[AITANA]
Lo observo dormir a mi lado y no puedo más que perderme en todos esas pecas y lunares que cubren esa espalda que me he aprendido de memoria y es de la cual me aferro cada vez que siento que moriré de placer. 《Se ve tan pero tan guapo.》 Aun no sé cómo alguien como él, se ha fijado en alguien como yo. Mucho menos puedo creer que me haya elegido la madre de sus hijos. Apoyo mi espalda en el respaldar de la cama y sin dejar de mirarlo, llevo mi mano sobre mi vientre. 《Un bebé de él.Seguramente será igual de lindo que Daniel, pero vamos con un padre como Matías, es imposible que un niño no sea un encanto.》 Sonrió ante mis pensamientos y una revolución interna invade mi ser haciendo que deba tocarlo. Me acomodo a su lado y rozo su espalda con la yema de mis dedos comenzando por los lunares en la parte superior y lentamente voy bajando hasta su cintura, para luego ir más abajo donde t
[AITANA]Otro día laboral que termina, uno menos estresante que ayer claro está, pero la incomodidad que genera Cristian aun sigue ahí. Sé que me ha dicho que todo estaba bien, que no insistiría, pero es que él saber lo que le sucede conmigo es incomodo. Quito mi bata medica, me despido de todos, y salgo de la clínica. Al cruzar el portal, me encuentro con Matías y Daniel sonriéndome.—¿Y ustedes dos que hacen aquí? — Pregunto sin entender nada.—¿Le dices tú? — Le pregunta Matías a Daniel mirándolo.—Mami, la abuela Paula nos ha invitado a cenar. — Me explica mi hijo y creo que me he perdido de algo.—¿Cena familiar? — Cuestiono mirando a Matías.Él se hace el desentendido y me sonríe. —Vale, ya que todos saben la noticia... ya sabes... ¿por qu
[MATÍAS]—Mi mami se ve muy feliz. — Me dice mi hijo mientras buscamos una guitarra en la oficina de la que era mi casa.Sonrió ante las palabras de Daniel, porque tiene toda la razón. El verla hablar con mi familia, verla sonreír y hablar con ellos acerca de nuestro bebé, me hace entender lo mucho que esto significa para ella. —Es muy lindo verla así, ¿no? — Le pregunto antes de salir del estudio.Él me lanza una enorme sonrisa —¡Si papi es súper lindo! — Dice de manera exagerada haciéndome reír. —Y ahora lo será mucho más. — Termina de decir y da brincos de alegría por toda la habitación.
[MATÍAS]Después de haber acostado a Daniel en su cama y de haber sacado a caminar a Danko, finalmente mi prometida y yo entramos a nuestra habitación. La observo cambiándose apoyado contra la pared y puedo solamente apreciar el espectáculo que es su figura. Me pierdo mirándola y evidentemente ella se ha dado cuenta de esto.—¿Qué haces? — Pregunta con una enorme sonrisa en su rostro.—Te miro. — Me limito a responder e intento no reírme de los gestos que ha hecho.—¿Y te vas a quedar toda la noche mirándome desde ahí? — Pregunta mordiendo su labio inferior.—Ese plan suena estupendo. — Digo sonriente al notar lo frustrada que esta porque no me he acercado a ella.—Vale. — Refuta evitando reírse y al parecer he echado más leña al fuego. Sin mirarme esta vez, ella se termina de de
[MATÍAS]Una semana despuésNunca había tenido una conversación tan seria con mi equipo de trabajo y con la editorial, pero, es que tampoco nunca les había dicho que tenía decidido que un hijo mío llevara mi apellido y que no me importaría nada el que dirán. Era claro que todos estarían aterrorizados con la noticia y las repercusiones que esto tendría a mi imagen publica, pero cuando todo parecía no poder empeorar para ellos, les anuncie el embarazo de Aitana y nuestro casamiento. Tuve suerte que no se desmayaran o que les diera un pre infarto, lo que si no pude evitar fueron sus regaños y gritos. Sé muy bien que estoy poniendo muchas cosas en riesgo con esto, pero no creo que mi carrera deba ir por encima de mi familia; una que me llego de manera sorpresiva, pero creo que la vida es así.Entro a la oficina del doctor Reveron y me siento en la silla del
[AITANA]Comienzo a cortar la cebolla, los pimientos, y luego los pongo en una sartén con un poquito de aceite para comenzar a dorarlos. Tengo a mi guapísimo novio abrazándome desde atrás con sus manos sobre mi abdomen. —Definitivamente tú eres una excelente cocinera. Esas pastas van a quedar exquisitas. — Me susurra al oído y luego besa mi cuello.—Amor... así no puedo. Tu aliento en mi cuello y la manera que me acaricias van a hacer que me queme. — Me quejo entre risas.Al parecer mis palabras le han hecho gracia. —Primero que nada, hermosa, estoy acariciando a nuestro hijo, segundo, es inevitable no besarte. Estoy demasiado enamorado de ti. — Me dice y de verdad que es un dulce.—Vale, entonces no hagas que me mueva porque me voy a quemar. ——Yo te ayudo. — Propone tomando el cucharon para mover el contenido mientras que de a poco voy agr
[MATÍAS]Abro mis ojos lentamente intentando absorber la luz del sol y de a poco me voy adaptando a ella. Miro a mi costado, pero no la veo. Me siento en la cama y miro alrededor, pero nada. Me pongo de pie y la busco hasta que antes de salir de la habitación noto que la luz del baño está encendida, pero que la puerta está un poco abierta. Al entrar, la veo sentada al lado del váter.—Amor, ¿¡Qué sucedió!? — Pregunto asustado.Ella me mira como diciéndome, ¿de verdad me preguntas? —Básicamente sucede que estoy embarazada. — Responde seria y por alguna razón no puedo evitar reírme.—Lo siento, lo siento... No me quise reír, pero es que la manera que lo has dicho... — Me excuso y me siento a su lado.—Lo sé amor... — Dice y se pone de pie.Me paro a s
[MATÍAS]Pensé que el día que me tocara a mí, sería uno más de esos hombres que son arrastrados por su futura esposa a la reunión con la planeadora de bodas. Nunca creí que venir a esa cita y decidir en los colores de las flores, de los manteles, y todos esos detalles podría entusiasmarme tanto. Siempre creí que saldría huyendo de situaciones como esta, pero, a decir verdad, el saber que de esta manera es como Aitana y yo estamos construyendo el día más importante de nuestras vidas, me trae una gran alegría. Verla sonreír y escoger cada detalle a medida que va preguntando mi opinión, me hace sentir el hombre más afortunado del planeta.Una vez que todos los principales asuntos de la boda están acordados, le dejo el dep&oacu
[AITANA]Entramos a la casa de mis futuros suegros y al llegar a la sala, nos encontramos con ellos mirando una película junto a todos sus nietos, es una imagen tan bonita... Al vernos Paula sonríe y nos invita a tomar asiento en el sofá, ya que los niños están sentados en el suelo.Sin dudarlo, Matías y yo nos sentamos y disfrutamos de lo que queda de la película de dibujos animados que están viendo. Apoyo mi cabeza sobre el hombro de mi guapísimo prometido mientras disfrutamos de este momento familiar. Estar con él así y sujetarlo de su brazo, es una sensación a la que nunca podre acostumbrarme, se siente una paz absoluta... es como si fuese un hombre normal el cual no llevase el peso de ser el famoso escritor que es en su espalda.—Te amo. — Me susurra al oído para que nadie más que yo pueda escucharlo.Me hace sonreír y solo