Le obedezco a tal punto que parezco una asistente sexual y aunque le he sacado conversación fuera del tema para que pueda notar un poco más, él simplemente evade la pregunta o deja de escribir, hasta que volvamos estar horny.
O a veces mantiene la conversación respondiendo mi pregunta, recuerdo que una vez le pregunté sobre su color favorito y dijo que era el color de mi vagina, claro que me hizo sentir deseada.Pero desde que estoy en ese grupo hot, él ha estado más distante, me sentí y me siento una más, un poco especial que las otras, pero sigo siendo del montón.[16:37] Samantha: Aún no...[16:39] Alessandro: Ah ok.[16:39] Alessandro: Creí que me complacerías, no es tan difícil.[16:40] Alessandro: Pero ya veo que no te importa.Hago una mueca y ruedo mis ojos, ya conozco su táctica de manipulación, estoy cansada, pero una vez que decido ignorarlo, vuelve a escribirme muy tierno y yo nuevamente caí, creyendo que ha cambiado, pero para él solo—Que me note y con tu indiferencia hacia él, tal vez sería un rebote hacia mi.—O que te pida que busques más chicas porque para él eres solo una asistente, él es hombre, es quien debería buscarse sus chica, no tiene porque usarte para eso.—No porque le daremos conversaciones hot para que no pida estar con otras.—Aunque tenga sueños en donde tu y yo tenemos sexo, no me esperaba que se hiciera de esta forma.Me hace reír y luego me detengo.—¿Tienes sueños hot conmigo? —me sorprendo.—Obvio, ¿Tú no? Creo que es por la curiosidad o no lo sé, son solo sueños, pero me siguen gustando los hombres.—A mi también, solo que no te lo dije por pena y de que me miraras raro, recuerda que aún soy nueva en esto de tener amistades… ¿Entonces, que dices?—¿Nunca te rindas, cierto?—Quiero que hacer posible lo imposible —me encojo de hombros.Ella me sonríe y me abraza.—Claro que si —se ríe y niega con la cabeza—, porque eres la protagonista
—Me encanta cuando me hablas en doble sentido —dije con una sonrisa perversa.Sujeto su mejilla y beso nuevamente los labios de Sofía.—Lo sé. —Lame mis labios como una gata—. ¿Nos vemos el lunes? Besa mis labios una vez más y nos separamos.—Claro nena —le aseguro.Observo como se mueven sus caderas mientras camina hacia la puerta.Ella se detiene en el marco de la puerta y se coloca sus zapatillas, voltea su rostro para mirarme y agrega antes de irse;—Por cierto, mi parte favorita fue cuando explotó la pintura en el lienzo. Toca sus labios con su dedo pulgar haciendo referencia de que su boca era el lienzo y ahí fue donde cayó mi leche.Solo me limito a lanzarle un beso fugaz y mover mi mano en forma de despedida, ella finalmente se va y suspiro por lo placentero que ha sido eso.Aunque creo que nuestras aventuras deben acabar pronto, es mi amiga, pero no quisiera dañar nuestra amistad cuando se enamore, las mujeres siempre se enamoran en este tipo de relación, por eso
—Es un placer, adiós —me despido.—No, espera ¿No quisieras hablar?—Estoy ocupado, además ya hicimos lo que queríamos, ¿Para que quieres hablar? Ya nos conocemos, solo queremos sexo.—Yo quiero algo más que sexo Alessandro…Eso me toma por sorpresa y me incómodo.—¿Cómo puedes querer algo más si no nos conocemos en persona? Tal vez estés confundiendo tus emociones.Y sin decir más, corté la llamada, genial, ahora también tendré que dejar de hablar con ella y no me gusta, desperdiciando el buen sexo virtual por unas emociones erróneas.POV’SamanthaEso me dejó mal, claro que había más chicas, pero me sentí especial, porque es cierto, estamos a distancia, ¿Cómo es que seguíamos manteniendo una conversación sin conocernos físicamente?Parece que no soy buena cumpliendo lo que había dicho, que disfrutaría del momento, yo sabía esto, pero duele, duele mucho.Tomaré el valor y lo trataré como realmente se merece, es doloroso ver que tuve que ser rechazada varias veces para darme
Estamos en sala de espera del aeropuerto con nuestros padres mientras aún no somos llamadas por el número de vuelo. Ya nuestras maletas debían estar dentro del avión y solo teníamos un bolso de mano.Yo estaba en mi celular chateando con Agustín y me llega un mensaje de Alessandro.[19:50] Alessandro: ¿Sos mi perra?Teníamos rato en una conversación hot, pero le prestaba más atención a Agustín, sin embargo, le respondí de vuelta a Alessandro.[19:52] Samantha: Y tú putita también.—¿Tienes tú pasaporte? —pregunta mi madre como si fuese una irresponsable.Apaga la pantalla del celular y le doy mi atención, tal vez me vio muy relajada para la situación, por primera vez su hija saldría del nido, temporalmente claro.—Si mamá —le sonreí—, todo está aquí.—Nuevamente gracias —dice mi padre a los padres de Lourdes.—Es un placer —Jorge sonríe de vuelta—, no queríamos que Lourdes viajase sola y esto es una experiencia que tendrán como amigas, no hay nada mejor que compartir tus aven
