Pasó un mes y yo seguía aquí cautiva, ya había dejado de llorar después de una semana supe que eso no iba a ayudarme, nadie me haría caso, todos me miraban y actuaban como si todo esto fuera normal….
Alexander venía dos veces por semana, pero siempre acompañado de una mujer, a la cual metía a la habitación y me hacía escuchar como tenían intimidad, lo hacía a propósito, y al día siguiente venía y me lo restregaba en la cara.Tuve que empezar a hacer mis propias cosas, limpiar el cuarto, lavar mi ropa, hacer mi comida, fue tal y como dijo el primer día que llegué aquí, valía menos que cualquiera en esta casa… Había una chica llamada Saly ella se encargaba de hacerme la vida más imposible de lo que ya era, se burlaba, me empujaba, ensuciaba lo que ya había limitado… dejaba la cocina limpia luego de preparar mi alimentos y ella venía y lo volvía ensuciar y le hacía saber a Alexander que había sido yo…Este venía y me reprendía cómo si fuera yo una niña ya me había agotado de eso y en día no pude aguantar más.-Mírate la niña rica que pensó que se casaba con el hombre de sus sueños- me dijo con burla- eres patética, Alex jamás se fijaría en alguien tan débil como tú.-Podrías dejarme tranquila, ni siquiera sé quién eres y llevas semanas molestándome- le dije mientras me daba la vuelta para salir de la cocina-.-A mi no me hablas así- jalo mi cabello, haciendo que jadeara por la sorpresa- aquí soy más importante que tú y me respetas.-Te crees la gran cosa solo por lo que dijo Alexander, pero jamás estarás a mi altura, allí afuera soy Ford y tú no eres nadie, así que me respetas- le dí una bofetada- no vuelvas a tocarme.-¡Maldita! ¿cómo te atreves a golpearme?-Llevas semanas en esto, pero sabes algo hasta hoy, no vuelvas a mirarme siquiera.Subí a la habitación a esperar a mi flamante esposo falso, sabía que esto no se quedaría así, ella iría corriendo a decirle cómo con todo y hoy él milagrosamente estaba en la casa.Esperé unos minutos cuando sentí, cómo la puerta de la habitación era abierta con fuerza y así mismo cerrada de un azotón.Fuí estrellada con la pared mientras él me agarraba por el cuello.-Cómo te atreves a golpear a las personas que viven aquí- me dijo con furia en su voz- no estás en tu castillo de princesa está es mi casa y aquí respetas a todos.-Ella empezó, lleva días molestando y burlándose, hace las cosas y luego te dice que fui yo y tu corres y me atacas sin siquiera preguntar…. Además ella me agredió primero me tomó del cabello yo solo me defendí.-No te creo Saly no haría eso, ella es una niña dulce que creció aquí y tú una mujer caprichosa que está acostumbrada a salirse con la suya.-¡Es mentira! lo sabes, me conoces nunca me he aprovechado de nadie, ni he lastimado a nadie… estás molesto y todavía no acabo de entender el motivo, pero sí sé que te estás desquitando conmigo…. Ella me provocó y todo es tu culpa desde que llegamos me menospreciaste delante de todos y ahora ella se cree con derecho a burlarse de mí.-Dije la verdad para mí vales menos que las personas que trabajan aquí, ante mis ojos Saly es más valiosa que tú- le dijo mientras aflojaba el agarré-.-Eso tampoco es cierto, podrás decir lo que quieras, pero tu me demostraste algo diferente…. Cuando estábamos juntos, lo besos, la caricias, las veces que hicimos el amor, no pudiste fingir eso- se puso en puntillas mientras se acercaba a sus labios-Alexander al sentir su calor, su aliento se transportó a esos días, en lo que salía contrariado de sus encuentros, pensando en Laura y en la venganza que le había prometido y en Kristy en lo que ella le hacía sentir La tomó del cuello y profundizó el beso, se dejó llevar por la tensión que había tenido estos días, la deseaba, todas esa noches que le haría mujeres para que ella escuchara lo hizo pensando en ella, en los encuentros de pasión que había tenido….La tomé entre mis brazos, la besé hasta que la sentí jadear por falta de aire, le arranqué el vestido que llevaba puesto y ella me dejó hacer lo que quise con su cuerpo…..La tomé de todas las maneras posibles, mientras la escuchaba jadear y pedir más.En el fondo sabía que no debía hacerlo, no la traje aquí a esto pero no podía seguir negando más, la había deseado desde que llegamos aquí.Estuve horas tomándola, haciéndola mía, y verla así extasiada, disfrutando, mirándome con esos ojos que me habían hecho perder el norte de mis planes muchas veces, me hacía querer no detenerme.Luego de haber terminado y verla sonreír como antes, me hizo caer en cuenta de lo que había hecho, no podía verla feliz, Laura no tuvo la oportunidad y Kristy tampoco.-Era lo que querías- le dije mientras me ponía de pie y empezaba a vestirme- que te tratara como una cualquiera. -¿Qué dices? Lo disfrutaste como yo- me dijo algo indignada--Soy hombre, disfruto del sexo con cualquier que me habrá las piernas- jadeo ante mis palabras-.