Narra Valentina.El Sr. Alex, salió y aún no ha vuelto, sé que se reuniría con el Sr. Williams, no obstante, nunca suele tardar demasiado.—Disculpe, ¿Es Usted la Sra. Valentina Martínez? —pregunto un oficial.—Si señor, soy yo. —conteste nerviosa.—Sra. Valentina, necesitamos saber dónde se encuentra su jefe, sostenemos evidencia de que la muerte de la Sra. Patricia fue orquestado por su jefe.—Disculpe. —Mi cabeza no daba lugar a esas palabras. —El Sr. Alex estuvo conmigo justo antes de que sucediera…—No ha entendido, sabemos que él no fue el gatillero, pero hay indicios de que estuvo detrás de su contratación, así que si es tan amable de decirnos donde está su jefe.—Yo… yo… —tuve que tomar asiento lo más pronto posible, sentía que el aire me faltaba.—Sra. Valentina, ¿Se encuentra usted bien?Los oficiales se apresuraron a buscar como que me normalizara. No sé cuánto tiempo paso, pero me estaba comenzando a mejorar.— ¿Se encuentra bien? —pregunto un paramédico, quien me estaba t
Narra AlexFlashback— ¿Lista para conocer a mi padre? —le pregunté a Amelia.— ¿Realmente crees que sea el momento oportuno? Llevamos poco tiempo.—Si un año le llamas poco tiempo, entonces si lo es, pero papá me ha preguntado en reiteradas ocasiones por ti.—Está bien, pasa por mí a las 7, no quiero ser la culpable si llegamos a esa cena tarde.Realmente papa nunca estuvo de acuerdo con esta cena, de no ser por mi insistencia es que ha aceptado.Cuando llegue a casa para cambiarme, él me estaba esperando.—Alex, detente. —ordeno él.— ¿Sucede algo?— ¿A que hora es que vendrá tu novia de juguete? —Pregunto él en forma de burla—Te lo he dicho que ella no es una novia de juguete, al menos no está conmigo por interés a como lo han hecho cada una de tus esposas.—Ya veremos eso, por lo pronto recuerdas que eres el sucesor de Industrias Davis.No quise seguir discutiendo eso con él, subí hasta mi cuarto y me preparé lo mejor que pude.Cuando solo faltaban 30 minutos para las 7, me encam
Antes de dirigirme hacia el puerto, le di instrucciones a mi guardaespaldas. “Quiero que te asegures que nadie me persiga, el camino en el que voy pocas personas lo ocupan, así que ya sabes qué hacer.”Tome rumbo hacia el viejo muelle, pero antes de llegar al muelle existen dos intersecciones, si alguien me seguía tenía que perderlo en la primera intersección.Tal como lo supuse, alguien me seguía, sin embargo, el guardaespaldas se hizo cargo de bloquear el paso y fue en ese momento que aproveché en acelerar y perderlos.Después de la muerte de mi padre, hice una oferta para comprar este sitio, el cual obtuve por un precio bastante accesible, me traía muchos recuerdos y lo menos que quería era destruir esos recuerdos.Fui directo al muelle, ahí se encontraba ella. El sol estaba comenzando a caer, estar ahí con tanto silencio y solo disfrutar de tal espectáculo era relajante.—Has venido —dijo ella sin voltear a ver.—Sabía que eras tú, ¿Cómo no iba a venir?— ¿Recuerdas lo que paso ha
Narra Valentina.— ¿Cuántas veces se los tengo que repetir? Yo no tenía conocimiento de esas otras cuentas, mucho menos de la cantidad de dinero que hacen mención. —Les repetía una y otra vez a los oficiales.—Oficiales, podrían dejarme a solas con mi clienta un momento. —Solicito el abogado.—Tiene solo 5 minutos.Los oficiales salieron y me dejaron a solas con él.—Le explico la situación Sra. Martínez, el Sr. Davis ha hecho una formal acusación en donde usted se encuentra vinculada directamente.—No entiendo por qué Alex hace esto, nunca me imagine esta traición de su parte.—Él se siente muy decepcionado de su parte, lo único que le pide es que acepte la verdad y puede que así él apele por una condena menor.Lloraba de tristeza, ¿Por qué a mí me está pasando todo esto? No es que metiera mis manos en el fuego para defender al Sr. Alex, pero no lo imagine capaz de tal cosa.La puerta de la habitación se abrió, los oficiales entraron de manera abrupta y agarraron al abogado del cuell
