Lexie tenía en su plantilla a ex militares, pidió que se acercaran con un ataque planeado para extraer a los cuatro padres, otros que fueran por sus esposas e hijos y les sacaran de Mainvillage.
Gracias por leer la jefa, recuerden que su opinión es importante dejen reseñas para invitar a nuevos lectores en el inicio del libro y siempre estoy pendiente de sus comentario ¿Están disfrutando de la novela? Se vienen demasiadas cosas y este fin de semana maratón así que pendientes a mis r e d e s
Berrocal vio el auto en el cual se suponía se tenían que subir, observó los autos de quienes estaban disparando hacia el hospital y se dio cuenta de que no podían ir en esa dirección porque alguien les había traicionado. Descartaba por completo a Varo ni Chapas; el primero porque sentía que Lexie le pertenecía y no haría nada por lastimarla, había pasado semanas intentando recibirse después de que balearan su casa. El segundo porque era más léala que nadie, además el Chapas conocía la gratitud, así que quedaba la pregunta en el aire quién en su equipo querría darle información a la gente de Asher sobre los planes que hacían. Le quitó el audífono a su esposa y dijo a Varo: —Que bajen y abran fuego de defensa. —Hay dos hombres en el techo, quiere que abramos fuego ahora. —Espera a que recarguen las armas y abrimos fuego.
Lexie quería que todos los ruidos de los demás se detuvieran. Miró el camino a Berrocal y el teléfono en la mano de su esposo. Ella le tomó la mano y le preguntó: ¿confías en mí? Berrocal sonrió y le tomó de la mano. Ella le dio indicaciones al chofer para que les sacara de la ciudad en auto, no se tomó la molestia de cancelar el vuelo, simplemente se encargó de alejar a su esposo de la ciudad y los riesgos que podía representar un vuelo de varias horas tras una cirugía abdominal. Tendrían tres semanas para que Berrocal se recuperara, estar solos, pensar en cuál sentía su siguiente paso y descubrir qué estaba pasando con su familia, específicamente en qué putas estaba pensando su papá para que dejase a Asher libre. Cinco horas más tarde estaban llegando a una casa pequeña, cerca del mar, alejado de todo y de todos. Lexie despertó a su esposo el cual había estado durmiendo casi todo el camino. Berrocal estaba alg
Después de una hora de intentos Lexie logró comunicarse con su abuelo. El cual le dijo que estaba viajando hacia Monte Cruz para reencontrarse con su esposa. Raymond estaba oficialmente desaparecido. Su padre había puesto a varios equipos a buscarle y tras darle la noticia a Lali.Tras darle la noticia a Lali se descompuso, era evidente que su abuelo estaba reteniendo información porque Lali era la mujer más fuerte que conocía. Berrocal se sentó junto a ella en el sofá y le pidió que se tranquilizara. Los días anteriores estaban resultando ser una m****a. El Chapas les preparó un té para descansar, la receta de su abuela, lo sirvió en tres tazas y Lexie le dio las gracias por cuidar tanto de ellos, nada era fácil, pero tener a alguien como el Chapas siempre pendiente, dispuesto a dar su vida por ellos era invaluable. Los tres conversaron durante unos minutos sobre las posibilidades de la liberació
Después del maravilloso masaje que le hizo volver a quedar dormida, Lexie despertó con el maravilloso olor de una mariscada. La mujer salió de la habitación y se encontró con el Chapas, William y Berrocal cocinando a la leña, los tres hombres estaban disfrutando de la música. Vio salir por la cocina a Regina y la cual le saludó desde lejos. Lexie se acercó a ella y se disculpó por ser una pésima amiga.—Nunca he tenido amigas así que eres una buena amiga.—Las dos mujeres se miraron y rieron divertidas.—Un hombre se acercó y le saludó.—Soy Lucas.—Lexie—respondió la mujer mientras estrechaban manos.—Lucas es mi esposo, señora—Dijo William y los dos sonrieron.Lexie vio a Regina, al Chapas y a Berrocal.
