a ver líos.

—Entonces, después de eso, las próximas tomas estarán a cargo de usted, la gran estrella.

Héctor arqueó una ceja: —Nuestra relación no requiere de eso.

Mientras tanto, cuando la preparación para la filmación estaba en marcha, la noticia llegó a los oídos de Hernán.

Él estaba en su oficina revisando documentos cuando Rubén entró a informar, tartamudeando al hacerlo. Hernán frunció el ceño al verlo.

—Habla claro, ¿necesitas que te explique las normas de la empresa?

A Rubén le recorrió un sudor frío por la espalda. No se atrevería a pedirle a Hernán que le enseñara; todos sabían que su jefe no instruía a nadie. La forma más rápida de salir era siendo despedido
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo