NARRADOR OMNISCIENTE
La oscuridad de la noche se cernía bajo las almas que estaban destinadas a una guerra, Donovan miraba la puerta por la que había salido Emma, con impotencia, la amaba con enferma intensidad, ella era lo único que le preocupaba, recordó las palabras que le dijo Basil una vez.“La vida es una perra, todo lo que le haces a Emma, algún día lo vas a pagar, la vas a perder, Don, y lo lamentarás, porque ella es de las que, si se te escapa de las manos, ya no vuelve a ti nunca”Cuánta razón tenía, no importa cuánto tratase de convencerse, Emma se le estaba escurriendo de las manos y eso no lo dejaba dormir, no pensaba bien, y la consecuencia estaba delante de él; María.—No la sigas —le pidió ella, sintiendo miedo, pero los celos no la dejaban pensar con claridad.Donovan se quedó quieto, analizando todo, ni siquiera recordaba lo que había hecho en aquella noche en la playa, todo era cierto, pero lo hizo porque esa misma nochDONOVANEmma tiembla después de que se vuelve a levantar de una pesadilla, ha actuado muy extraño estos días, es como si fuera otra persona. No quiere tocar el tema de su hermana gemela, investigué y la información que tengo es basta, supuestamente es todo, pero sigo sintiendo que hay algo más, una pieza en el rompecabezas que no encaja. —Emma —le llamo cuando siento que su cuerpo se queda bajo la tranquilidad de mi protección. —No quiero hablar de nada, ya te lo he dicho —susurra escondiendo su rostro entre pecho. Ella levanta la mirada, anoche todo fue confuso, me parece que debemos hablar de muchas cosas. —Quiero que me folles —dice sin más. Se sube a horcajadas sobre mí, moviendo sus caderas de manera provocativa, es ahí cuando rodeo su cuello, volteándola de manera brutal y ajustando hasta que comienza a manotear, tratando de defenderse. Ella no es Emma, no es mi Emma, es Rika Ivanova. —Maldita —siseo.Estuve ciego, ahora entiendo por qué la mayoría del tiempo parecía taci
EMMADebilidad, esa es la palabra con la que llamo el haber caído en la trampa de Akin, cuando vi a Ender, lo vi como una puerta abierta, por un segundo era como si todo lo que había estado sucediendo en Rusia, solo se tratara de un sueño, y ahora, había vuelto al inicio, donde todo comenzó. Ender me dio mi espacio, argumentando que hablaríamos más tarde, luego de un italiano médico me revisara, confirmando lo que ya me habían dicho en Rusia, mi embarazo no es de riesgo, pero sin duda tengo que tomar ciertas medidas si quiero que mi bebé nazca sano y salvo. —Todo estará bien —no dejo de repetirme mientras camino por los pasillos de la fortaleza italiana a la que ya me estoy sintiendo familiarizada. No puedo posponer más tiempo lo que sea que tenga con Ender, mi enfado por el padre de mi hijo sigue latente en mis venas, así como el dolor que me causa saber que ahora, no solo sigue casado con María, sino, que incluso ella lo ha dejado sin nada, hasta que arregle sus asuntos con su mu
DONOVANPor un maldito segundo creí que aquella que estaba follando a otro, era Emma, la rabia y el dolor se instalaron en mi sistema, aplastando mi pecho de manera brutal, fracturando la confianza que tenía, lo que me hizo comprender la magnitud del daño que le había hecho al acostarme con María. Ella se debe sentir así, saber que durante tres años me follé a otra mujer, pero eso no quita el hecho de que sea solo mía, mi mujer, la madre de mi hijo, ella es el vientre que me dará lo que más he querido en la vida. Y es que puede que suene enfermo, lo es hasta cierto punto, pero desde el primer momento en el que la vi, supe que iba a hacer todo lo que estuviera en mis manos para atarla a mí, y eso incluía embarazarla, todo este tiempo fui paciente. Hasta que ya no pude más y la desvirgué, los demás idiotas que la rodeaban como lobos hambrientos debían entender que ella ya tenía dueño, es por eso que la follé antes de tiempo, la marqué como mía, me filtré en su sistema hasta que yo hi
EMMANada está bien, camino de un lado a otro con la sensación del vacío creciente en mi pecho, el abandono en mi vida, desde que apareció Rika en mi vida, siento que las piezas que estaban encajando en mi vida, ahora se desploman y no hay nada que pueda hacer, ya no más.El pasado amenaza mi presente y futuro, la cabeza me estalla, hace más de una hora que el doctor de la mafia italiana vino a revisarme por petición de Ender, dijo que mi embarazo estaba bien, pero que necesitaba que mantuviera la calma si no quería tener complicaciones en el parto y en lo que resta del embarazo prácticamente. Lo he estado pensando, dándole vueltas al asunto y llego a la misma conclusión, no quiero que nadie sepa mi sucio secreto, después del accidente de mis padres, me costó demasiado tiempo poder reconstruir una vida, sí, a la edad de cuatro años no era una niña normal como el resto, desde temprana edad supe que había algo malo conmigo, y con el hecho de que las ganas por derramar sangre fueran lo
