DONOVANEmma no sale de mi cabeza, no dejo de pensar en ella, mi polla se pone dura como cemento con solo recordar cómo la follé. La partí en dos y no me arrepiento. Aunque ahora mismo tengo que apartar todo eso de mi mente. Delante de mí está el sitio que debería ser mío, pero ahora, legalmente, le pertenece a María. Maldita sea la hora en la que metí la polla en ese coño. Bajando, mis hombres me reciben. —Señor, la señora… —Aquí no hay señora —espeto con firmeza—. Solo una arpía, de ahora en adelante todos se van de aquí, la seguridad de esta fortaleza se muda. —Como ordene, señor. —Diles a todos que se vayan a la fortaleza del Boss, esperen instrucciones. —Sí.Entro a la casa que una vez consideré mi hogar. Incluso un hogar que tenía planeado compartir con Emma. Una de las sumisas de la Bratva se me acerca. —Amo, la señora está descansando en su habitación —me informa con una sonrisa de media luna—. Si gusta, puedo ayudarlo a relajarse un poco. Sin permiso, toca mi pecho, s
EMMACuando reacciono es demasiado tarde, me encuentro abrazada al hombre que me ha roto el corazón en más de una ocasión, es como si en un abrir y cerrar de ojos, no fuera yo, como si realmente mi alma se hubiera ido por unos instantes. Rika, mi hermana gemela, nadie sabía des esto, solo Viktoria y Basil, era nuestro secreto, pero ahora ella está viva, y me temo que no será nada bueno el volver a ver un fantasma, ya que siempre creí que ella estaba muerta. —Una hermana gemela —el tono de voz de Donovan suena hostil y gélido. Es irónico, al más mentiroso del mundo no le gusta que le mientan.Aparto eso de mi cabeza, poco a poco intento apartarme de él, lo que me espera no es bueno, mucho menos ahora que me encuentro esperando un hijo, lo que guardo es demasiado oscuro, tanto, que incluso la culpa es aplastante, Donovan se da cuenta de mi lejanía pese a que mantiene los ojos fijos en Basil, y me estrecha más contra su cuerpo.—Basil, necesito hablar con Emma a solas.—No sé si sea u
NARRADOR OMNISCIENTELa oscuridad de la noche se cernía bajo las almas que estaban destinadas a una guerra, Donovan miraba la puerta por la que había salido Emma, con impotencia, la amaba con enferma intensidad, ella era lo único que le preocupaba, recordó las palabras que le dijo Basil una vez.“La vida es una perra, todo lo que le haces a Emma, algún día lo vas a pagar, la vas a perder, Don, y lo lamentarás, porque ella es de las que, si se te escapa de las manos, ya no vuelve a ti nunca”Cuánta razón tenía, no importa cuánto tratase de convencerse, Emma se le estaba escurriendo de las manos y eso no lo dejaba dormir, no pensaba bien, y la consecuencia estaba delante de él; María.—No la sigas —le pidió ella, sintiendo miedo, pero los celos no la dejaban pensar con claridad.Donovan se quedó quieto, analizando todo, ni siquiera recordaba lo que había hecho en aquella noche en la playa, todo era cierto, pero lo hizo porque esa misma noch
DONOVANEmma tiembla después de que se vuelve a levantar de una pesadilla, ha actuado muy extraño estos días, es como si fuera otra persona. No quiere tocar el tema de su hermana gemela, investigué y la información que tengo es basta, supuestamente es todo, pero sigo sintiendo que hay algo más, una pieza en el rompecabezas que no encaja. —Emma —le llamo cuando siento que su cuerpo se queda bajo la tranquilidad de mi protección. —No quiero hablar de nada, ya te lo he dicho —susurra escondiendo su rostro entre pecho. Ella levanta la mirada, anoche todo fue confuso, me parece que debemos hablar de muchas cosas. —Quiero que me folles —dice sin más. Se sube a horcajadas sobre mí, moviendo sus caderas de manera provocativa, es ahí cuando rodeo su cuello, volteándola de manera brutal y ajustando hasta que comienza a manotear, tratando de defenderse. Ella no es Emma, no es mi Emma, es Rika Ivanova. —Maldita —siseo.Estuve ciego, ahora entiendo por qué la mayoría del tiempo parecía taci