—¿Y como fue? —pregunto y ladeó mi cabeza.—¿Ah? Creo que no me comprende, claro, estoy retomando el tema después de un rato.—La declaración, ¿Cómo fue? —Bueno, la verdad es que yo di el primer paso —se ríe.—Menos mal que no tenías claro lo que sentías por él —Sam también se ríe.—Sabes lo impulsiva que suelo ser cuando algo me emociona, pero tenía mis dudas, si era algo momentáneo o de verdad lo quería, igual ya había metido la pata cuando ya éramos novios y puff, comenzó a gustarme cada vez más, creo que vamos bien, aunque a veces siento que fui muy apresurada —lleva su mano a la frente y la frota.—¿Lourdes Dangelo siendo insegura? —pregunto levemente impresionada y divertida haciéndola reír.—Lo sé, me gusta demasiado que tengo miedo de echarlo a perder —confiesa y llevo una mano a su hombro para sobarlo.—Ser atrevida demuestra que eres segura de ti misma, así que no sientas que por ser tu misma lo echarás a perder, de hecho, él se lo pierde porque eres genial —la án
—Pues mírala como la persona con quién tener una relación, porque sé que Lou te complacerá en todo.—Tu también me complaces en todo, menos en ser mi novia.—No me preguntaste.Lourdes regresa del baño y nos quedamos callados, luego dice para irnos así que agarramos nuestras cosas para irnos, salimos del aeropuerto y nos subimos al auto de Agustín, Lou esta de copiloto, Agustín de piloto y yo en los asientos traseros, luego pone el auto en marcha y vamos rumba a su hogar.—¿Y Alessandro? —pregunta Lourdes para romper el silencio en el auto.Excelente tema de conversación Lou, saber del tipo que me gusta, pero no le gusto y además tengo de cerca al mejor amigo que juega con mujeres porque no es hombre.—Bueno, ya lo conocen, en este momento podría estar trabajando o en algún club tomando y conociendo chicas… —Lourdes le da un leve golpe—. ¡Auch! —se queja viendo mal a su novia.—Eso suena a un chico muy ocupado —murmuro con un toque de sarcasmo.—Nos divertiremos mucho con él —
La ciudad protagoniza mi vista, y también admiro las estrellas y la luna, muy lindo, aunque hace mucho frío, sabía del conocimiento del clima aquí, pero uno nunca sabe cuánto puede aguantar hasta que llega al lugar.Aún así, no pienso irme, cierro mis ojos y respiro profundamente disfrutando del grandioso aroma de la noche y de sus sonidos nocturnos, aunque si te concentras bien ignorando el ruido de la ciudad, logras escuchar a unos cuantos animales coleados.—Es lindo, ¿verdad? —escucho una voz varonil cerca y siento el calor de su cuerpo a mi lado.¿Hablaba conmigo? No lo sé, pero de ser así, no pienso dejarlo mal.—Si —respondo en un suspiro soñador.Abro mis ojos y volteo ver al chico que se ha tomado la molestia de acercarse, este tiene la vista al frente admirando lo que yo hace un rato, pero por el perfil lateral de su rostro lo reconocí de inmediato, lo que si, es que no recordaba su voz así de gruesa que te cubre con solo una palabra, tal vez porque dejamos de hablarnos
El silencio que se forma entre ambos no es incómodo para mí, pero para romper el hielo, la sujetó de la cintura y la junto a mi cuerpo, siento sus pechos contra mi, que deduzco que han crecido o siempre fueron así.—Veo que te han crecido mucho los senos, ¿En foto no debería verse todo más grande? Supuse que eran pequeños —digo un tanto juguetón, tengo ganas de follar con ella.—Si…Ella como que se aleja un poco y yo bajo mis manos para apretar su trasero y pegarla más a mi cuerpo.—¿Acaso no te alegra verme? —Acerco mis labios a su piel y los aferro a su cuello. Hay algo más que nos separó, no estoy siendo bien recibido—. Respóndeme —demando y luego le doy un leve mordisco.—Si…—¿Y puedo darte la bienvenida? —me alejo un poco para mirarla.Se ve sorprendida, ¿Qué? ¿Pregunte algo malo? Obvio quiero su permiso, me importa mucho su comodidad. Luego de un rato en silencio, finalmente responde;—Claro que puedes —muestra una sonrisa de mala que me encanta.Me encanta cuando sac