La chica comenzó frotándose levemente con un dedo, estaba sensible, húmeda y por completo excitada, y el verse a sí misma, sintiendo tanta necesidad, la obligo a morderse un labio, de inmediato, se dirigió a la cama que esperaba que fuera lo suficientemente cómoda parea conseguir su objetivo, por supuesto sin olvidarse del juguete que Dominic muy gentilmente había dejado para ella en el ultimo cajón del mueble en su habitación.
Abigail se acostó en la cama, y llevo sus manos a sus pechos, la chica se masajeo los pezones y se apretó los pechos, de inmediato comenzó a mover sus manos alrededor de todo su cuerpo, el calor que le generaba el estarse tocando a sí misma, era increíble, y eso solo la alentaba para no detenerse, y por el contrario continuar con esa deliciosa tortura.
La chica abrió las piernas, y bajo su mano derecha hasta su centro, allí se froto de
Dominic salió de la habitación en la que siempre se encontraba con Alexis, y entonces pensó en comer algo, se sentía hambriento, y un poco cansado, asi que fue hasta la cocina en la casa de las chicas, que era donde se encontraba y le pidió a los chefs que le prepararan un filete de Salmon con papas grille, que era su comida favorita.El hombre, tratando de entretenerse mientras estaba allí, se sentó en uno de los taburetes de la barra que había en la cocina, y saco su celular y sus audífonos del bolsillo de sus pantalones, pensó en ver una película en Netflix, pero él nunca había sido amante a la televisión, y tampoco queria leer un libro, pensó en escuchar música, pero tampoco le apeteció demasiado, sin embargo, de inmediato se le ocurrió la que él creía era la mejor idea, Dominic entro en el sistema de video de las cámaras de se
Dominic se quedo en la barra comiéndose el delicioso filete que el chef le había preparado, el pescado estaba jugoso y su cobertura estaba crocante, justo el punto que a él le gustaba. El hombre, soltó una risa mientras recordaba la forma en la que Abigail había intentado quitarle el celular, como si fuera un bebe y le estuviera quitando un dulce, por desgracia Dominic se había pasado la vida entera entrenando y haciendo deporte, y eso, además de haberle dado un cuerpo musculoso, también le había dado agilidad, pero con Abigail era mas fácil, Abigail era fácil de leer, él casi que podia adivinar lo que ella estaba pensando sin necesidad de que abriera la boca, Abigail era como una gacela expuesta y en peligro, y eso lo excitaba.Dominic volvió a ver en su celular, el video grabado, lo tenia allí, para cuando quisiera verlo y deleitarse con ese cuerpo tan erótico de ella, s
Dominic suspiro mientras veía a la chcia cuyo trasero desnudo se veía suave y aterciopelado, e intento tranquilizar su respiración, verla allí tan sumisa, lo excitaba, le encantaba la imagen que tenia delante de él, ella podia ser suya en ese momento si queria, sin embargo, eso no se trataba de placer, si no de un castigo por la desobediencia de ella.El hombre se acercó, le acaricio el culo mientras ella lloraba, y tras sobarla un par de veces, se alejo lo suficiente, y comenzó con la tortura, Dominic agito el látigo de cuero en dirección horizontal, e impacto el artefacto contra la piel de Abigail.La chica sintió que la piel le ardió con fuerza, pero no podia quejarse, ni moverse, porque las esposas la maltrataban más, asi que solo se quedo allí, quieta, llorando por lo que le estaba pasando, llorando y odiando a su padre por haberla vendido a un maldito enfermo de la cabeza.<
Había pasado un mes desde que Dominic había castigado a Abigail en esa oscura habitación, un mes desde que ella sentía que se había terminado de romper, la Abigail que había salido temblando de esa habitación no era ni de cerca la chica que había llegado a esa casa, Abigail se sentía destrozada, rota y de alguna manera sentía que ya no se podia reparar.Dominic había roto algo en ella, la había humillado en todas las formas posibles, y como sabía que no iba a conseguir nada luchando, a la chica lo único que le restaba era intentar sobrevivir en esa casa en donde cada vez le parecia más insoportable vivir, ella pasaba su tiempo en su habitación, durmiendo, o cuando se sentía de un ánimo medianamente bueno, leía un libro, se le habían quitado básicamente las ganas de vivir, estaba en una jaula de oro de la cual queria escapar, aunque
Abigail entro en la casa echa una furia, tenía rabia, con Dominic por ser un idiota, imbécil y un animal, y con ella por haber sido tan tonta como para creer que él de verdad podia concederle, aunque fuera una pequeña cosa.No entendía la logia del hombre, ¿Cómo era que funcionaba el cerebro de Dominic? De seguro el hombre no debía ser normal, ¿Por qué no queria que ella tuviera interacción con otras personas? ¿Por qué era tan extraño? Eran las preguntas que se estaba haciendo en ese momento Abigail. Y aunque no conocía las respuestas, podia llegar a una conclusión.Dominic era un enfermo, y el problema era que ella estaba atrapada con él.La chica, que estaba casi ciega de la rabia, corrió por el pasillo para llegar a su habitación y echarse a llorar, igual a como hacia siempre, pero en el camino, tropezó con un cuerpo menu
Ambas chicas entraron en la habitación, Charlotte tuvo que arrastrar a Abigail hasta allí, porque la rubia sentía que sus piernas eran unas gelatinas que no la iban a dejar avanzar más, tenía miedo, estaba temblando, y sentía que podia desmayarse en cualquier momento, sin duda alguna ella no soportaría vivir lo mismo otra vez, mucho menos cuando no había hecho nada para merecérselo. Porque ni siquiera hacia una hora que se había reunido con él y había querido escupirle lo había hecho.Por otro lado, Charlotte podia hacerse una idea clara de que se trataba eso, sabía que era por su culpa que estaban ahí, y lo único que lamentaba era que Abigail estuviera siendo arrastrada por sus errores. Aunque en realidad no eran del todo errores, amar a otra persona que no fuera Dominic no era un error, eso solo la hacía humana.Las chicas se quedaron de pie en la en
Después de salir de la habitación con el corazón completamente acelerado, Abigail llego a su habitación y se metió enseguida bajo el agua fría en su baño, necesitaba apagar lo que sentía en su interior, debía deshacerse de eso, porque ahora que estaba afuera de la habitación y que la excitación había pasado, se dio cuenta de que sentía vergüenza por lo que había hecho, había tenido sexo con otra mujer, y a pesar de todo eso le había gustado, lo había disfrutado y no sabía si eso era algo normal, o si significaba algo más, entre más corría el agua fría, más avergonzada se sentía y más preguntas se hacía a sí misma, pero había una en particular que taladraba contra su cabeza.¿Cómo iba a mirar a Charlotte a los ojos después de lo que hicieron?Sab&iacut
-¿Para qué me necesitas? – pregunto ella, sin estar atemorizada como las veces anteriores en que él se acercaba, si queria golpearla, pues ella lo resistiría, si queria que hiciera parte de alguno otro de sus espectáculos sexuales pues lo disfrutaría, ya no queria dejarse amedrentar por Dominic, por su presencia ni lo que dijera.-Quiero hablar contigo – él sentencio, sentándose en un taburete al lado de Abigail.En cuanto la chica lo vio, se dio cuenta de que había algo diferente en él, no estaba a la defensiva, o intentado atacarla, él casi parecia un ser humano normal, y Abigail no sabía que la inquietaba más, si esa nueva faceta o la faceta salvaje del hombre.-Adelante – lo animo.Él lo pensó por un par de minutos, apretó la mandíbula y se aseguró de lo que queria decir.-¡Podrás volver a