Isla se tapó los ojos y se encogió en su lugar, ¿Había matado a su esposo? ¿Ella realmente lo había perdido? Se quería volver loca con el silencio a su alrededor y finalmente se desquició cuando sintió que la tocaban. Ella chilló, gritó, manoteó y lloró con dolor.―Cálmate, ángel, soy yo. ―Logan apretó el abrazo para que dejara de golpearlo. ―Todo está bien, todo está bien. ―Isla lo miró como si no creyera que él estuviera ahí frente a ella.―¿Demonio? ―Logan besó sus labios con ternura.―Sí, soy yo. ―El abrazo de su mujer lo hizo gruñir, por lo fuerte.―Siempre le cuidaré las espaldas. ―Marcos le guiñó en cuanto Isla posó sus ojos rojos en él. ―¿Qué se siente haber planeado esto por años y que terminara contigo con un disparo que te dejará lisiado de por vida? ―Xavier no tenía tiempo para responder a eso, él grita por el intenso dolor.―Mis piernas. ―Dijo al calmarse. ―¡No siento mis piernas! ―Empezó a golpearse con fuerza. ―¡Mis piernas! ―Logan le dio una patada en la cara.―Cállate
Las cosas estaban finalmente volviendo a la normalidad. No había sido fácil lidiar con la prensa y arreglar todos los chismes que se esparcieron como pólvora en los medios. Isla estaba sanando, lento, pero seguro, ella solo tenía que ver a su familia para no rendirse y ser feliz.Todavía no supera que sus padres llegaron tan lejos por dinero, eso es algo que la mata en vida. ¿Por qué la odian tanto? ¿Por qué permitir que todo el mundo le hiciera daño? ¿Por qué no protegerla como lo hacen todo el tiempo con Denise? Tantas preguntas que no hacen más que romperle el corazón.Logan, por su parte es el apoyo incondicional que su mujer necesita, él ha estado para ella en todo momento por muy difícil que sea este, se asegura de que ella se sienta a salvo. No es nada fácil, todo el revuelo realmente la hirió, pero su ángel es fuerte y lo está demostrando.Los trillizos por su parte están descontentos, ya tienen que ir al colegio y ellos se lo pasan genial en casa con sus abuelos, no entienden
―Gisel. ―Logan se puso en pie, él no podía creer que ella estuviera ahí frente a él, ¿Cómo era posible? ―Creí que tú…―Escuché las noticias. ―La mujer se acercó. ―No dudé en venir. ―Lo abrazó con fuerza y aspiró su aroma. ―No pude mantener mi promesa. ―Logan la miró a los ojos una vez se apartó de ella.―Nunca debiste marcharte. ―Marcos se aclaró la garganta.―Sí bueno, se me dio la oportunidad y no quería decir no. ―Río. ―Cuéntame, Marcos, ¿Por qué estás tan afligido y furioso?―No quiero a un loquero, gracias. ―Gisel rio.―Tan difícil como siempre. ―Rodó los ojos. ―¿Qué hay de Nascar?―Furioso conmigo. ―Bromeó Logan. ―Dos veces me he lastimado la pierna y dos veces me ha gritado que quedaré en sillas de ruedas permanentemente. ―Rieron. ―Está imposible.―Los invito a cenar hoy. ―Gisel los miró a ambos. ―Llamaré a Nascar para que se nos una.―Me parece una buena idea. ―Marcos resopló. ―Necesito despejar la mente o me volveré loco.―Es hora del almuerzo, ¿Por qué no pedimos algo? ―Loga
Logan miró a sus tres diablillos con súplicas, listo para acceder a cualquier cosa que ellos le pidieran a cambio de su ayuda, en cambio, los niños lo miraron como si fueran tres mafiosos a punto de cambiarle la vida a alguien.―¿Por qué piensas que mamá está enojada si te sonríe? ―Noah decidió torturarlo un poco más.―Cuando crezcas, sabrás que la sonrisa de una mujer no significa que todo está bien. ―Dando un resoplido se sentó. ―Desde hace una semana está molesta, lo sé, lo siento en mis huesos. ―“Y en mis testículos” dijo mentalmente.―¿De verdad estás dispuesto a darnos lo que sea? ―Mateo enarcó una ceja.―Lo que sea menos dejar de ir al colegio. ―Para su asombro sus hijos se mostraron tranquilos con eso. ―¿Qué están pensando? ―Entrecerró los ojos.―Digamos que hay algo que deseamos más que dejar de ir al colegio. ―Usher ladeó la sonrisa. ―Queremos un castillo inflable de por vida en el patio trasero, chuches sin límites por todo un año, la última consola de Play Station con todo
