'Esa p*rra tiene dos cicatrices en la cara, pero ¿por qué sigue siendo tan guapa?'.

"Abuelo, Papá, Tía Zhenny", Adina saludó a todos en la habitación.

"¡Adina!", dijo Daniel.

"Incluso yo, una hija ilegítima o "de mi clase", como tú dices, sé que debo saludar a mis mayores y a los parientes que son mayores que yo cuando entro en la habitación. ¿Nadie le enseñó a Jasmine?". Adina sonrió. "Jasmine cuenta con la tutela de la Tía Zhenny, pero aún es muy joven. Si la dejaran crecer y arreglárselas sola como yo, me pregunto en qué se convertirá".

El rostro de Zhenny se volvió gélido. ‘Esa p*rra usó lo que dije contra mi propia hija. ¿Estaba escuchando en la puerta? ¡Qué p*rra tan manipulativa!’.

"No te enfades, Tía Zhenny". Adina sonrió dulcemente. "Aunque Jasmine sea una ignorante, sigue siendo mi prima. Le pediré que preste más atención a sus modales en el futuro. Cuidaré de ella".

"Nadie te pidieron que hicieras eso. No eres más que una hija ilegítima. No tienes derecho a educarme".