Luego de transcurrir unos cuantos minutos de que Dmitriy había permitido que Mía estuviera manoseando su cuerpo logro descubrir algo más, al instante la detuvo, conecto la mirada con la suya y luego sonrío de medio lado. —Está bien, nos casaremos —respondió Dmitriy teniendo sus planes bien claros. —¿En verdad lo harás o solo lo estás diciendo para burlarte de mí? —indagó Mía mostrándose emocionada.—Sí, te prometo que así lo haré, pero mientras tanto mantendremos la distancia, no quiero que ese tipo de situaciones se vuelva a repetir —Mía asintió rápidamente con su cabeza, luego beso sus labios y salió de allí emocionada como nunca antes. «Desde el primer momento en el que te vi estás intentando tenerme cerca de ti, dices que me amas y esta será una de las formas en que me pueda vengar de ti por lo que tu padre me ha hecho, no siento nada hacia Mía, pero la utilizaré para restregarte en la cara que tú no me importas Irina», aseguró Dmitriy, aún sabiendo que estaba tomando una pési
Días más tarde.Luego de la muerte de Stephan, Dmitriy comenzó a manejar los negocios por su cuenta, por supuesto las ganancias habían incrementado; en aquel momento se dio cuenta que su socio además de traicionarlo lo estaba robando de manera masiva. Era un día fuera de lo normal, había llegado el momento de cumplir su promesa, a pesar de que no sentía nada por Mía, había prometido casarse con ella para así causar más dolor en la familia de Fedor, especialmente en Irina.Pero en aquellos últimos momentos se estaba arrepintiendo, no sentía nada por ella, lo único que quería era poder terminar con aquello que había iniciado, acabar con Fedor y su familia.Los preparativos para aquel día los había hecho por lo alto, la propiedad de Dmitriy se encontraba decorada para la celebración; Ivan permanecía al lado de su jefe asegurándose de que todo estuviera bien.—Hoy quiero pedirte algo muy especial; quiero que te asegures que Mía llegará bien a la iglesia, a pesar de que no soy esa clase d
Dmitriy fue llevado en contra de su voluntad hacia el interior de la propiedad de Andrei, por supuesto que fue necesario atarlo a una silla debido a que no se quedó quieto.—Déjenos solos —ordenó Irina a sus hombres, al instante ellos se retiraron.—¿Qué pretendes hacer conmigo?, supongo que todo esto se trata porque aseguré que iba a acabar con tu padre, pero la única forma en que lo puedas evitar es acabando con mi vida, de nada servirá que me tengas atado en esta silla —Irina sonrío.—Irónicamente te rescaté de los hombres de mi padre, así que he salvado tu vida, estás en deuda conmigo —Dmitriy soltó una sonora carcajada.—No intentes burlarte de mí, porque no he creído ni una sola palabra que ha salido de tu boca, acabaste con mis hombres y armaste todo este show únicamente para intentar quedar bien conmigo, aunque no lo creas serás muy difícil que logres engañarme.—Piensa lo que quieras —interrumpió Irina y luego caminó frente a él meneando su cuerpo.—¿En verdad planeabas imped
Mientras que Ivan y el resto de sus hombres buscaban a Dmitriy, él se encontraba atado a una silla y a punto de ser apuñalado a manos de Alexandra.—Nunca había escuchado de ti, eres la encargada en desaparecer a los enemigos de la familia —Dmitriy se burló. —No interesa quien sea yo, lo único que importa es que tu fin ha llegado, haré lo que mi hermano, mi sobrino y otras cuantas personas más no han podido hacer —Alexandra sosteniendo aquella filosa navaja en su mano la acercó directo a su cuello.—¿Qué estás haciendo tía?, es un hombre muy peligroso, mantente alejada de él si no quieres terminar lastimada —Irina interrumpió.Alexandra apretó con fuerza los dientes, si su sobrina se hubiese demorado unos pocos minutos más, todo hubiese sido diferente, ella hubiera logrado conseguir su cometido.De manera sigilosa Alexandra logró guardar la navaja nuevamente en su bolsillo, giró su cuerpo y luego sonrió.—¿Qué haces con este hombre en esta propiedad?, él es un enemigo, en lugar de te
