La verdad lloré haciendo este capitulo, Isaak es una persona sumida en una terrible depresión y angustia, hoy mostre un poco de eso. El proximo capitulo estara aqui mañana por la noche.
A partir del momento en que Elena cedió ante las suplicas del lobo, sus urnas acordaron dejarlos encontrarse todas las noches, así la joven pareja podría pasar el día juntos y por la noche, serian los antiguos amantes quienes podrían estar juntos. Ni Elarimil ni Keith quisieron hablar de lo que sucedió la noche que Isaak y Elena se reunieron, aunque no intervinieron, fueron capaces de escuchar todo lo que paso, por lo que no querían ser irrespetuosos hablando al respecto, prefirieron seguir como si nada. — Me alegra por fin conocerte, Keith hablaba de ti todo el tiempo— menciono Hydra cuando finalmente pudo conversar con la vampira—, eres muy bonita, debe ser porque tenemos el mismo color de cabello — bromeo provocando una risa de parte de la chica. — Yo creo que sí, ahora me doy cuenta de que mi esposo no me mentía cuando dijo que te parecías a mi hermano — respondió—, espero que puedas conocer a Dorian, estoy completamente segura de que van a llevarse muy bien. — ¿Sí? Ya
Después del beso ninguno de los dos tuvo necesidad de decir algo, la torpe sonrisa dibujada en sus labios les decía todo, aun luego de los siglos, seguían amándose con la misma intensidad de tiempo atrás, cuando su tiempo se agotó, tan solo unieron sus manos sobre el espejo, luego se dispusieron a desaparecer. Keith se levanto para tomar en brazos a su esposa que ya estaba profundamente dormida, la recostó con cuidado para después cubrirla con las mantas, una vez recostado a su lado se durmió profundamente. La mañana siguiente los despertó el rugido del enorme dragón blanco fuera de su ventana, Hydra tenia la costumbre de volar antes del amanecer, decía que le ayudaba a pensar, así que imagino que había recién vuelto de su viaje, se alzo lanzando un gran bostezo, volvió la mirada a su esposa que ya estaba despierta pero que se rehusaba a levantarse, eso le provoco risa. — Tenemos que ponernos de pie, mi amor — se acerco a darle un beso a su mujer. — No quiero, me siento tan ag
Keith se encontraba mas nervioso que su esposa, no podía evitarlo, un enorme temor estaba incrustado en su pecho, quería y rogaba a los dioses que todo saliera bien, le dolía enormemente verla sufrir con los dolores de parto, pero en ese aspecto no había nada que pudiera hacer, solo la ayudaba a caminar hasta que los sanadores aparecieron. — Su alteza ¿Cómo se siente? — preguntaron mientras la llevaban nuevamente a la cama. — Duele cada vez más — respondió recostándose—, es más constante. — Ya veo, permítame revisarla — tanto ella como Keith afirmaron con la cabeza. La revisaron determinando que estaba por estar lista para pujar, la tormenta afuera seguía igual de fuerte, Keith parecido escuchar que su esposa decía algo, pero no logro entenderla, se sentía mareado, todo empeoro cuando llego el gran momento. Estuvo a punto de desmayarse dos veces, pero jamás soltó la mano de Elarimil que daba todo de si para traer al mundo a su primogénito, solo los Dioses sabrían cuan fue
— ¿Cómo pudo crear esa barrera? — Noah se encontraba revisando al niño que fue recostado en la cama de sus padres. — No lo sabemos, tal vez fue porque percibió que su madre estaba en peligro — Elarimil estaba junto a su hijo que tan solo se calmó al tenerla cerca. — Pero no es normal que los recién nacidos puedan invocar, eso no sucede hasta cercano a las cinco lunas, es totalmente inusual y mas que haya podido controlar esa barrera para que no se extendiera. — El fuego mágico es de lo más difícil de controlar — añadió Dorian que estaba en compañía de su hija que dormía en sus brazos, por el revuelto en el palacio se había asustado—, ni siquiera yo lo controlo bien. — Pues parece que mi hijo los va a superar — Keith por el contrario estaba demasiado orgulloso de su hijo—, es todo un mago. — Pues eso parece — Noah se puso en pie luego de volver a cubrir al infante con las mantas—, no tiene ninguna herida, solo esta asustado, con que este cerca de su madre pasara.
