La ira del señor Fu era evidente en su mirada y esta solo aumento cuando comencé a reírme de su ataque de ira. Parece que realmente cree que vendría desarmada, al parecer, se le olvido que esa noche estaba grabando todo lo que decía y hacía.

—Antes de que cometa una locura…—

—Locura fue la que cometiste tú al venir hasta mi casa a burlarte de lo que tu maldito esposo me hizo. —

—Corrección, el motivo de mi visita es simple, he venido a terminar nuestro negocio. Fui aquella noche al club, porque quiero que entregue por las buenas las propiedades que adquirió de manera ilegal y a eso vine hoy. Necesitamos terminar con este asunto— digo y él ríe.

—Estas loca si piensas que has ganado. Hoy solo has venido a recibir tu cuota de dolor por meterte conmigo. Hoy, si no me satisfaces, no solo acabaré contigo, si no, con toda tu maldita famili