Llegó el día de iniciar las clases en la universidad. Matricularme con los documentos de Eun-Ji fue más fácil de lo que esperaba.Por un momento pensé que se darían cuenta al presentar su credencial de identidad; pero, bastó con decirle a la señorita que había hecho algunas cirugías en mi rostro por cuestión de estética y como es algo muy común en Corea y todas las chicas lo hacen para mejorar su apariencia solo asintió con la cabeza y me registró en el sistema de la universidad.Aproveché y pagué todo el curso, no quería que en algún momento me faltara el dinero y tener que dejar los estudios por no poder pagar; después de todo, conseguir un empleo para solventar los gastos de comida y vivienda, sería mucho más fácil que pagar una universidad tan costosa.El dinero en mi cuenta disminuyó de forma considerable, en definitiva, la transferencia que había hecho pensando que podía vivir al menos cinco años con ese dinero, no había sido suficiente.Pensé que ese mismo mes tendría que busca
Agaché la mirada tratando de mirarlo de frente, aunque por dentro me moría por volver a ver mi imagen reflejada en sus hermosos ojos grises.—Estoy bien —balbuceé lo más bajito que pude para que él no reconociera mi voz.No sabía por qué; pero, mi instinto me decía que no debía cruzar una palabra con él. Como si en el fondo mi conciencia me gritara que tenía que evitar volver a tener contacto con ese hombre, como si supiera que podía ser peligroso para mí.Y lo era, sabía que de seguir en contacto con él, no podría evitar enamorarme, su dulce voz, la suavidad de su piel y sobre todo su enigmática mirada no se iban de mi mente a pesar de haber pasado ya un mes desde que hicimos el amor.—¿Está segura? Yo prefiero que sea un médico quien lo compruebe, puede tener alguna herida interna que puede complicarse con el tiempo.—El señor Seung-Yi tiene razón señora, es mejor que nos permita llevarla al hospital — replicó el chofer y yo lo único que quería era salir corriendo de ahí o terminarí
Un auto con chofer me recogió en el aeropuerto para llevarme al palacio de la familia Yi. Una fila de empleados uniformados me esperaban en la estancia para presentarse y ponerse a mis órdenes. Ya estaban enterados de mi regreso y tenían indicaciones para obedecer a la señora de la casa.Mi primera orden fue que llevaran todo mi equipaje y lo colocaran en la habitación principal.—Quiero todo muy ordenado en la misma habitación en la que duerme mi esposo cuando está en esta casa — dije con la voz más autoritaria que pude.Esto de dar órdenes se me daba muy bien, era mucho más fácil de lo que pensé y lo disfrutaba demasiado; aunque, no me esperé recibir una respuesta contradictoria a mis deseos.—Lo siento señora, pero no podemos acatar esa orden. El amo Seung-Yi ha dejado indicaciones de que se instale en una habitación que ha sido especialmente decorada para usted. Se encuentra en el mismo Hanok que la habitación del señor, pero en el ala oeste, del lado contrario que la habitación d
El accidente en el que mi chofer atropelló a una mujer en la calle me dejó pensativo. A pesar de que ella no levanto el rostro y nunca pude verla a los ojos, esa mujer me recordó a Eun-Ji.Desde que nos despedimos en Shanghái se me había vuelto una obsesión, parecía verla en todas partes. Cada mujer que se atravesaba en mi camino me la recordaba.Tomé un taxi y me alejé del lugar lo antes posible. No solo porque tenía una reunión importante que iniciaría sin mi presencia, sino porque temía que mis sospechas fueran ciertas y se tratara de la misma mujer.No sabía de lo que sería capaz si volviera a verla. Después de haber convivido por unas horas con mi esposa, me di cuenta de que Hana Rhee, nunca iba a poder inspirarme ningún sentimiento.Era una mujer demasiado superficial. Sabía que provenía de una de las familias más importantes de Seúl, estaba consciente de que se trataría de una niña rica acostumbrada al dinero y las cosas materiales; pero nunca imaginé que en un grado tan excesi