-Ya no sigas con esa actitud, no es justo…. Yo no he hecho nada, no soy responsable de lo que pasó- sabía que tenía razón pero alguien debía pagar-.-Eres la que va a pagar lo que hizo tu padre… no te confundas que me acueste contigo no significa que voy a cambiar.-Entonces termina con esto, quieres mi vida tómala y déjame partir en paz- me dijo poniéndose de pie caminando hacia un cajón- cómo quieres que lo haga solo dilo- sacó una tijeras y trato de cortar sus muñecas- ya no soporto esto, ya no aguanto vivir así, es horrible, dijiste que me harías querer morir, pues ya lo quiero esto no es vida, se suponía que no sería así.Vi cómo intentó cortarse y no pude dejarla hacerlo, había querido tanto esto y ahora que llegó el momento le quite la tijera y presione la leve herida que se hizo.-Déjame hacerlo es lo que quieres- empezó a llorar, de forma desesperada- por favor ya no puede seguir aquí encerrada siento que estoy enloqueciendo, déjame terminar con todo, tu obtendrás tu venganza y yo mi liberación- su cara estaba inundada de lágrimas.-No es el momento, todavía te falta sufrir mucho más, no has sentido ni la décima parte de lo que sufrió Laura….Todavía no llega tu tiempo de morir, la tire al suelo y salí de allí, ya no podía contenerme, fui a mi habitación y empecé a llorar, verla hacer eso me recordó Laura como la encontré, no pude solo ver y dejarla hacerse lo mismo.Pasó más de un mes desde la última vez que lo ví, desde esa tarde que hicimos el amor no volvió a casa… Lo espere por días quería hablar con él, tal vez sonaba masoquista pero lo quería mucho, en mi vida nunca me había encontrado como un hombre como él, sí tenía razón podía llegar a ser algo caprichosa , pero no tenía mal corazón y él lo sabía.Lo que pasó me demostró que siente cosas por mí, pero está tan enojado que solo busca la forma de desquitarse….Sé que no quiere que muera, de quererlo me hubiera dejado continuar, pero me detuvo.Me había empezado a llevar bien con la señora encargada de la cocina, Mirna era buena conmigo, me daba de comer y ayudaba con el aseo y demás cosas… pues sabrán que antes de irse Alexander ordenó que me pusieran a trabajar como el resto, que debía ganarme mi comida y estadía en esta casa.Decidí investigar más sobre la muerte de Laura como fue y el porqué, necesitaba tanto entender.-Mirna llevas mucho trabajando aquí- le dije mientras limpiaba los m
AlexanderEntré a mi habitación impactado, esto no podía ser, que carajos había pasado por mi cabeza tener sexo con ella y no protegerme, se supone que la traje aquí para cobrar venganza no para embarazarla, ahora que se suponía debía hacer, tener un hijo, de la hija del hombre que fué el causante de la muerte de Laura, esto ya era demasiado….Sé que Laura y mi madre estarían decepcionadas de mí, mi actuar iba encontrá de todo lo que ellas esperaban de mí, pero el dolor y la rabia me consumieron y aunque está del todo claro que Kristy era inocente, yo necesitaba hacerle pagar a ese maldito lo que hizo.Kristy solo fué el medio para lograr mi venganza, y aunque con la convivencia diaria, llegue a sentir cosas por ellas, nada era más fuerte que mi deseo y la promesa que le hice a Laura mientras su cuerpo se hundía en ese hueco y era rellenado con tierra, ella también era inocente y tenía sueños y metas al igual que Kristy, en mi cabeza no concebía que su hija si pudiera cumplir con eso
KristyAl llegar a esa casa todos allí me observaban con reproche, a otros se les notaba molestos, y Saly pareció que quería estrangularme, la mirada que me dió me causó escalofríos, y él pues sólo me ayudó a bajar del auto y camino dentro de la casa, ignoró por completo mi existencia, solté un suspiro cansada, Mirna fue la única que se acercó a mí y me ayudó a llegar a la habitación.El doctor había explicado que debía tener reposo y aunque ya no había vuelto a sangrar el dolor en la espalda baja persistía, sentía temor, solo trate de alejarme de empezar de nuevo junto al bebé pero toda salió mal, aquí estaba de vuelta y encima había puesto en peligro lo que se supone protegería.Con la mano en mi vientre, empecé a llorar, me sentí tan inutil, tan débil, ni siquiera eso puedo hacer, no puede huir, como haría para defenderlo ahora, si Alexander seguía con la idea del abortó, yo no tenía las fuerzas para impedirloPorque mi propio padre tuvo que involucrarse en esto, no entendía que pa
