CAPÍTULO 22: ANTES DE LA BODAMi corazón se detiene mientras él me sostiene entre sus brazos. Estoy completamente desnuda y vulnerable mientras Asher no deja de mirar mi rostro. Trago en seco, nuestras miradas se conectan en un instante efímero en el que olvido todos los problemas por los que esto es un grave error.—Asher… —susurro.—¿Qué?—Suéltame —logro decir.Él me levanta con cuidado y no puede evitar mirarme de pies a cabeza. Siento mis mejillas encenderse, tomo la toalla y me cubro con ella de inmediato. Asher voltea a mirar a todos lados como uno de esos ventiladores. Pasa de largo y cierra la llave de la ducha que todavía seguía abierta.—Ah… yo… me voy.—¡No! ¡Espera! —me apresuro a llamarlo.—¿Qué sucede?—Esa araña, no puedo bañarme con esa cosa ahí —señalo a la pared, donde la cosa gigante y negra sigue trepada a la pared.Asher se echa a reír, toma un trapo y la aplasta sin dudarlo.—¿Por eso gritabas? Solo es una arañita.—¡¿Arañita?! ¡Era inmensa!—Bueno, ya la maté,
CAPÍTULO 23: AHORA SOY SU ESPOSACuando el equipo de estilistas termina de arreglarme, me veo en el espejo y por poco no me reconozco. El maquillaje, el peinado y el vestido me hacen ver y sentir como la princesa de un cuento de hadas.Afuera hay un auto esperándome para llevarme al lugar donde nos casaremos. Pienso que esto es demasiado, una farsa muy bien montada o tal vez… no, Asher no puede sentir nada por mí en serio ¿verdad?Acaricio mi vientre con suavidad, todavía indecisa sobre el futuro incierto de mi bebé por nacer. Suspiro, y sin más que hacer, entro al hermoso auto blanco. El conductor me lleva por las calles de la ciudad hasta que llegamos a un precioso parque rodeado de árboles con hojas otoñales. El cambio de estación llegó tan repentino como esta surrealista situación.En un hermoso podio en medio de los árboles se encuentra Asher. Hay una preciosa mesa decorada, dos personas detrás; una que no conozco, pero la otra… ¡¿Es Wanda?! Además también hay un juez que se supo
CAPÍTULO 24: SE DERRUMBA LA REPRESA Pensaba que lo de Asher era una broma, pero cuando llegamos de nuevo a la casa, él ya tiene sus maletas preparadas para viajar.—Espera, ¿es en serio lo de la luna de miel?—Creo que esa ya la tuvimos antes, preciosa —dice con un guiño de ojo. Mis mejillas se pintan de rojo en ese mismo momento.—¡Asher! —protesto, pero él solo se echa a reír.—Iremos a Minnesota, la reunión con mi madre será dentro de tres días. Brayden estará ahí.—¿Tan pronto? —pregunto, ignorando el hecho de que yo misma había puesto un límite de tiempo a esto.—Sí, creo que es lo mejor. Mi madre está ansiosa por conocerte y, bueno, Brayden también estará junto a su esposa y sus hijos —responde Asher, recogiendo una de sus maletas y dirigiéndose hacia la puerta.Me quedo parada, sintiendo un nudo en la garganta. No puedo evitar preguntarme si estoy preparada para enfrentar a la familia de Asher, especialmente a su madre.—¿Vienes, preciosa? —me llama Asher desde la
CAPÍTULO 25: CONOCIENDO A MI SUEGRA¿Quién pensaría que realmente pasaríamos tres días de luna de miel? Asher y yo prácticamente no salimos de la habitación, dimos rienda suelta a nuestra pasión una y otra vez, en todas las formas posibles.He estado tan desconectada de la realidad que ni siquiera le he dicho sobre el embarazo. Hoy tenemos la reunión con su madre y para ser sincera, no sé si este sea el mejor momento para confesar la verdad.Todavía tengo miedo de su reacción, a pesar de que hemos sido honestos con nuestros sentimientos, un hijo son ligas mayores.Me coloco los aretes frente al espejo admirando el resultado final de mi maquillaje. En eso, siento las manos de Asher envolver mi cintura. Me abraza con dulzura depositando un suave beso en la mejilla.—Te ves muy bien, mi reina. —Le sonrío, pero mi incomodidad es evidente—. ¿Te sientes bien?—Sí, es que… estoy un poco nerviosa, es todo.—Todo saldrá bien, además, ya no tendremos que fingir, porque lo que hay entre tú y yo