— La magia de dragones se maneja mas a través de canciones — contaba Elena al lobo—, vi a mi madre usarla un par de veces, el canto llamaba a los Dioses, dando a los dragones la magia necesaria. — Soy terrible cantando — Isaak emitió una ligera risa. — No es verdad, yo te escuche cantar un par de veces y me gusto — Dices eso porque me escuchaste con oídos enamorados — la bruja se sonrojo con esto—, cuando me escuches en el ritual te vas a querer divorciar de mí. — En teoría estamos divorciados— al decir esto, Isaak la miro sin entender—, estamos muertos, eso rompió nuestro lazo matrimonial. — No lo había pensado de esa forma, pero tienes razón. — Tendremos que tener otra boda — escucharla pronunciar esas palabras ilumino la mirada del lobo—, la que soñamos. — Seria maravilloso tenerla, no quiero decir que no me gustara la primera, pero esta seria publica, no tendríamos que hacerlo a escondidas de nuevo, ya no hay nadie que pueda prohibirnos nada. — Mi
Después de leer sobre rituales donde podían formarse nuevos cuerpos, el dragón llevo sus ojos a la pareja que seguía inconsciente, los observaba fijamente, no sabía cómo podría abordar el tema con ellos, como haría para que ellos obtuvieran lo que el conjuro exigía, se mordió el labio inferior mientras sobre analizaba todos los escenarios posibles, no había ninguno solo que pudiera convencerlo completamente. — ¿No han despertado? — la voz de Idril lo saco de sus pensamientos. — No, solo se han removido muy poco, revise sus temperaturas, no hay fiebre o falta de calor, solo fue una descompensación por el exceso de energía. — Ya veo, les he traído esto — dejo junto a la cama una pócima rojiza que brillaba un poco—, les devolverá la energía completamente. — Mi señora, estuve leyendo sobre lo necesario para el conjuro que traerá a su hermana de vuelta — al hacer mención de ello, la mujer tan solo se mostró un poco preocupada. — ¿Usted lo sabe verdad? — Hydra se puso de
La fuerte tormenta de nieve los sorprendió cerca de su destino, forzaron un poco a sus caballos para finalmente acceder a los dominios de las brujas, Dorian había practicado la mejora de su visión al tener ahora un solo ojo. — ¡Ya casi llegamos! — grito Noah. — Incluso el clima esta en contra de que rompamos la maldición — contesto Dorian acomodándose mejor la capa sobre sus hombros. — No quieren que todo vuelva a la normalidad al parecer — Noah emitió una risa—, por cierto, no termine de contarte lo que paso con la princesa. — Lo ultimo que me dijiste es que te había propuesto matrimonio solo porque no quería casarse con el hombre que sus padres eligieron. — La boda será en unos días — intervino el rubio—, supongo que al final cumplirán con su deber, no es como que tuviera la esperanza de que llegara corriendo a mis brazos después de lo que le dije… — Si lo esperabas— aseguro—, te conozco muy bien, estas aferrado a la esperanza de que te elija en el último mome
Ambos brujos seguían atónitos con su reciente descubrimiento, la madre del rubio lo acompañaba en su sentir, miraban a su alrededor en búsqueda de alguna otra señal, no fue hasta que Dorian se acerco a otro de los corredores de las catacumbas que una idea atravesó su mente, se volvió a ellos. — ¿Cuánto tardo en morir la abuela? — pregunto — No entiendo ¿A que te refieres? — se acerco Madeleine — Después de la muerte de tía Elena ¿Cuánto tiempo paso hasta la muerte de la abuela? — repitió su pregunta — Aproximadamente unos seis meses — respondió y Dorian emitió una risa. — Bruja astuta — dijo para sí Noah cuando entendió a donde iba el cuestionamiento de su primo—, ella saco al bebé ¿No es así? — Si, ahora la duda es saber a donde lo llevo — se acerco a la tumba de su abuela —, sabia perfectamente lo que hacía, la pócima que bebió impediría que supiéramos de la existencia de nuestro primo. — No lo entiendo, mi hermana estaba muerta, yo la vi, ella estaba muer