— Sol — llegaba Daniel y tomaba a Solange de la cintura — quería hablar contigo, pero a solas — les daba una ligera sonrisa a Victoria y Emiliam.
— Te esperamos, no tardes — fue lo único que dijo Emiliam, se retiró con Violeta.
— Se ve que Emiliam te cae muy bien — dijo Sol con un poco de ironía — deberías de tratar de ser un poco más amable.
— Claro, sobre todo porque le cae muy bien a tu abuela y veo que está muy emocionada de que sea el novio de tu amiga. Simpatizo más rápido con él — Daniel parecía un niño pequeño haciendo berrinche.
— Ella ya te acepta, no arruines eso. Mira, sé que no lo hacía y en parte la entendía — tomo las manos de Daniel — lo que sí, es que no sé cómo tomara lo de la boda.
— Si, no creo que
Solange trataba de revisar todas las páginas y se daba cuenta de que faltaban bastantes páginas. No sabía entonces por qué Cindy se lo había dado, debió de haberse dado cuenta antes, sabía que no era descuidada con sus cosas. La única persona con la que podría contar para esto era Emiliam. — Sol, ya me tengo que ir — Violeta toco la puerta de la habitación de Sol — te veo en la noche tengo que contarte algo muy importante. — Claro, nos encontramos más tarde. Solange se apresuró a cambiarse, llegaría tarde a la Universidad y quería apresurarse lo más que pudiera. Tenía que decirle a Emiliam lo que había descubierto, tal vez no era el mayor descubrimiento del mundo, pero todo empezaba a tomar sentido. Llegaba a la Universidad y se encontraba con sus amigas en la entrada, a Sol le sorprendía mucho que estuvieran todas juntas en la puerta. — No sabía que nos dedicaríamos a vigilar la puerta — Sol trataba de hablar, aunque d
— De nada — Emiliam le regalaba una sonrisa a Sol — espero que puedas ir a lo de la conferencia — Emiliam miraba al cielo, aunque con sus dedos se cubría un poco la cara — me siento muy poco confiado, creo que no saldrá como espero y eso me preocupa — Sol se daba cuenta de que nunca había escuchado a Emiliam de forma tan sincera como ahora.— ¿tienes miedo? — se atrevía a preguntar Sol, no sabía cómo se lo tomaría Emiliam. En ocasiones puede llegar a ser un hombre serio, pero, en otras tantas parece lo más tierno y amoroso del mundo.— Miedo — susurro Emiliam — es un poco curioso, ya que lo mencionas, muy pocas veces sentí esto. Es como un nervio que recorre mi cuerpo y no me deja, en ocasiones llega a ser emocionante, aunque, en otras tantas no me gusta.— Pienso que, si sientes, eso es muy bueno — Sol s
Ya habían pasado dos días, Emiliam dio su conferencia, en cuanto a Solange, se fue al departamento. Ninguno había mencionado nada sobre aquel beso. Sol seguía yendo al restaurante a trabajar. No había podido platicar con Agnes; ya que salió de la ciudad y apenas volvería. Solo a ella le confesaría que era la pianista. Pero, tenía miedo de que lo tomara mal, aún peor, llevaba días sin saber de Charles. En cuanto a la familia de Martín, le había encargado a Daniel investigar sobre ellos — digamos, que un amigo de su padre era investigador — parecía todo un desorden, sin embargo, a la vez, todo estaba bajo control. Aunque, el remordimiento que sentía Solange era más fuerte, trataba de evitar a Violeta como fuera. No podía verla a los ojos después de lo que paso con Emiliam.Sol entraba al bufete, miraba a todos lados, no sabía si se enc
Sol le platicaba a Martín lo que había ocurrido con Emiliam — mientras se terminaba de maquillar — aún se sentía un poco nerviosa. Tenía cosas que arreglar con Agnes, ya pasaron varios días, pero, no olvido que le contaría la verdad sobre ella.— Bueno, creo que después de esto, necesitaras unas muy buenas vacaciones — Martín se sentaba aún lado de Sol —, sigo impactado.— No sé ni que decirte —, terminaba de colocar su labial rojo. Por alguna extraña razón no se sentía ella misma, sentía la presencia de algo extraño, que no comprendía bien —. Falta que venga Agnes y no sé cómo va a tomar todo esto.— Sin contar, que en unos días no podrás venir. Ya que dijiste que te ibas a España.Sí que tenía problemas y poco a poco se empezaban a jun