Como si no hubiera sido suficiente con todo el estrés de mi día, llegué a mi apatu a tratar de descansar y me encontré con una tremenda inundación. Una tubería del baño se había roto y estaba todo lleno de agua, tanto que era imposible caminar dentro del apartamento.Respiré profundo y decidí ir a casa, sabía que Hana-Rhee ya había regresado de su viaje y por alguna razón quería evitar encontrarme con ella. Esperaba que haberla hospedado en la habitación más apartada fuera suficiente para no verla.Agradecí que no estuviera a la vista cuando entré, me fui directo a mi habitación para tomar una ducha y pedí que me subieran la cena. Necesitaba comer algo porque en todo el día no había comido nada y debía recurrir a los analgésicos para tratar de controlar el dolor de cabeza que me estaba matando.Me duché en lo que esperaba que subieran la comida y como ya no pretendía salir, solo me puse una bata para estar cómodo. Tal parecía que el clima estaba en mi contra, porque sentía más calor d
Salí del hospital en silla de ruedas y el enfermero me ayudó a subir a un taxi, no tenía idea de lo que iba a hacer para bajarme y llegar a mi apatu sin lastimarme la rodilla.Tenía el estómago revuelto y también la cabeza hecha un verdadero lío. Estaba muerta de miedo porque no sabía que era lo que iba a hacer con un hijo en mi vida.Por fortuna el taxista era un buen hombre y me ayudo a llegar hasta la puerta del apartamento y solo tuve que caminar apoyada en la pared hasta llegar a mi habitación.Me dejé caer en el piso y comencé a llorar. No asimilaba lo que estaba pasando, estaría una semana con el pie inmovilizado y no iba a poder asistir a la universidad, pero lo peor era lo del embarazo.No tenía los medios para solventar mis propios gastos, mucho menos estaba preparada para tener un hijo.Me quedé dormida de tanto llorar, nunca imaginé que mi sueño de ser libre iba a complicarse de esta manera. Mis errores me estaban pasando la factura demasiado pronto.Cuando abrí los ojos y
Me cansé de llamar al móvil que le di a Eun-Ji para que mantuviéramos contacto. No había manera de localizarla porque no tenía otro número para comunicarme con ella.A pesar de la ayuda de mi amiga y su madre yo comencé a entrar en desesperación. Todo se complicó cuando Soo-Jin me dijo que un hombre estaba preguntando por mí en la universidad.—Tal parece que te está buscando la policía, escuché muy claramente cuando ese hombre preguntaba en la administración por Eun-Ji y como referencia dijo que era una joven que estaba embarazada. Estoy segura de que te está buscando a ti.El único que podía estar interesado en encontrarme era Seung-Yi, seguro se había enterado por el hospital de mi embarazo y eso quería decir que si me había reconocido el día del accidente.—Tengo miedo amiga. ¿Qué voy a hacer? Eun-Ji no me contesta el móvil, en dos meses más no podré ocultar mi embarazo y no puedo seguir dependiendo de ti y de tu madre.—Tienes que mantenerte tranquila, tal vez te convendría habla
Llegó la hora de la cena y entendí por qué estaba incluida, la comida era espantosa, pero todos se la comían sin decir nada y tuve que hacer lo mismo porque llevaba en mi vientre una pequeña criatura que alimentar.El pequeño restaurante en la planta baja del edificio estaba tan concurrido de personas que no tenían otra opción, que comer barato, aunque fuera malo.Salí a buscar empleo, pero regresé sin haber encontrado nada, la gente me juzgaba por mi ropa y mi bolso de marca que sentía que cualquier momento me iban a arrebatar en una de esas calles del barrio bajo donde había terminado.Por las noches tenía que recostarme con los pies levantados sobre la pared porque se me hinchaban de tanto caminar. Los días pasaban y yo no solo no conseguía empleo, sino que comenzaba a pensar que pronto iba a terminar durmiendo en la calle.Un día en que sentía que no podía más encontré la manera de ganar un poco de dinero. En un mercado sobre ruedas descubrí a una mujer vendiendo ropa fina a preci