Diana ha estado hablando y hablando tanto sobre mi cita de esta noche que me ha puesto nerviosa.
Todas las suposiciones de a donde me llevará Nathan me han hecho suponer también, aun cuando dije que no lo haría, me están llevando al borde de la locura.
Serena ni que se diga, está en estado de shock aun tanto por la cita y los besos entre Nathan y yo como por la cita de mi hermana y Justin.
Justin… he intentado todo el día en no pensar en él ni en Anabelle. Pero aparece cuando menos lo espero.
Ni yo misma me explico porque, supongo que aún no termino de entender como coqueteo conmigo para luego salir con ella. Incluso besarla delante de mí e insinuar lo que harían después. Serena cree firmemente que salían de antes, Diana por otro lado lo duda porque Ryan nunca comento nada.
Como sea debo dejar de preocuparme por ello, se supone que estoy trabajando en vivir e
Anoche no dormí nada pensando en su mensaje ¿Qué quería? ¿Por qué de repente me escribía y precisamente esa noche? No preguntes cosas que no te responderás a ti misma Danielle. Gruñí.Di vueltas y vueltas en la cama, mirando el teléfono sobre mi mesa de noche pero no le escribí. Me rehusé a hacerlo. Su “podemos hablar” se lo puede meter por el culo.¿Y para que contestarle? No que sale con mi hermana, que le escriba a ella seguro que tienen mucho que hablar o quizás nada en sí ¡Mierda! Necesito sacar esos pensamientos de ellos dos de mi mente. Suenas celosa querida. Ruedo los ojos, celosa ni loca.Y yo realmente necesito parar de pensar en ello, tengo un examen importante el lunes y solo necesito terminar la clase para ir a la biblioteca. Y apenas se hace la hora salgo volando a clases.Camino por los pasillos un poco indiferen
—Sigo sin entender ¿Cómo es que sales con este? —pregunto Devora señalando a Justin——Por enésima vez, no salimos —respondí.Hacía rato que habíamos terminado nuestras hamburguesas y ellos seguían bombardeándome con preguntas sobre Justin.—Permite hablar a mi entonces —Phill se aclaró la garganta pero no hablo, en su lugar golpeo a Justin en el hombro.—¿Qué rayos…? ¿Qué mierda te pasa? —espetó Justin.—¿Cómo es que tú no sales con ella? —blanqueé los ojos.—Chicos ya les he aclarado que sale con mi hermana —dije seria.—Creo que eliges a la chica equivocada —murmuro Devora mirándome—. Mírala, dudo mucho que su hermana sea más guapa&
—¿Dónde estuviste anoche? —le di una mirada desaprobadora a Diana y volví mi vista al profesor—. No me ignores Danielle—No te ignoro, tenemos que prestar atención —susurré.—Como si el señor McLaren nos pudiera ver desde allíEse era un bueno punto, el señor McLaren apenas veía y Diana y yo estábamos sentadas en el fondo.—Sabes que tengo razón, ahora dime—Estuve e
Yo habría esperado sorpresa, incluso incredulidad de su parte pero su expresión era la misma, con un poco de diversión creo… ¡Esperen! El…—¡Hijo de perra! —exclame golpeándole el hombro—. Lo sabías—¿Saber qué? —dijo con expresión inocente.—No te hagas el inocente ahora —espeté—, sabías que no era Anabelle desde un principio ¿No es así?—No sé de qué me hablas
La cita con Nathan fue buenísima. Fuimos a jugar bolos y comimos hot dogs. Nos despedimos con un largo beso en la entrada de las habitaciones y luego entre sin esperar a verlo alejarse. Se las había arreglado para que me olvidara por completo de lo que sucedía, Nathan siempre había tenido esa cualidad. Pero a penas puse un pie dentro del edificio y escuche, más que ver, como su auto se alejaba comencé a cuestionar mi decisión. No había sido muy buena idea aceptar ser su novia, él de verdad se interesaba en mi mientras yo…No podía, tenía que parar pero siempre lograba meterse en mis pensamientos. «Quizás Nathan sea el indicado para qué deje de pensar en Justin… el novio de mi hermana» ¿Podía se
Llueve.El día gris refleja exactamente como me siento. Triste, vacía… desolada.Anoche luego de nuestro definitivo “adiós” y de que Justin se marchara, subí los escalones de la escalera a mi habitación. Agradecí que Olivia no estuviera porque no sabría que hubiera sucedido.Me cambie y me metí a la cama pero no pude conciliar el sueño.Segundo tras segundo venía a mí la imagen de Justin yéndose y llevándose una parte de mi con él.
—Ya está, dijo que nos verá allá —asentí y puse en marcha el auto mientras Valeria guardaba su celular en el bolsillo.—¿Qué más te dijo? —suspiro.—Que todo estaría bien —bufe.—¿Existe la posibilidad de que estés embarazada y te dice que todo estará bien?—¡¿Y qué quieres que me diga?! Por lo menos está aquí ¿No? —apreté las manos en el volante.
—¿Me estás echando? —jadee.—¿No fuiste tú quien dice que no volverías?—Valeria me necesitaba, solo por eso vine —espete.—¿Valeria? ¿Desde cuándo te necesita Valeria? —dice con incredulidad.—Desde que ha estado vomitando —sus ojos se abrieron—. Si papá ¿No lo sabías? Por supuesto que no. Estas demasiado ocupado jugando a la familia feliz que no te das cuenta lo que realmente pasa en tu casa—No me hables en ese tono, no tienes ningún derecho—Me da el derecho de ver a mi hermana como está. Delgada, débil y tu ni siquiera lo notas pero por supuesto que no. Tardaste seis meses en darte cuenta lo que me ocurría, pasa lo mismo con Valeria—Tú y Valeria no tienen nada que ver—Pues la verdad es que si —sisee—. Aunque te