Lauren se zafó de Jeremy y continuó caminando hacia afuera y se dirigió al estacionamiento, él la siguió, Bridget al ver lo que hizo comenzó a llorar como una niña, no le importaba que en ese momento se encontraba en un lugar público. Daniela intentó calmarla. —Ya amiga, tranquilízate. —Entre sollozos respondió:—¿Cómo me voy a tranquilizar si se fue como perro faldero detrás de ella?Michael decidió ir tras Jeremy, cuando lo alcanzó le dijo:—Jeremy, ¿estás consciente de lo que haces? Dejaste a Bridget plantada. ¿Olvidaste tu plan de pasar más tiempo con tu prometida? —Jeremy lo escuchó, consternado se detuvo reconoció que Michael tenía razón, miró a Lauren que cada vez se alejaba más de él. Michael agregó: —Vamos con Bridget y olvídate de todo esto. —No quiero regresar con ella, mejor llévatela a casa.—Pero Jeremy. —Él volteó a mirar hacia donde se encontraba Bridget.—Por favor, llévatela, necesito estar solo, me iré a mi auto, no voy a buscar a Lauren, sólo necesito pensar.—
Anni regresó al cubículo con Lauren mientras que Jeremy se quedó en la sala de espera; ahora él estaba con una preocupación más, pues Lauren podía estar embarazada. Suspiró y se pasó la mano por la barbilla haciendo movimientos nerviosos, la piel de la cara se le puso brillante, pues sudó sin darse cuenta de tanto pensar. "Si está embarazada las cosas serán aún más difícil para separarme de ella, con un hijo mío ella tendrá más beneficios. Esto es una tontería, no sé por qué me preocupo, ese desmayo no significa que está embarazada, y si lo está es posible que no sea mío; como sea, no debería estar tan preocupado."***Bridget se marchó del pueblo con Michael y Daniela, iba en el asiento trasero llorando como niña.—¡Es que no puedo creer que Jeremy me esté haciendo esto! me trajo a este miserable pueblo para humillarme de la peor manera. —Michael le dijo:—Te aseguro que Jeremy no tenía esa intención, él vino contigo porque yo se lo sugerí, jamás nos íbamos a imaginar que Lauren es
Jeremy y Lauren llegaron a la mansión y entraron a la sala, preciso en ese momento Megan y Bridget iban bajando las escaleras, se habían reunido a charlar en el segundo piso. Ambas se quedaron mirando a Lauren, luego Megan posó sus ojos sobre Jeremy. —¿Esto qué significa? ¿Por qué esa mujer está aquí? —Lauren vendrá a vivir con nosotros, no olvides la cláusula del testamento del abuelo. —Estoy segura de que puedes encerrarla en una de las tantas casas que tenemos, pero esa mugrosa no vendrá a vivir con nosotros. —Bridget se había quedado en las escaleras, pero al ver a Lauren junto a Jeremy decidió marcharse de inmediato, pero antes lanzó su veneno. —Ya veo que te quedó gustando la muerta de hambre. —Bridget, lo siento, sabes que existe una cláusula… —¡Mejor tragate tus excusas! Estabas celoso de Ethan y está trepadora, ahora la traes a tu casa; sólo espero que no sea demasiado tarde cuando al fin abras los ojos. Bridget se marchó enojada, Megan quería continuar la desagradable
—No te dejes abrumar por Jeremy, él sólo tiene dudas, pero todo se va aclarar, él va a creer en ti y te pedirá perdón. —No quiero que me pida perdón, sólo deseo no volver a verlo jamás. —Ambos deben intentar arreglar las cosas, están casados, pronto van a tener un hijo. —Lauren respondió entre sollozos. —Desearía que él no fuera el padre, cada día me decepciono más de él… y ese maldito testamento, si no fuera por esa cláusula Jeremy y yo ya nos estaríamos divorciando. —Tal vez sea el destino el que quiere que se reconcilien. —Jeremy cree que yo lo manipulé para que el obligara a su abuelo a crear esa cláusula, pero te juro que eso no es así. Ahora me quiere quitar a mi hijo, ¡no sé qué voy a hacer! —Debes asesorarte con un buen abogado, tienes tres años para hacerlo. Debes ser fuerte, no dejar que nadie te pisotee en esta casa, si Jeremy trata de quitarte a tu hijo no le des el divorcio. —Lauren la miró algo anonadada. —¿Dices que debo quedarme con él para conservar a mi hijo?
