Terminamos nuestras bebidas y comenzamos a caminar en busca de las cosas para la cocina y la cama que es lo más difícil de conseguir para una familia de lobos. Una cama debe generar comodidad para dormir, pero, cuando uno es lobo, todo se complica. 

El peso es casi el triple al igual que el tamaño, por lo que, debemos buscar la cama que podemos usar como lobos o humanos. Entramos a una tienda especial para nosotros y todos nos saludan con mucho cuidado.

—Buenas tardes, señor y señora Every— dicen todos los empleados al unísono.

—¿Sabían que veníamos? — pregunto en un susurro.

—Yo no les avisé. Pero, seguramente cuando entramos al centro comercial, todos los empleados comenzaron a avisar que estábamos en el lugar. Por lo que, deben haberse preparado para recibirnos de esta manera. — Dice Jareth tomando mi mano.

—No me agrada mucho ser el