EMMA—Así que todo fue una trampa, par de imbéciles —bramo entrando al salón privado de Ender—. ¿Cómo pudiste? —No lo veas a él, a mí sí —demanda Donovan, cerrando de un portazo. Ender lo mira mal, tomando asiento. —Es una larga historia, era la única manera para que pudieras decirnos la verdad a medias, aunque para ser sincero, creo que escondes más, Emma. Tenso el cuerpo y sello mis labios, no tiene caso seguir ocultando las cosas, más cuando las vidas de las personas que más amo, están en peligro con el regreso de mi hermana Rika, me muerdo el labio inferior, no me agrada estar dentro de una habitación con dos hombres que me miran como si fuera un bocado. —Eso es todo —corto contacto visual con él. —Bien, entonces andando —Donovan trata de venir hacia mí. —Ni lo pienses, Ghost, he dejado que entres a mi territorio porque era necesario, pero eso no quiere decir que te deje hacer lo que quieras con mi prometida, ella… —Jamás será tuya —refuta Donovan, perdiendo la paciencia—.
EMMAMe remuevo inquieta cuando siento un par de manos deslizándose por mis piernas, hasta llegar a mi coño, lamo mis labios, por un segundo creo que estoy dentro de un sueño, una maldita pesadilla, la lengua de alguien lame mi ingle hasta que se posa en… —Sabes bien. Abro los ojos de golpe, lo ronco de aquella voz masculina la conozco muy bien, mis pulsaciones se aceleran, mis sentidos se despiertan y proceso todo lo que acaba de pasar. —Emma.Gruñe, la lengua de Donovan se introduce voraz en mi entrada, me doy cuenta de que estoy completamente desnuda, él solo ha estado haciendo lo que quiera con mi cuerpo mientras estoy inconsistente. —Donovan, para —jadeo.No lo hace, al contrario, aumenta los movimientos con su lengua, acabo de despertar y ya siento un entumecimiento en mis piernas, abiertas para recibirlo solo a él. Cierro los ojos con fuerza, es imposible no gemir ante el orgasmo brutal que me ataca, esto está por mucho mal, pese a todo lo que ha pasado, sigue habiendo una
EMMACada una de mis extremidades tiembla, me he enfrentado a hombres poderosos, asesinado a tipos que la Bratva me pedía, que doblaban mi tamaño y fuerzas, soy letal, me entrenaron desde muy pequeña para no temerle a nadie, incluso el mismo Basil y Donovan fueron mis maestros en el pasado, pero esto es diferente. Y eso se debe a que la persona que está delante de mí, es la clase de monstruo que es igual a mí, me congelo cuando ella da dos pasos más para acortar la distancia que nos separa, no importa que sienta la presencia de Donovan a mis espaldas, como un símbolo de protección, tal vez sí debería contarle toda la verdad, solo así entendería por qué haberme traído a Rusia es una muy mala idea, más, estando embarazada. —Hace mucho tiempo que no nos vemos —dice tomando una bocanada de aire—. ¿Puedo abrazarte? Tengo que ser fuerte por mi bebé, pensar en él, hace que deje de lado mi miedo, mis temores, mi pasado. Él es mi presente, tengo que luchar para que él esté bien siempre. —N
DONOVANEsa maldita malcriada me las pagará más tarde, la sangre me hierve, no solo me está dejando fuera de lo que sea que le esté confesando a Basil, sino, que intenta dejarme fuera de su vida, compartimos un lazo que nunca se romperá, pero parece ser que aún no comprende la magnitud del problema, y del hecho de que nunca será de nadie más, de que ese bebé que crece dentro de ella, es el grillete más grande que la va a atar a mí. —¿Todo bien con mi hermana? La voz chillona de Rika golpea mis espaldas. Volteo a verla, si no fuese por la mirada y por el hecho de que ella es más delgada, casi en los huesos, diría que es Emma. —No me hablarás —afirma. Me quedo callado, detallando cada aspecto, cada rasgo de su rostro. —Escucha —suelta un aire cansado—. Estoy cansada de que todos me vean como la enemiga, no lo soy, así que solo dile a mi hermana que me dio gusto verla de nuevo, saber que está viva. —¿Te vas? —Sí, lo mejor es que regrese al convento del que vine, no quiero ocasiona