—¡Mad!to infeliz! — Gritó Mikaela golpeando a su esposo en la cara varias veces. — ¡Son unos desgraciados!, ¡no quiero volver a verlos!, ¡te voy a pedir el divorcio y te voy a quitar todo!, ¡¿me escuchaste?!, ¡todo!, ¡y tampoco vas a volver a ver a tus hijos, perro inmundo! — Voceo la mujer frente a todos sin dejar de golpearlo.—¡¿Qué?!, ¡no cariño, tú no puedes hacerme eso!, ¡por favor, perdóname, no es culpa mía, te lo juro, fue esa mujer la que me amenazó con mostrarte las viejas fotos y los antiguos vídeos con los que ya me había amedrentado antes, si no me acostaba con ella, de verdad, yo no quería, te lo juro!Suplicó Steven, confirmando el comentario del orador al instante, todos abrieron los ojos como platos, pues si antes había alguna duda, esto lo confirmaba, Steven era el verdadero padre del bebé de Tabitha.—¡Cielos, esta es la mejor fiesta de revelación de la historia! — Se escuchó el comentario al fondo del salón.—“Y así termina la verdadera revelación de la fi
Tabitha lloriqueaba en el suelo, su rostro se veía algo pálido y se aferraba con fuerza a su vientre, parecía que no podía levantarse.Apenas escucho su voz quebrada, Walter volteó los ojos con hastío.—¡No creas que vas a seguir consiguiendo algo de mí con eso..! — Gritó Walter, girándose sobre los talones para verla a la cara, Tabitha se impresionó ante semejante grito. — ¡Escúchame bien porque no lo pienso repetir y no me volveré a contener la siguiente vez, no quiero volver a verte nunca más, no te quiero cerca de mí, no pienso seguir cayendo en tus lloriqueos y en tus mentiras, ya no hay nada que me una a ti, todo lo contrario…! — Walter le echó mala cara a Tabitha, viéndola arriba para abajo con desprecio. — ¡No te atrevas a asomarte siquiera a mi apartamento, así que, si quieres tus cosas de vuelta, puedes pasarla buscando por el basurero del edificio, solo allí la encontrarás!—Walter… Walter, por favor… No me hagas esto… — Tabitha comenzó a llorar intensamente. — Por fav
Tabitha tragó grueso, cerrando los ojos, al tiempo que un par de lágrimas más se le escapaban, parecía que en el fondo, Tabitha seguía manteniendo un lazo de afecto con su abuela, su nana, quien la crío.Y era increíble, por primera vez Nicole podía ver algo, aunque sea tenue, de un verdadero sentimiento en la expresión de Tabitha, quien siempre vivía actuando frente a todos.—No digo que no tuviste que tener el deseo salir adelante, Tabitha, de prosperar o tener algo de ambición… — Nicole volvió a erguirse. — Pero no debiste lastimar a otras personas para conseguir lo que querías…—Ya basta… — Gruñó Tabitha poniéndose cada vez más pálida.—Por cierto, tu hermana te mandó saludos, te mandó a decir que es muy feliz casada con el hombre del campo que despreciaste… — Nicole retrocedió, volviendo a tomar la mano de Patrick. — Y también que tuvo dos hermosos hijos adorables…—¡Ya…!, ¡déjame en paz! — Voceo Tabitha apretándose el vientre, su cuerpo comenzaba a sudar frío, un pincha
Tabitha salió de allí directo al hospital más cercano, donde recibió atención médica urgente y por poco salvaron al bebé, «un hospital público, ¿cómo es que me permití caer aquí?», sopesaba con repulsión, mientras compartía habitación con siete mujeres más, «pero me dijeron que tendré que quedarme por algunos días, por lo menos tengo un techo».«¿Cómo podré recuperarme de esto?, mañana saldrá la noticia por todo el mundo, todos hablarán de mí y me repudiarán… Todo por culpa de esa gorda, de la mald!ta bruja de Nicole Matthew y el imbécil de su prometido, ¿cómo es que ella pudo conseguirse a alguien así y yo no?, lo merezco más que ella», repasaba Tabitha mientras se limpiaba una lágrima en silencio.«Lo único que me queda, es mi bebé, es hijo de un hombre rico, de algo me debe servir para salir adelante…», a altas horas de la noche, Tabitha se quedó dormida con las lágrimas resbalando por sus mejillas.*Sintiéndose como la propia basura, Walter despertó casi al medio día, todavía
