Hola, mis niñas... ¡Espero estén bien! Por ahora solo será un capítulo por día, pero el fin de semana las voy a bombardear con capítulos. ¿Lo aceptan?
Un mes había pasado desde que se dio la fiesta de inauguración del nuevo hotel. A nivel de negocio eso fue beneficio para Marcos, la verdad estaba feliz de que personas importantes desearan trabajar con él. En cambio, ese encuentro con Faitth lo había desestabilizado un poco, todo estaba bien mientras no la veía, pero al parecer sus inseguridades se hicieron presentes al estar en un mismo lugar. Las carcajadas todavía resuenan en su cabeza y cada mirada que cruzó con algunas de las mujeres del grupo donde por supuesto estaba su supuesta amiga, todavía las ve claras cuando cierra los ojos. ¿Es tan patético como para que se burlen de él? ¿Tan fatal fue su error como para que no se le tenga respeto? ¿Solo miran lo que él hizo y nada más? Tales pensamientos lo estaban volviendo loco, no pensó que un reencuentro inesperado con la mujer que amó lo afectara tanto. Poniéndose en pie resopló, es fin de semana y como el tío divertido que es, debe visitar a sus sobrinos. Está solo en el mundo,
La furia se dibujó en el rostro de Faitth, todas quedaron asombradas, incluso Angelina la miró con sus ojitos azules brillantes como si supiera que las cosas estaban tensas. Rowena miró a su cuñada con preocupación al igual que Isla.―¿Estás bien? ―Isla fue la primera en hacer la tonta pregunta, es evidente que no lo está. ―Oye, habla o di algo. ―Insistió.―¿Ese tonto que se cree? ―Preguntó como si ellas supieran de quién se tratara. ―No me habló cuando me tenía al frente, ¿Por qué venir a felicitarme con un estúpid0 mensaje? ¡Es un patán como siempre! ―Sintió ganas de llorar. ―Kim tenía razón cuando me dijo: No te enamores de un tonto engreído que no ve más allá de sus narices. ¡Cuánta razón tenía! ―Gruñó.―Voy a suponer que hablas de Marcos. ―Elina alzó las cejas.―¿Quién más me puede poner de peor humor en mi día? ―Bufó. ―Lo siento, no quise ser grosera, es solo que lo odi0 siempre más. ―Todas suspiraron, es un hecho de que ahí hay cenizas y hasta con fuego.―No te pongas así. ―Row
Faitth abrió los ojos y se quedó mirando el techo por un largo rato. Está tan agotada mental, física y emocionalmente que le encantaría quedarse en cama durante todo el día y solo echar pereza hasta no poder más con su autocompasión, pero como ella es una adulta independiente y mujer autosuficiente, se sentó en la cama y se quedó mirando a la distancia.Necesita procesar lo que es ponerse en pie, ducharse y salir al mundo como si nada estuviera pasando. Los encuentros inesperados con Marcos se hacen cada vez más comunes, es como si allá donde fueran, estuviera planeado que ambos se encontraran.Tener amigos en común tampoco lo hace muy fácil, siempre se ven obligados a estar en el mismo lugar cuando salen a comer o beber algo. Es evidente que uno o el otro siempre busca la manera de rechazar los planes y gracias a eso no se encuentran todos los días y pueden mantener esa distancia que el orgullo los lleva a tener.Dejando todos sus pensamientos de lado y tras rogarle a cualquiera deid
Al salir miró a todas partes, a él no le importó empaparse, quería encontrarla, pero no vio más que coches entrando y saliendo. Negando, corrió a su coche, ¿Acaso demoró tanto en su shock? ¿Ella se marchó rápidamente porque solo lo fastidió con el café para dejarle en claro las cosas? Con la cabeza hecha un lío salió de ahí para irse.La junta con Logan no puede faltar y no puede estar distraído. Al darle un sorbo al café se contuvo para no cerrar los ojos, el dulce sabor invadió su boca como una explosión, justo como esa mujer entra en su vida siempre que quiere.Logan miró a su amigo con las cejas alzadas, ha entrado con un solo envase de café y eso no se puede tolerar, pero antes de que pudiera decir algo, Marcos le tendió el café. Logan con una sonrisa lo tomó en manos y al darle un largo sorbo por poco se muere ahogado.―¿Quién carajos le pone azúcar al café? ―Lo miró con ojos grandes y llorosos, ni siquiera puede respirar bien.―Tu esposa y Faitth. ―Le restó importancia, no podí