Isla miró a su esposo con la boca abierta, ella ni en mil años se esperó algo así. Si bien Logan deja bien en claro que la ama y marca su territorio, no se lo imaginó poniendo su canción en medio del piso presidencial con sus trabajadores merodeando por ahí.El ramo de tulipanes rosas era enorme, entre ellos había seis anillos, la caja de chocolate era sus favoritos. ¿Realmente su esposo estaba haciendo algo así? Ella se llevó las manos a la boca al ver que tenía una carta.―Demonio…―Está escrita a mano. ―Le hizo saber cosa que estremeció el corazón de Isla, ama la letra de su esposo. ―Y cada anillo es por las horas que me esperaste despierta esa noche. ―Dejó el ramo de lado, ya que ella no podría con eso. ―Perdóname, ¿Sí? No fue mi intención llegar a casa tan tarde. ―Isla lo cortó con un beso, que se haya esmerado así aun siendo tan frío lo fue todo para ella.―No me imagino lo que te costó hacer esto. ―Sonriendo por los aplausos lo tomó de la mano y se lo llevó a su oficina, ya bas
¿Se puede odiar a una persona que intente acercarse a ti y demostrarte que no es una amenaza? ¿Se puede detestar a alguien que no te ha hecho daño? Isla tolera menos a Gisel, no lo comprendía, todos la adoraban, incluso sus hijos la tratan bien y esos diablillos odian a cualquier mujer que se acerque a su padre, pero con ella es todo diferente, incluso sus suegros la tratan con estima.Parece ella la odiosa, grosera y hostil en toda la situación. Gisel no deja de ser educada, amable y considerada con ella, pero aun así la trata con frialdad y un poco de desprecio. La única que está de su lado y no la reprende es Faitth, su amiga la apoya en todo y está por completo de su lado.―Deberías hacer el esfuerzo, darle una oportunidad. ―Logan la miró suplicante. ―Gisel no hace más que tratar de demostrarte que es una buena amiga, ella se esfuerza para que la veas de verdad…―¡Ese es el punto! ―Isla terminó de ponerse el sostén. ―Lo intenta demasiado y ya me está agobiando, ¿Por qué quiere tan
Isla sintió tanta rabia que los ojos le ardieron por las lágrimas, ella se empapó, lo esperó como una tonta y él estaba con esa mujer. ¿Por qué no llamarla? ¿Por qué no evitarle la humillación? ¿Acaso siempre la olvidaba cuando esa mujer estaba cerca? Ella no quería dudar de su marido, pero él no ayudaba a sus luchas internas con respecto a esa mujer que parece estar hasta en la sopa.Al llegar a casa corrió directamente a su habitación para darse una ducha, deseó que sus hijos no estuvieran, pero ellos que cuando tienen planes no dejan pasar nada, la vieron llegar y fueron tras de ella.―Mami, ¿Ya podemos pedir la pizza? ―Preguntó Usher.―¿Puedo arreglar las chuches? ―Insistió Mateo.―¿Yo puedo ayudar a la niñera a poner las palomitas de maíz? ―Noah se pegó más a la puerta. ―¿Papi llegará pronto? Prometieron llegar temprano hoy, ¿Por qué llegaste tarde? ―Isla sintió más rabia.―Pueden hacer todo lo que dijeron. ―Los miró con amor. ―Y para que sea más genial, he invitado a los tíos, ¿
Logan apretó a su mujer más a su cuerpo y aspiró el aroma de su pelo, Isla por su parte jadeó al sentir su dureza entre sus nalgas. Esos besos que repartió por sus hombros desnudos fueron deliciosos y hasta excitante.―Buenos días, ángel. ―Besó su mejilla. ―¿Amaneciste bien? ―Isla quien había estado fingiendo que todo estaba bien, se giró para mirarlo a la cara.El día que Gisel llamó a altas horas de la noche supuestamente era para disculparse directamente con ella, así que usó eso para fingir que perdonaba de una vez a su esposo, pero el plan estaba en pie y de hecho había llegado el día de darle el susto de su vida. ―He amanecido bien. ―Besó sus labios, ¿Cómo es que el hombre más inteligente y astuto no puede notar como su amistad lo está jodiendo todo? ―¿Y tú?―Emocionado porque nos queda todo el fin de semana a nosotros solos. ―En otro momento ella se habría emocionado, en otra ocasión ella se habría tirado a por sus labios por la emoción, pero nada en ella se emocionó. Siempre