Narra AlexFlashback«La residencia Davis se encuentra de luto, el Señor Arnold Davis ha fallecido. Todas las empresas socias han cerrado operaciones por una semana para rendir lo honores.» Fue el mensaje que se envió a todo el personal de Industrias Davis.—Alex, lamento mucho tu perdida. —expresa Amelia, ella estuvo a mi lado mientras mi padre agonizaba.—Sinceramente, considero que no es una gran perdida, puede ser un hombre adinerado, pero por dentro estaba vacío. —dije sin vacilar.— ¡Alex! No te exprese así de tu padre. —reclamo ella. —Al final eres su único hijo, te quería a su manera.Nuestra tranquilidad se vio interrumpida por la llegada de un vehículo, ese vehículo era bastante familiar.— ¿Quién es ella? —pregunto Amelia.—Ella, ella es una de las tantas ex de mi padre, no sé qué hace aquí.Salí de la casa y fui directo hacia donde ella.— ¿Qué haces tú aquí? Ya le has quitado suficiente a esta familia, no eres admitida. —dije con una voz autoritaria.—Alex, pequeño, no te
—Yo sé que no quieres asociarte con los García, pero este puede ser el negocio de tu vida, puedes comprarle los huesos de su empresa. —Gustavo me trataba de convencer en comprar Industrias García.—Si no lo hice antes, peor que lo haga ahora. —No me importaba lo que sucediera con esa empresa.Valentina interrumpe nuestra reunión y me notifica que el Sr. Allan me estaba llamando. Antes de aceptar la llamada le pedí a Gustavo que se retirara.—Sr. García, me sorprende su llamada.—Alex, yo sé que anteriormente te rehusaste a trabajar con nosotros y al parecer tomaste una sabia decisión. En esta ocasión quiero que tú seas la primera persona en saber que hemos comenzado un proceso de liquidación para poder honrar nuestras deudas.— ¿En cuánto tiempo puede venir a mi oficina? —mis planes eran otros, a pesar de que no se había hecho pública que Industrias García estaba llegando a quiebra, ya existían rumores que eso pasaría.—Puedo llegar en treinta minutos…—Lo espero aquí entonces.Avisé
No podía permitir que esto continuara, están destruyendo las vidas de Amelia y Valentina.Al día siguiente, después de haber dejado en el apartamento a las chicas y convencer a Valentina que se quede, fui directo a un lugar que jamás imagine ir, antes de ir a la oficina.—Deseo ver al Sr. Allan García. —dije a la recepcionista de Industrias García.—Disculpe caballero, usted tiene restringida la entrada a este sitio —indico alguien de seguridad.—Por favor, avísele al Sr. Allan que estoy aquí, estoy seguro de que me atenderá.El teléfono de la recepcionista comenzó a sonar, ella no dijo nada y la llamada fue breve.—El Sr. Allan lo atenderá, puede subir a su oficina.Continúe mi camino, conmigo subió el de seguridad, sabía que no me darían tanta oportunidad.Llegamos al piso correspondiente, al abrirse la puerta del ascensor, Allan me esperaba.—No es necesario que andes pegado a nuestro visitante, cualquier cosa yo les hago saber. —le dio instrucciones a su personal. —Alex, me sorpre
— ¿Qué me estás tratando de decir? Valentina, sé directa conmigo. —No quería que ella me confirmara lo que yo creía.—Lo que quiero decir es que renuncia a mi puesto. —Ella me entrega una carta, la cual supuse era su carta de renuncia. —Buscaré cómo pagar el dinero que dieron por mí como fianza.—No es necesario que lleguemos a este punto, verás que todo se va a solucionar.—No, las cosas más bien han ido de mal en peor, miré que ahora aparece que recibí 5 millones de dólares en una cuenta que nunca abrí. —Podía ver como ella quería llorar, pero a su vez se contenía de hacerlo.Leí la carta de renuncia y ella solo decía que renunciaba por motivos personales, además de comprometerse a cancelar el monto de la fianza.—Lo de la fianza no te preocupes, es algo que recuperaremos cuando se demuestre tu inocencia, pero al menos dame unos días para poder encontrar un reemplazo, aunque sé que no será nada fácil. —La carta decía que la renuncia era de manera inmediata.Ella simplemente negó con