Marcos miró por el ventanal de su piso, es sábado y aunque está invitado a pasarla con Logan y sus sobrinos, no tiene ganas de salir, solo quiere quedarse en casa mirando películas y trabajando un poco como acostumbra.Es el día en el que Faitth se irá a conocer quizás con su futuro marido. 0dió escuchar la conversación que Isla estaba teniendo por teléfono con ella, supo de la cena gracias a eso y hubiera deseado no haberlo sabido.Ahora sus deseos de averiguar donde será no se le quita de la cabeza y constantemente tiene sus ojos puestos en el nombre de Norman. Solo bastaría una llamada para que él sepa toda la información e ir por su chica, pero se niega, si ella está continuando con su vida, él debe hacer lo mismo.No había salido con nadie después de lo que pasó con Camila y ya se estaba preocupando. ¿Por qué él, un hombre que es deseado por muchas no se empareja con una preciosidad de esas que no dejan de insinuársele? Puede tener desde modelos hasta oficinistas y más ahora que
―Hija, ¿Qué sucede? Alastahir se acercó a ella al verla tan nerviosa.―No es nada, papá. ―Le sonrió ocultando el móvil, está realmente nerviosa de que Marcos no le responda y la deje en visto justo como ella lo dejó cuando la felicitó por su cumpleaños. ―¿No pudiste buscarme a un chico más interesante? ―Lo miró a los ojos. ―Es aburrido y soso, sabes que no estoy acostumbrada a esto. ―Alastahir resopló.―Dale la oportunidad, es un buen chico y además se lleva bien con Ivor. ―Faitth alzó las cejas, eso es imposible. ―Vale, Ivor dijo que tenía potencial, pero estoy seguro de que cuando se conozcan mejor, Christian los va a sorprender. ―Faitth dejó caer los hombros.―No me gusta, papá. ―Lo miró con gesto cansado. ―De verdad no es mi tipo y lo sé, quizás sea cierto que es un buen chico, pero simplemente no me gusta. ―Alastahir besó la frente de su hija.―No te obligaré a nada, lo sabes. ―Lo miró a los ojos. ―Pero tarde o temprano deberás olvidar a ese tonto que solo jugó con tus sentimient
Un completo desastre fue la cena que tuvieron Marcos y Faitth, ambos se despidieron torpemente y desde entonces no habían vuelto a hablarse. Ambos estaban furiosos por abrir la boca y sacar cosas del pasado, se culparon cada uno por estropear eso que tanto deseaban.Faitth estaba que chillaba cada vez que recordaba la conversación. Todo estaba marchando bien, ¿Por qué abrieron la bocota? Chillando contra la almohada como una loca, se cansó de darle vueltas a las cosas y decidió levantarse para iniciar su día.Había sido muy difícil para ella no marcarle para intentarlo de nuevo, pero él ya lo había dejado todo claro con su silencio y era mejor dejarlo así. Resoplando se metió al baño para asearse, le espera un largo día de trabajo.―Hola, cielo. ―Freya miró con una sonrisa a su hija. ―No entiendo por qué vives en esta parte de la ciudad. ―Le dio un beso en la mejilla. ―Deberías mudarte a la mansión, ¿No es mejor? ―Faitth suspiró.―Amo que vengas a quedarte conmigo algunos días. ―Se se
Marcos al escuchar la voz de Faitth perdió una serie de latidos, él se puso rígido y fue evidente para todos los demás. Logan al desear saber que estaba pasando, lo obligó a ponerlo en manos libres tras escucharlo mencionar el nombre de Faitth. ―¿Qué sucede? ―Todos los hombres quedaron en silencio para escuchar lo que sea que estaban por decir detrás de la línea. ―Estoy en una noche de chicas y empezamos un juego tonto…. Vale, yo inicié un juego y es mi turno de pagar mi penitencia. ―Resopló, hay música de fondo por lo que sabe que él está ocupado. ―Pero si deseas, no te molesto y… ―Habla. ―La cortó demasiado interesado. ―¿De qué se trata? ―Las chicas se emocionaron por la aceptación. ―Te haré algunas preguntas incómodas y debes responderme con toda la sinceridad del mundo sin importar lo difícil que sea. ―Marcos cruzó mirada con los chicos y estos se encogieron de hombros. ―Bien, fresita, dispara. ―Se preparó para cualquier locura con la que saliera esa mujer del mal. ―¿Quién ha