Gerard está reunido con el hombre que lo ayudara a descubrir lo que hay detrás de la muerte de los padres de Mía, cuando le entra una llamada de Lucas, por lo que se disculpa y sale del despacho de su padre para atender la llamada.—¿Lograste averiguar para qué necesitaba el dinero? —espera expectante por una respuesta, esperando que, lo que dijo Dylan sobre ella no sea cierto.—Dylan le pidió un rescate, por decirlo de algún modo, pero él se dio cuenta de que yo la seguía y se dio a la fuga —le informa sin entrar en muchos detalles— aunque Mía intentó seguirlo, se le perdió, pero no lo llamo precisamente por eso.—¿Sucedió algo más?Aunque a estas alturas nada debería asombrarle, le es inevitable con el nivel de creatividad que han estado mostrando Dylan y Vivian.—Sí señor, Vivian pasó por acá y le ofreció a Mía devolverle al niño si ella se iba del país —le cuenta nervioso, ya que una vez más la seguridad sigue fallando, no debieron dejarla pasar y retenerla en la entrada hasta que
Dylan sale de la casa aún más molesto.No solo Mía termina haciendo lo que se le da la gana, sino que además, Vivian lo presiona para que acabe de una vez. Robert no le ha contestado más las llamadas desde el día de la gala y los favores ya los ha cobrado todos, por lo que necesita sí o sí que Vivian se espere un poco más.Dylan sube al carro, pensando que si hubieran permanecido en suiza, nada de esto estaría pasando.Sale de la vía para agarrar la carretera que da hacia la ciudad y ve una pequeña tienda de comestible, se detiene para comprar unas cosas, cuando una conversación llama su atención.—No puedo creer que otra vez Gerard Walker tenga novia, tan solo espero que no sea igual a la víbora de Gardner, esa mujer se creía la dueña del mundo. Creo que solo su familia la puede soportar.Escucha que dice una chica del otro lado del pasillo.—Amiga, baja a tierra, simples mortales como nosotras no tendrán oportunidad con Gerard papacito Walker, supéralo. Esperemos que esa tal Mía, se
Cuando Andrés y Gerard entran a la carretera que los lleva a la casa donde tienen secuestrado al niño, se consiguen con varias patrullas de la policía y otro par del FBI.—Al menos tendremos compañía en caso de que la cosa se ponga fea —comenta Andrés sintiéndose un poco aliviado.—Yo espero que sean una ayuda y no un estorbo —Gerard empieza a sentirse impaciente por llegar.Toman un desvío y entran a una calle de tierra, encontrando grandes árboles de un lado y del otro un voladero. Desde donde están no ven ni una casa, haciéndolo perfecto para sus propósito.Gerard recibe una llamada del escolta que vigila a Vivian, el cual atiende enseguida.—Ya estamos llegando, ¿paso algo?—Salió una mujer con el niño, puede que la vean por el camino, estén pendiente. Algo está sucediendo adentro, tratare de acercarme un poco más—Ten cuidado, Dylan puede ser peligroso ¿Vivian y Dylan?—Siguen adentro, al parecer están discutiendo —habla en susurros para evitar ser detectado.Corta la llamada.—
Horas antes, en casa de Gerard. Mía saca su maleta grande y empieza a empacar sus cosas y la del niño, guardando aquello que sea más importante sin saber a dónde se dirigen, solo tomando en cuenta que nunca más van a volver. Sofi entra en la habitación y desde la puerta ve a su amiga desesperada recogiendo sus pertenencias. Tiene sentimientos encontrados, por una parte siente culpa por no haber defendido cómo se debe al niño; por otro lado preocupación, algo le dice en su corazón que Vivían no está actuando de buena fe. —Mía puedes parar un momento, por favor —le ruega agarrando sus manos evitando que siga empacando. —Lo siento, pero no puedo —se deshace del agarre de Sofi—. Tengo menos de tres horas para estar en el aeropuerto con todas nuestras cosas para salir del país. —Conoces a Dylan mejor que nadie, detente un momento y ponte a pensar ¿realmente crees que él le entregaría al niño tan fácilmente para que ella te lo entregue a ti? No solo se llevó al niño para hacerte sufrir,