Nicole se despertó sintiendo un suave y delicado cosquilleo en la espalda desnuda, al abrir los ojos notó la claridad entrando en la habitación, ya había amanecido y debía ser tarde por lo alto que entraban los rayos del sol.Parecía que había agarrado un sueño muy profundo, pero luego de todo lo sucedido en la fiesta, fue muy difícil tener un plácido dormir, primero porque a pesar de tener la fuerte convicción de que había hecho lo correcto con Tabitha y Walter, en el fondo una pequeña chispa de culpa la molestaba.Y segundo, porque, luego de tanto drama, Nicole y Patrick decidieron intentar relajarse de la mejor manera en que sabían hacerlo, tomando un baño muy largo, juntos, en el jacuzzi.—Buenos días, mi cielo… — La voz de Patrick sonó con un ronroneo al pie del oído de Nicole, al mismo tiempo que él le pasaba la punta de los dedos por la espalda, provocándole el cosquilleo. — ¿Cómo te sientes hoy?—Mmmm. — Nicole se removió en la cama, todavía con algo de sueño. — Bien, t
Era tan feliz, Nicole se sentía tan absolutamente feliz que ya el asunto de Tabitha y Walter había pasado de página, el remordimiento desapareció y la mente de Nicole ya nos los recordaba.La vida de Nicole había retomado el rumbo, devolviéndole todo lo que le habían arrebatado e incluso, multiplicándole con creces.Primero, luego de tener un esposo que la despreciaba, ahora Nicole tenía un hombre que la amaba y adoraba, dulce, tierno, amable, millonario y atractivo, con quien estaba próxima a casarse.Segundo, después de creerse estéril, ahora estaba embarazada y de, ¡trillizos!, una bendición multiplicada.Y tercero, luego de no tener dinero ni medios económicos, ahora ella era la dueña de una empresa y no solo eso, la herencia que le correspondía por derecho y le había negado su padre, volvía a sus manos.¡Claro! Todo esto también fue por la ayuda de Patrick, quien se había convertido en la principal bendición de Nicole, un regalo enviado del cielo y la más grande prueba para
Era tarde, de pronto la noche que parecía perfecta con ese aire tan romántico se tornó densa y lúgubre a los ojos de Nicole.Un repentino miedo la agobiaba, ella no entendía, ¿por qué?, se suponía que su madre estaba bien, pero Nicole no podía evitar preocuparse.En poco tiempo, Nicole y Patrick llegaron a aquella pequeña casa, ese lugar en el que Nicole vivió por tantos años y lo único que le dejó su exesposo al firmar el divorcio.Esa antigua construcción en la que Walter la abandonó, en la que Nicole empezó su romance con Patrick y la que ella había dejado para empezar una nueva vida con el hombre que amaba.Cómo Nicole se lo imaginó, las luces estaban encendidas, Olivia ya le había comentado antes que deseaba volver e instalarse en esa casa para no causarles problemas a Nicole y Patrick, así que lo obvio era que su madre estuviera en ese lugar.—Puedes esperarme aquí… — Le comentó Nicole a Patrick al bajar del automóvil.—No, claro que no… — Patrick tomó la mano de Nicole
A un lado, tirada en la cama e inconsciente y llena de golpes, estaba Olivia, la madre de Nicole, Patrick tragó grueso al verla, apretando los puños y acercándose lentamente, cuando Henry sacó un arma y le apuntó directamente.—¡Mad!to infeliz, así te quería agarrar! — Voceo Henry con prepotencia, levantando el gatillo del arma. — ¡Creyeron que me demandarían y me iba a quedar de brazos cruzados, esa Nicole y Olivia son unas traidoras que se merecen todo lo que les hice, y tú, basura, ayudaste a la estúpida de mi hija a denunciarme para quitarme todo!, ¿no es así?, ¡típico de tu familia, se creen los dueños del mundo, pero a mí, a Henry Matthew, no me van a joder, por lo menos no sin hacerles pagar!Voceaba Henry con fuerza, todavía con el arma en alto, al tiempo que Patrick se iba acercando, muy, pero muy lentamente.—¡Si te sigues acercando, te mato! — Gruño Henry cuando se dio cuenta de que Patrick ya estaba muy cerca.—¡Adelante, dispara, sé que no lo vas a hacer, porque er