La niña intenta respirar, la mano que la presiona es tan grande que incluso la pequeña mandíbula de Isadora cayó en las manos de Loan. La garganta temblaba, y aun así esta luchando por hablar.

— Escuche sus divagaciones. Padre alardea en la soledad de su habitación... El cómo logró robarle al jefe de la Mafia Italiana... Más que dinero había documentos y algo más.

¿Algo más?

Loan suelta el cuello de la muchacha y esta cae al suelo mientras trata de recuperarse. Sostiene su cuello magullado, y cierra los ojos.

Su apariencia solo estimuló la violencia de Loan.

— No sé quién es el Señor Alastor, solo lo que escuche de la enfermera y el guardia. No tengo una idea del porqué se fijó en mí o porque me puso a tu lado, pero te ayudaré a descubrirlo.

La risa baja de Loan era fuerte y llena de burla. No habia intención ni emoción por la vida de Isadora, es solo un objeto más a sus ojos — Pequeño ciervo ¿No estás siendo demasiado interesante? Convénceme, te daré diez segundos— Dijo Loan con Indi