EMMADebilidad, esa es la palabra con la que llamo el haber caído en la trampa de Akin, cuando vi a Ender, lo vi como una puerta abierta, por un segundo era como si todo lo que había estado sucediendo en Rusia, solo se tratara de un sueño, y ahora, había vuelto al inicio, donde todo comenzó. Ender me dio mi espacio, argumentando que hablaríamos más tarde, luego de un italiano médico me revisara, confirmando lo que ya me habían dicho en Rusia, mi embarazo no es de riesgo, pero sin duda tengo que tomar ciertas medidas si quiero que mi bebé nazca sano y salvo. —Todo estará bien —no dejo de repetirme mientras camino por los pasillos de la fortaleza italiana a la que ya me estoy sintiendo familiarizada. No puedo posponer más tiempo lo que sea que tenga con Ender, mi enfado por el padre de mi hijo sigue latente en mis venas, así como el dolor que me causa saber que ahora, no solo sigue casado con María, sino, que incluso ella lo ha dejado sin nada, hasta que arregle sus asuntos con su mu
DONOVANPor un maldito segundo creí que aquella que estaba follando a otro, era Emma, la rabia y el dolor se instalaron en mi sistema, aplastando mi pecho de manera brutal, fracturando la confianza que tenía, lo que me hizo comprender la magnitud del daño que le había hecho al acostarme con María. Ella se debe sentir así, saber que durante tres años me follé a otra mujer, pero eso no quita el hecho de que sea solo mía, mi mujer, la madre de mi hijo, ella es el vientre que me dará lo que más he querido en la vida. Y es que puede que suene enfermo, lo es hasta cierto punto, pero desde el primer momento en el que la vi, supe que iba a hacer todo lo que estuviera en mis manos para atarla a mí, y eso incluía embarazarla, todo este tiempo fui paciente. Hasta que ya no pude más y la desvirgué, los demás idiotas que la rodeaban como lobos hambrientos debían entender que ella ya tenía dueño, es por eso que la follé antes de tiempo, la marqué como mía, me filtré en su sistema hasta que yo hi
EMMANada está bien, camino de un lado a otro con la sensación del vacío creciente en mi pecho, el abandono en mi vida, desde que apareció Rika en mi vida, siento que las piezas que estaban encajando en mi vida, ahora se desploman y no hay nada que pueda hacer, ya no más.El pasado amenaza mi presente y futuro, la cabeza me estalla, hace más de una hora que el doctor de la mafia italiana vino a revisarme por petición de Ender, dijo que mi embarazo estaba bien, pero que necesitaba que mantuviera la calma si no quería tener complicaciones en el parto y en lo que resta del embarazo prácticamente. Lo he estado pensando, dándole vueltas al asunto y llego a la misma conclusión, no quiero que nadie sepa mi sucio secreto, después del accidente de mis padres, me costó demasiado tiempo poder reconstruir una vida, sí, a la edad de cuatro años no era una niña normal como el resto, desde temprana edad supe que había algo malo conmigo, y con el hecho de que las ganas por derramar sangre fueran lo
EMMA—Así que todo fue una trampa, par de imbéciles —bramo entrando al salón privado de Ender—. ¿Cómo pudiste? —No lo veas a él, a mí sí —demanda Donovan, cerrando de un portazo. Ender lo mira mal, tomando asiento. —Es una larga historia, era la única manera para que pudieras decirnos la verdad a medias, aunque para ser sincero, creo que escondes más, Emma. Tenso el cuerpo y sello mis labios, no tiene caso seguir ocultando las cosas, más cuando las vidas de las personas que más amo, están en peligro con el regreso de mi hermana Rika, me muerdo el labio inferior, no me agrada estar dentro de una habitación con dos hombres que me miran como si fuera un bocado. —Eso es todo —corto contacto visual con él. —Bien, entonces andando —Donovan trata de venir hacia mí. —Ni lo pienses, Ghost, he dejado que entres a mi territorio porque era necesario, pero eso no quiere decir que te deje hacer lo que quieras con mi prometida, ella… —Jamás será tuya —refuta Donovan, perdiendo la paciencia—.