Lo primero que intentó Yusuf y Burak fue intentar indagar de dónde provenía el arreglo de flores pero resultó un callejón sin salida pues el obsequio había sido dejado en la seguridad de la entrada por un joven a quién habían detenido en medio de la calle y pagado para que lo entregara.

Cansados del recorrido que habían hecho para encontrar la información se detuvieron a refrescarse, — Te agradezco que me apoyes en estos momentos.

— No es problema, supongo que para eso somos hermanos.

— Mi intención no es ofenderte Burak pero hasta no hace mucho te mostraba a veces como mi enemigo, de hecho eras el aliado de mamá.

— Es lógico que no confíes en mí, supongo que mis acciones me preceden y deberé demostrar mi lealtad pero supongo que de un tiempo para acá comencé a dudar que seas el culpable de todas mis desgracias.

— ¿Pensabas eso?

— Estaba herido y te envidiaba, siempre te vi como el favorito de papá, pero creo que todo lo que viví es responsabilidad de mis padres.

— Nunca contast