Dmitriy lentamente se fue dejando llevar por el momento, sus mejillas se unieron lentamente recosto los labios sobre los suyos y la besó, Irina correspondió, levanto los brazos y tomó sus mejillas, mientras que él permanecía distante. Mientras que probaba sus labios sentía que estaba viviendo un sueño confuso, decidió dejar de un lado por un instante aquel odio en contra de Irina, para así poder corresponder como ella lo pedía. Los besos fueron cada vez más intensos, Irina bajó los brazos y lo abrazó con fuerza, mientras que él trataba de corresponder, levantó los brazos los colocó sobre sus caderas, ella lo estaba dando todo, sabía que una oportunidad similar no la podría tener. Con delicadeza arrebató el saco sobre sus hombros y luego lo dejó caer, cada vez que él intentaba detenerse o separarse ella lo evitaba.Irina colocó un poco de música para alivianar la tensión, aprovechaba cada movimiento para aferrarse más a él, se fue adaptando hasta que logró conseguir que él pudiera c
Dmitriy intentó detenerse, pero por más que lo quería hacer, su cuerpo y su corazón no se lo permitieron, lo que estaba viviendo era único y a pesar de su promesa, deseaba continuar sintiendo la piel de Irina.Trago saliva y continúo disfrutando del momento, estiró el brazo y se aferró de sus pechos, mientras que con la otra acariciaba su trasero, Irina cabalgó sobre él sin detenerse hasta que llegaron a su nivel máximo de placer, los gemidos que salían de ella hicieron que Dmitriy se estremeciera quisiera más de ella. Dmitriy la tomó de la cintura, y de manera ágil giró su cuerpo quedando él arriba, Irina levantó las piernas y con la punta de los dedos sostuvo sus tobillos.—Toma todo lo que quieras de mí, todo te pertenece a ti y a nadie más —aseguró ella con la voz temblorosa. Dmitriy ingreso en ella brindándole fuertes y largas estocadas, su piel se colocó de puntitos al sentir como su erguido miembro golpeaba contra su útero; Dmitriy dobló su cuerpo y la besó con intensidad, mo
Los rayos de luz ingresar a través de la ventana golpeando de frente contra sus rostros, Dmitriy despertó, una vez que abrió sus ojos lo primero que observó fue el rostro de Irina, era hermosa no lo podía negar, en medio de la confusión, se sentía culpable por haber traicionado la memoria de su difunta esposa.Pero, al mismo tiempo se sentía satisfecho, cómodo y feliz, de repente ella despertó, él movió el rostro para evitar tener el contacto directo, Irina sonrió, llevó una de sus manos hasta su mejilla e hizo que conectaran la mirada. Irina acercó los labios contra los suyos y le brindó un cálido beso, Dmitriy no se molestó al negarse, todo lo contrario correspondió con el mayor afecto, inexplicablemente él quería continuar, lo había disfrutado de manera especial, que necesitaba sentir nuevamente aquellas caricias recorrer su cuerpo.Irina de inmediato levantó su cuerpo y subió sobre él, para ella era su mejor despertar, por un largo tiempo añoraba estar al lado de su amor verdader
Aquella intervención había logrado que una lluvia de fuego se desatara en aquel lugar, Ivan arrugó las cejas buscado descubrir de quien se trataba aquella mujer que se acercaba meneando su cuerpo como una felina enfurecida. —He dicho que bajen las armas, ¿por qué no lo hacen? —reclamó mostrando molestia aquella mujer, por supuesto que Mía por nada del mundo bajo la guardia. —¿Quién demonios eres? —indagó observando su cuerpo de pies a cabeza. —Sé muy bien lo que estás buscando, o mejor dicho a quien buscas; nunca llegué a imaginar que mi trabajo fuera más fácil de lo esperado, pero claramente a la fuerza no vas a conseguir nada, solo un estúpido estaría seguro que podrá irrumpir en esta propiedad sabiendo la seguridad que hay. —Busco a mi prometido, no me iré de este lugar sin él, así que si no quieres arruinar tu bonito vestido te sugiero que te hagas de un lado, porque una lluvia de fuego recibirás de nuestra parte —aseguró Mía.—Abran la reja —ordenó Alexandra, pero aquellos ho