Lauren subió las escaleras, por dentro estaba afligida, ni sabía de qué manera iba a aguantar convivir con su esposo que la odiaba.En el pasillo se encontró a Megan quien de inmediato la atacó con sus palabras.—Ni te creas que te vas a salir con la tuya, mi hermano no te quiere, tampoco te quedarás con un centavo de su herencia.—No me interesa hablar contigo —Intentó pasarle por un lado, pero Megan la agarró del brazo y clavó sus uñas en su piel.—No intentes ignorarme cuando te hablo, aunque seas la esposa de mi hermano no olvides de dónde provienes, eres una triste empleada, una sirvienta.—Suéltame.—No se me da la gana. —Lauren sacudió el brazo y se zafó.—Maldita muerta de hambre, ojalá te mueras para que dejes a mi hermano en paz, y ese mocoso mal…—¡No te atrevas a meterte con mi hijo!—Ja, Me atrevo a eso y a más, ni creas que va a ser aceptado en esta familia, estoy segura que mi hermano te echará la calle junto con ese mocoso. —Lauren le dio una fuerte cachetada, el ruido
Todos los que estaban implicados en el testamento del difunto Henry Remington recibieron la notificación de que debían estar presentes para su lectura; Lauren y Jeremy recibieron dicha notificación en la sala cuando el mensajero del bufete les entregó a cada uno la que le correspondía. Jeremy abrió la suya y leyó lo que decía, luego miró a Lauren que estaba leyendo la de ella y frunció el ceño, de inmediato con recelo le dijo:—Debes estar muy contenta. —No lo estoy. —Tiró el sobre sobre una mesa de mármol que había junto a la pared.—Mentirosa, desde antes sabías que esto pasaría.—No, no lo sabía.—Entonces explíqueme cómo es que mi abuelo que te odiaba tanto te agregó al testamento. —A Lauren se le aguaron los ojos de la amargura que llevaban por dinero, Jeremy cada día era más insoportable, ya la tenía harta.—Tú lo hiciste.—Entonces reconoces que lo sabías.—No, no sabía lo del testamento, pero me dijiste que él debía retistuirte todo lo que te había quitado de niño, que ibas a
Al otro día en la tarde Jeremy llegó de la oficina, no había ido a almorzar, por lo que no había visto a Lauren, Hans le dijo que ella se encontraba en el jardín, Lauren se había cambiado la ropa fina que usó durante el día y se puso un vestido fresco y sencillo, de los que siempre había usado antes de casarse con Jeremy. Él llegó y la encontró tendida sobre la grama acicalando al perro, estaba contenta y sonriendo, él se quedó observándola sin decir nada, disfrutó de su belleza sencilla que podía apreciar en ese momento. De repente ella se percató de su presencia, su sonrisa se apagó y un par de líneas se marcaron en frente, dejó al perro y se puso de pie.—¿Qué quieres?—Gracias por saludarme como una esposa amorosa.—Tú y yo no necesitamos tratarnos con cariño. —Él sonrió con malicia.—¿Entonces cómo debemos hacerlo?—Deberíamos procurar no vernos la cara.—Tienes razón, hoy hablé con la tía Vera, me propuso que deberías ir con ella a Italia, supongo que ya lo sabes.—Eso sería l
Lauren regresó a la mansión con desánimos y sin ganas de comer. Subió directo a encerrarse en la habitación, con el alma en pena se tiró la cama a pensar y se tocó el vientre."Nunca imaginé que iba a ser tan desdichada con Jeremy, ahora solo me queda luchar por este hijo, juro que él no me lo va a quitar, tendrá que matarme para hacerlo. Si tengo que ser su esposa por el resto de nuestras vidas, juro que lo haré."En la noche no quiso bajar a cenar, Jeremy fue a la habitación.—Hasta cuándo debo soportar que no te presentes en la mesa y me dejes plantado delante de todos.—¿Acaso no puedes comer sin mí?—Sabes muy bien a qué me refiero, en esta familia existen reglas y costumbres, tienes que adaptarte.—No creo que sea necesario mi presencia en la mesa donde estás con tu familia.—Ahora formas parte de esta familia que tanto detestas, pero si insistes en no querer bajar a comer todos los días, tendré que obligarte, así sea jalándote de las mechas.—Pues se te caeran las manos de tant