Mía ve a Gerard en medio de la sala notando lo cansado que está, sentimientos de culpa empiezan a surgir en ella por todo lo que le dijo, ahora que le ha devuelto a su hijo, lo mínimo que puede hacer es agradecer y disculparse.Baja las escaleras acercándose a él a paso lento, pero decidido, ordenando las palabras en su mente deseando decirlo de la forma correcta.—Gerard… yo…—No hay nada que decir —la detiene al percibir el sentimiento de culpa—, te prometí regresar a tu hijo y lo he cumplido, de ahora en adelante, tomaremos las medidas necesarias para la seguridad de ambos, aunque con Dylan muerto y Vivían en estado crítico, no deberíamos de tener ningún otro inconveniente.—Si tengo algo que decir y necesito que escuches. Primero, quiero darte las gracias por haberme devuelto a mi hijo; y segundo, quiero disculparme, en mi experiencia los hombres no han sido fiel a su palabra, siempre me han prometido ayudarme a salir adelante y lo que consigo es todo lo contrario, pero esta noche
Mía saca su teléfono y marca el número de su tío ante la atenta mirada de Gerard. Un par de repiques después, su tío atiende la llamada.—¿Qué quieres ahora? Ya te dije que no sé nada de Dylan y el niño.—No es para eso que lo llamo —deja escapar un suspiro, antes de lanzar la bomba— lo que pasa es que Dylan ha tenido un accidente y…—¿Cómo que ha tenido un accidente? —lo escucha alarmado— ¿Qué hiciste? Sigues siendo un imán para las desgracias.Mía aprieta la mandíbula molesta al escuchar a su tío, su única familia tratándola de aquel modo.—Lo que le ha pasado se lo ha merecido —responde molesta ante su acusación— no debió haber secuestrado a mi hijo y mucho menos haberse aliado con una mujer con problemas mentales y, la razón por la que te estoy llamando, no es solo para informarte que ha tenido un accidente sino que él resultó muerto —le suelta la noticia sin el menor cuidado— quiero saber si tiene familiares a quién avisarle.—¿Cómo que ha muerto? Robert se queda asombrado sin p
El día sábado a llega más rápido de lo esperado. Al ser el día previo a la fiesta de compromiso, la casa es un caos.Varios proveedores llevaron los encargos a la casa en lugar del hotel que es donde se hará la celebración.Por lo que Gerard decide encerrarse en el despacho, alejado del ajetreo y toda la locura que se está desarrollando en la sala, esperando que para el mediodía, hayan trasladado todo al hotel.Unos toques en la puerta lo saca de sus pensamientos, después de un adelante, ve a Andrés entrar a su despacho.—Espero que tengas buenas noticias, por qué ya tengo mucho con que lidiar con lo de mañana.—Me he dado cuenta en cuanto entre a la casa. No quiero ni imaginar cuando pases por una boda real —se burla de su amigo, al notar su mala cara, decide dejarlo pasar— a lo que he venido, hallaron el cuerpo de Dylan con quemaduras en rostro y cuerpo, entre distintos tipos de lecciones consistente al accidente sufrido. Para el lunes tendremos el informe del forense, espero que pu
Mía se levanta cansada, después de la conversación que tuvo con Nicolás, muchas interrogantes quedaron en su cabeza, las cuales dieron vueltas una y otra vez sin dejarla dormir y eso sin tomar en cuenta el día que sería hoy.Escucha la puerta del baño abrirse, voltea a esa dirección lamentando haberlo hecho, ve salir a Gerard en toalla con algunas gotas recorriendo su duro torso. A pesar de que ha tenido la fortuna de sentirlo por completo, aun la mirada se le va cuando lo ve de ese modo.—Por el bien de ambos, es mejor que dejes de mirarme de ese modo —le advierte, sintiendo cierta parte de su cuerpo despertarse— ve a darte una ducha, en cualquier momento puede llegar mi madre y te aseguro que hoy estará más intensa que ayer.Mía sale del trance avergonzada, algo que nunca le llegó a pasar con ningún otro chico en la universidad. Aunque en su defensa, en aquella época su tío la tenía muy controlada y técnicamente, además de su tío, al único otro hombre que veía era a Dylan.Cuando