CAPÍTULO 26: UNA INCÓMODA CENA FAMILIARLa tensión en ese comedor se puede cortar con una sierra eléctrica y juraría que no es suficiente. Asher y yo nos sentamos a la mesa ante la mirada atónita de todos. Su madre apenas y me mira, pero pasa de mí como si no existiera. En cambio, la mirada de odio de Brayden hacia mí es demasiado evidente, ya ni siquiera se molesta en ocultarlo frente a su esposa o sus pequeños hijos.Todos nos sentamos a la mesa, por fortuna no estoy a su lado, pero sí lo tengo en frente. El silencio solo es opacado por el ruido de los cubiertos y una suave música de fondo.Antes de que cualquiera decida decir algo, una mucama se acerca para decirle algo al oído a la señora Isabella.—¡Oh! Perfecto, hágala pasar.En ese instante una hermosa chica rubia y despampanante entra en el comedor. Tiene una sonrisa cautivadora que deja a todos sin aliento, en especial a Asher, porque se queda mirándola embobado como si nunca hubiera visto un bonito par de piernas.Su estupef
CAPÍTULO 27: UNA OLLA DE PRESIÓN A PUNTO DE REVENTARAbro la puerta principal y corro hasta afuera, hasta que me doy cuenta de que no tengo a dónde ir en realidad, ni siquiera tengo transporte. Las lágrimas se derraman por mis mejillas y aunque intento contenerlas, no soy capaz.—¡Quinn!No espero escuchar la voz de Bárbara detrás de mí. De todas las personas posibles, ella es quien menos quisiera que me ayudase ahora.—¡Quinn! No te vayas, por favor —me pide.Pongo distancia entre las dos. Siento pena por ella, porque de todos aquí, es la única que no tiene idea de lo que pasa.—No, yo no voy a regresar ahí dentro.—Asher está discutiendo con su madre por ti, no puedes irte.Niego con la cabeza, esto fue una terrible idea, nunca debí aceptar. Debí irme lejos como me lo imponía Brayden.—¿Para qué voy a quedarme? Toda su familia me desprecia.—Sé que la señora Isabella puede ser muy complicada, pero te aseguro que es así con todas sus nueras. Dale una oportunidad, solo está molesta po
CAPÍTULO 28: TODO EXPLOTASe puede sentir la tensión que hay en el almuerzo del día siguiente. La madre de Asher se mantiene distante y callada, pero sé perfectamente lo que está pensando. Por otro lado, Brayden parece disfrutar de mi sufrimiento.Hoy de la reunión se van los primos. Solamente quedan: su hermano, la esposa de su hermano y sus hijos. Yo ya no quiero continuar con esto, pero Asher parece empeñado en terminarlo todo de una vez. Tal vez así sea mejor, tal vez es mejor que todo explote de una buena vez y esta pesadilla se acabe.Nos sentamos a la mesa mientras algunos conversan temas banales y de otro tipo de cosas. La madre, Isabella, comienza a hablar sobre los negocios.—Muy bien, entonces, me imagino que no pretendes darle las acciones a tu hermano —afirma con un dejo de desdén.—No madre, de hecho, quiero reclamar mi herencia, la que me corresponde y que me dejó mi padre por derecho.Isabella se queda estática, en su lugar, no habla, pero su mirada lo dice todo. Deja
CAPÍTULO 29: UN CORAZÓN ROTO Y UNA TRAGEDIALa furia contenida en los ojos de Asher es aterradora. Tiene los puños apretados y la mirada perdida fija en su hermano. Brayden, por otro lado, está pálido, sabe que ha llegado el momento de que se revele toda la verdad, y dudo mucho que pueda impedirlo.Aun así, intenta ser valiente, o parecerlo, al menos; porque sonríe con cinismo y mira a su hermano como si realmente él tuviera las de ganar.—No seas ridículo Asher. En cualquiera de los dos casos, tu mujercita termina como una put4.Esa palabra es el detonante para que Asher pierda el control. Se le va encima a su hermano y empiezan a golpearse como si fueran unos animales salvajes. Su madre grita, se descontrola alterada, y yo también. Nunca los había visto así y la verdad es que no me gusta.—Asher, por favor, ya basta —suplico, pero él no me hace caso.Isabella les grita, toma un vaso de agua que está en la mesa y se los arroja encima. Eso es suficiente para que los dos se tranquilice