Pero Kristy no era la única que dejaba volar su mente al pasado, Alexander estaba frustrado, confundido… las cosa se le había salido de las manos, se suponía que la trajo para hacerla sufrir y ahora debía cuidarla, procurarla, estaba embarazada en ese estado no podía seguirla tratando mal. Todo estaba saliendo al contrario, había pasado meses planeando esto y lo arruinó, por no poder controlar sus deseos sexuales, la verdad era que Kristy causaba estragos en él, la quería y aunque no quería admitirlo, se había enamorado de ella, pero el recuerdo de Laura, de lo que le hicieron estaba tan presente en su cabeza, que nunca podría hacer feliz a la hija del hombre que acabó con la vida de sus hermana.Laura era ocho años menor que él y cuatro menor que kristy, solo tenía 20 años con metas y sueños como cualquier chica, ella soñaba ser una gran bailarina, recordó la emoción en sus ojos cuando él le dió la noticia de que la había inscritos en clases especializadas, Laura era una chica muy c
Kristy volvió a su habitación luego de sentirse satisfecha, en medio del desayuno Alexander recibió una llamada que lo hizo levanta de la mesa, dejándola sola y muy aliviada la verdad era que ella le tenía un poco de temor, este hombre frente a ella era el mismo del que se había enamorado pero ahora se comportaba muy distinto, no olvidaba las veces que había sido agresivo con ella, era la misma cubierta pero por dentro era alguien diferente, desconocido y misterioso para ella.Le intrigaba mucho, y la mismo tiempo quería conocer a este nuevo hombre, le quedó muy claro que el anterior era solo una farsa, y todo lo que vivió fue mentira, pero este estaba causando un gran embrollo dentro de ella, sentía la necesidad de conocerlo, de saber más de él, algo le decía que era mucho más que esa apariencia dura y fría que mostraba.Tomó una ducha, se colocó ropa cómoda y se dispuso a leer un poco, no tenía nada más que hacer, olvidó la última que convivió con personas, que no fueran las persona
Mientras Kristy creía haber solucionando su situación, su madre estaba desesperada, hace meses que no veía a su hija, ni siquiera una llamada o un mensaje, ya no aguantaba más la agonía de no saber dónde estaba, o si estaba bien, los días eran eternos y dolorosos.Kristy era su única hija, su luz, siempre estaban juntas, ella le daba fuerza para soportar lo que era sus matrimonio, y las perversiones de sus esposo, pero ahora ella ya no estaba y por mas que había intentado encontrarla no había rastros de ella.-Harvey prometiste traer a mi hija de vuelta- le decía de forma retadora a sus esposo- ya han pasado meses y kristy no aparece, no quiero imaginar que cosas le esté haciendo ese hombre.-Crees que no estoy preocupado, también es mi hija he invertido mucho en su búsqueda pero no logró encontrarla- soltó un suspiro cansado- Pero ella está bien la conoces siempre logra adaptarse a las cosas.-Esto es culpa tuya, cuántas veces no te dije que dejaras de hacer esas cosas tan pervertid
Con la mirada le ordenó a las guardaespaldas de Kristy que no se separaran de ella y él salió a enfrentar lo que sucedía afuera, que se imagina de qué se trataba.Al salir encontró a Harvey intentando entrar, con algunos hombre apoyándolo, pero está era su casa y estaba de más protegida, el sabía que en cuanto él supiera que Kristy estaba aquí vendría por ella.-¡Suficiente!, ¿cómo te atreves a venir a mi propiedad hacer un escándalo?- rugió en voz feroz-.-Se que mi hija está aquí y la quiero de vuelta, ¡ahora!, Tú no tienes derecho a tenerla aquí encerrada- soltó irritado, mientras trataba de quitarse de encima algunos hombre de Alexander- ¡déjala salir!- dijo de manera exigente -¿Quien te crees para exigir cosas?, ¡aquí no mandas!, frente a mí no eres nadie…. Además Kristy no puede irse.-No me retes, no sabes a lo que soy capaz de llegar- soltó con amenaza-.-¡Claro que lo sé!, eres un depravado que enamoras jóvenes y luego deja que las violen, a mí no me intimidas Harvey Ford.
Alexander la vio subir, mientras apretaba la caja en sus manos, era justo lo que esperaba que pasará, enfrentar padre e hija pero por alguna razón verla así, y como Harvey la golpeó lo alteró, no se sintió bien con esoSe recrimino por sentirse así, no debía sentir nada por ella ni siquiera compasión, sólo debía verla como la mujer que llevaba se hijo dentro y la clave de su venganza, nada más, sacudió esos pensamientos llamando a Mirna.-Podrias ir con Kristy, ver si necesita algo y ayudarla con el golpe- Mirna lo miro con reproche- ¿qué sucede? -No debiste someterla a eso, en su estado debe estar tranquila, pensé que querías al bebé- se sintió culpable, pero ya estaba hecho, debía seguir con sus planes-.-Ya está hecho Mirna, Harvey merecía sufrir, y que más darse cuenta que su hija se casó conmigo y me dará un hijo, eso él no lo espero venir- Mirna lo miro negando-.-Espero tanto que no te tengas que arrepentir de lo que le haces a Kristy.Mirna se dio la vuelta y subió a ver a Kr