Asher se había esforzado demasiado en secuestrar a Berrocal y a su esposa. Había tenido que ponerles a dormir a todos en tierra, primero a los navíos que les esperaban para proteger a los mafiosos más importantes de la ciudad. Asher estaba seguro de que Lexie y Berrocal no sabían cuán poderosos eran todavía y eso le había facilitado demasiado el trabajo.Berrocal despertó y vio a Asher sentado sonriéndole. Berrocal se quedó quieto mirándole y se revisó la ropa, no tenía faja, solo ropa interior, a su lado estaba Lexie la cual estaba amarrada viéndole. —Cúbrela. —No estoy sexualmente interesado en ella—Berrocal se le quedó viendo molesto. Asher se puso en pie y tomó una manta, se la puso encima a Lexie. Ella le observó de pies a cabeza, había escuchado tanto sobre él y había visto fotografías, pero era imponente en persona. Veían rasgos rusos o alemanes en su rostro, con una estatura que se acercaba a
Berrocal Un año más tarde Mi primer suegro decía que darle poder a una mujer era como darle poder a un adicto, ellos siempre quieren más y ellas son exactamente iguales. Me parecía el cabrón más cabrón de todos, así que siempre que hacía esa broma me iba de la habitación y me ponía a trabajar. Una tarde me llamó a la oficina para discutir negocios y Luna entró con su barriga de seis meses y en la mano diferentes paletas. Se sentó sobre el regazo de su papá mientras hablaba aceleradamente. Los dos nos miramos y estallamos en risas porque la emoción no le dejaba hablar. —Es muy complicado. Es que qué putas es seguro para una persona que no tiene consciencia, es pequeño y rápido. —Luna, tú lo que ocupas es un hombre —Dijo su padre y rio. —Nosotros dos, somos hombres y tu vida está por resolverse. Vamos a combinar mi mandonería, tu neurosis y la inteligencia de este para hacer negocios. —Gracias
Lexie Terminé de cenar, despacio, es que estaba demasiado bueno, un bistec espectacular, en su punto, unas verduritas salteadas, aguacate y de postre la huevada de mi marido. No le culpo, yo sentiría miedo de dormir conmigo, pero nunca he entendido la necesidad de los hombres de follar con uno, luego preocuparse por si soy la persona que le va a quitar la vida de una forma no sexual. Está cagado del susto, yo pensaría en retirarlo por la ventana, es la forma más práctica de matarle en este momento, sin embargo, el problema es que me gusta el hombre, me pone todo de él, su cuerpo, su mente, su energía. Berrocal es todo mafia y sexualidad. Sé que mataría a alguien por mí y yo lo haría por él, pero entre menos sepa algunas cosas, más protegido estará, así como las personas de las que tanto quiere saber. Marqué el teléfono y puse en modo de videollamada, solo me guardé la sorpresa para luego, porque el cambio físico en Asher y Cri
Berrocal Estaba acostado con mi esposa acariciándome el pecho. Durante el último año he descubierto que Lexie no es una persona de palabras, sino de gestos y los más pequeños son sus favoritos. Mi esposa me recordó que debíamos alistarnos para el despegue. Repasó conmigo las claves mientras nos vestíamos. Sé que esto es por negocios, pero lo que más me preocupa es que esté esforzándose tanto por ocupar los zapatos de un hombre que tuvo tanto poder. Mi esposa se acercó a mí y me acomodó el cuello de la camisa, le pasé las manos por las caderas y ella se inclinó y me besó. —Apenas estemos acomodados vamos a hablar de lo que quieras—respondió y me dio un beso en los labios.—Ahora, vamos a encargarnos de unos cabos sueltos. Nos sentimos con el cinturón puesto y me comentó quién estaba a cargo de Nueva York, lugar en el cual estaba colapsando por la baja de drogas. Lexi