Llegaba al departamento, estaba muy cansada. Realmente ahora más que nunca necesitaba o deseaba volver a casa, no sabía cómo miraría a Violeta, ella es su amiga y la quiere — aunque no lo demuestre —, ella de verdad estaba muy ilusionada con Emiliam y como su amiga, debería decirle que no la quiere, aunque eso costara su amistad.— Violeta. — Sol entraba al departamento y veía a su amiga con una mujer un poco extravagante —. No pensé que tendrías visitas, de ser así me hubiera tardado un poco más.— Para nada — la mujer se acercaba a Sol y la saludaba de beso en la mejilla —, Violeta me hablo mucho de ti. Sé que no les cae nada bien Ava — sonreía de manera maliciosa.— ¿Quién es usted?— Kika, soy influencer y tengo mi propia marca de maquillaje. Vine, porque creo que Violeta sería la mo
Solange había acompañado a Violeta a la casa de Kika, se encontraba al sur por lo cual le habían pedido a Emiliam que las llevara. Durante el camino Violeta le contaba lo maravillosa que era Kika. A Emiliam poco le interesaba la historia que Violeta, estaba realmente anonadado con Solange; cada vez que la veía recordaba lo que había pasado en su oficina.Solange chateaba con Daniel, parecía ser que había encontrado a la familia de Martín. Ahora faltaba que investigara un poco al papá de Violeta. Parecía que Leopoldo Suárez escondía algo y si eso era cierto, tenían que saber si él tenía algún tipo de lazo con su abuela Matilde. Aunque, empezaba a sospechar que Cindy fuera el verdadero lazo. Solange, recordaba que su abuela siempre se refería con mucho cariño hacia Cindy, incluso como una hija. Sin embargo, Cindy siempre mencionaba que Matilde era la que
Emiliam se acercaba a Sol poco a poco. La besaba con mucha prisa y pasión; Emiliam estaba ansioso por quitarle la ropa a Sol, mientras que ella solo se abrazaba muy fuerte a él. La adrenalina de que los descubriera crecía mucho más, parecía que eso era lo que en verdad los excitaba.Sol no podía evitarlo, era tanto el deseo que sentía por Emiliam que únicamente quería volver a repetir lo de la oficina, y entendía que Emiliam deseaba más esto. Empezaron a quitarse la ropa y a darse caricias por zonas que la ropa no lo permitía. Realmente querían continuar y no detenerse nunca, la pasión los consumía cada vez más. Para su desgracia, no podían entretenerse mucho, así que en cuanto recobraron la razón, se vistieron.— Emiliam, deberíamos parar esto. De verdad yo quiero a Daniel y a Violeta.Emiliam no la miro, nada m
—Veo que se relajaban un poco—. Violeta se acercaba a la piscina donde están Emiliam y Sol. —Si, le dije a Solange que viniéramos un poco en lo que terminabas —comento Emiliam. —Me encanta que convivan más, ¿no les gustaría una boda doble? —decía Violeta emocionada. Solange y Emiliam se miraron, sabían que eso no estaba realmente en sus planes y menos ahora después de todo lo que ha pasado. No sabían que pasaría después, pero lo de la boda doble sería un verdadero cinismo. —Creo que no le simpatizó mucho a Daniel —dijo Emiliam mientras miraba a Solange. Ella entendía muy bien a lo que se refería. —No digas eso, de seguro falta que convivan más y bueno estoy segura de que lo harán —afirmo Violeta. —¿Ya nos vamos a ir? —pregunto cambiando de tema Sol. —Sí, vamos a despedirnos de Kika. Sol y Emiliam se pusieron los zapatos para acompañar a Violeta a despedirse de Kika. Sol tenía miedo de