Su corazón casi se salía de su pecho al escuchar aquellas hermosas palabras, era la primera vez que Bardas le confesaba que la amaba. Y eso le daba la confianza para expresar sus sentimientos—Yo también te amo Bardas —ambos juntan sus frentes y luego sellan sus palabras con un beso —. Tuve mucho miedo por sentirme rechazada por mi lobo, que no sabía lo que hacía. Lo siento mucho —le dice, luego del beso. —Está bien, no pasa nada. Ahora sabes que tú lo eres todo para mí. Mi mayor tesoro, y quiero que siempre lo tengas presentes, ¿de acuerdo? —la mira mientras toma sus mejillas con las manos.—De acuerdo —sonríe, a lo que él cierra los ojos un momento y aspira profundamente.—Necesitas descansar —le dice burlón.Puesto que comenzó a oler como ella soltaba su aroma solo para provocarlo, era natural que ella actuara de esa manera.—Es incontrolable —susurra contra sus labios.—Adara —advierte —. No estás en condiciones de hacer nada, todavía sigues muy débil.—Yo me siento bien —contest
Sabía que esa bruja y él se traían algo entre manos, pero lo que de verdad necesitaba descubrir que fue lo que tuvo que darle Lucían a ella para que accediera a su petición.Ethan a duras penas consiguió ponerse en pie, el suelo blanquecino se tornó de color rojizo por la gran cantidad de sangre que perdía. Sacude su hocico, y mira a Lucían ante él.El lobo albino caminaba de un lado a otro, todas las heridas que le hizo habían cerrado y parecía repuesto. Luego le echa un vistazo a Eren, este había regresado a su estado humano, su mente seguía en blanco y eso le preocupaba.Mientras que Lucían le gruñía y mostraba sus feroces dientes.—Estas acabado, Ethan. Hemos llegado al final de esta batalla, en la que tú no serás el vencedor.—No cantes victoria tan rápido, puesto que aún sigo con vida.—No por mucho, fue muy fácil que cayeran en mi trampa. El hielo está verdaderamente duro, pero sabía que seguirías mi olor, por eso he quebrado un poco el hielo justo por el camino
Si no hubiera sido por esa tonta humana, sus planes se hubieran ido a la mierda. Si le hubiera permitido morir como deseaba, Ethan jamás la hubiese buscado para pedirle ese favor. Ella sabía que ese lobo alfa podía terminar con la vida de Lucían.Es más, creía fielmente que él solo podria asesinar a Lucían sin ayuda de Eren. Su lobo interior era de una raza ya extinta, él era el único en su clase. Un lobo negro de ojos azules, que magnifico ejemplar.De solo imaginárselo, se le hacía agua la boca. El poder que Ethan contenía era enorme, aunque ese tonto no se ha dado cuenta de ello. Por esa razón perdono la vida de esa infeliz humana, si ella sobrevivía estaría al lado de Ethan.Y para cuando ese lobo buscara de su magia para salvarla, ella estaría preparada para poner su condición. Ansiaba que el maldito de Lucían muriera de una vez por todas, todavía maldecía el día que se tropezó con ese lobo traicionero.Aprieta la mandíbula, cuando tuviera su asqueroso corazón en sus manos lo vol
El control se le estaba escapando de sus manos, con aquel hombre frotando su sexo, Deisy no conseguía mantenerse con la mente en orden. De hecho, ya casi no pensaba en nada, poco a poco se estaba olvidado de sus deberes y hasta de quien era.En ese momento se estaba convirtiendo más en una mujer, dejando atrás que es la líder de una manada. Lo único que le importaba era dejarse tocar por ese hombre.Al poco rato, siente como él besa sus labios lentamente y poco a poco comienza a introducir su dedo en su interior. Aquella invasión enloqueció a la loba quien perdió el control total de su cuerpo y de sus acciones.Seguidamente e impulsada por la fuerte atracción que sentía por ese humano, Deisy le echo los brazos al cuello para presionar con fuerza sus labios contra los suyos. Consecutivamente, enlazo las piernas alrededor de su cintura atándolo a su cuerpo.Inmediatamente el humano golpeo su espalda contra la pared, mientras que subía desesperadamente su vestido. Y en vista de no poder
Para esa pregunta no tenía una respuesta. —Deja de estar preguntando lo que no te importa —los ojos de Deisy brillaban más de la cuenta, eso significaba que comenzaba perder la paciencia. —Muy bien, en ese caso; ya que solo has venido a por un poco de acción te daré lo que me pides. —¿Qué dices? —la albina frunce la mirada. Él volvió abrir sus piernas para meterse entre ellas, pero en esa ocasión fue más rudo con la albina lo que la hizo extrañarse. —Te daré una noche en la que no dormirás absolutamente nada. El corazón de Deisy se estremeció ante el comentario tan arrogante de ese humano, y con aquellas palabras, él introdujo su miembro en su interior arrancándole un gemido placentero a la albina. La joven se aferró a sus hombros clavando sus uñas en su piel; la fuerza que él utilizaba para penetrarla era tan enérgica que los vellos de su cuerpo se erizaban, nunca se imaginó que un humano común fuese tan vigoroso y lujurioso… Ella abrió los ojos y noto la miraba penetrante de
Eren y Ethan emprendieron el ascenso hacia los pocos metros que les faltaba para llegar a la cima, al fin descubrirían porque Lucían se empeñaba tanto en no dejarlos llegar y porque le urgía a él alcanzar la cumbre.Pero su ascenso se vio interrumpido cuando una jauría de lobos salvajes apareció de la nada. Los alfas se detienen y comienzan a gruñirles a los lobos, estos no atacaron de inmediato, sino que parecía que estaban esperando una orden.De pronto, aparece un lobo igual de grande que los otros dos que quedaron atrás. Este miró exclusivamente a Ethan y le gruño mostrando sus feroces dientes. El alfa hizo lo propio y se puso en posición de ataque.—“¡Creo que es la última carta que Lucían tenia escondida!” —musita Ethan.—“Vamos a por todos ellos, Ethan”Los lobos se colocan en posición de ataque justo al mismo tiempo cuando el lobo más grande ladra, lo que significaba que daba una orden. Los alfas nunca vieron nada igual, un lobo salvaje dándole órdenes a otros lobos.Ellos asu
La reina nunca recordó nada sobre su familia, y si ese humano era familiar suyo. Y si era alguien que se adentró en el bosque a buscarla. Pero es que esa teoría no tenía sentido tampoco, la reina Valentina para esas alturas ya sería una anciana, pero la vida lobuna le brindaba juventud.Es imposible que alguien de su familia la quisiera encontrar, pero es que el parecido de sus ojos con los hijos del rey era increíble. Y la hipótesis de que pudiera ser familia de Eren sí que era improbable, todo el mundo conocía la procedencia del viejo Bardas primero.Pero esa inquietud que sentía no la abandonaba, algo le decía que ese humano tenía algo que ver con la familia de la reina. Y si eso era así, no podía ser una persona de la que desconfiara. Necesitaba hacer que él recordara.—Alfa, ¿está bien? —ella regreso a la realidad.—Sí, estoy bien. No quiero que nadie moleste a ese humano, puede andar libre si él quiere.—Claro mi señora, como usted ordene.Ella vuelve a levant
Decidida a ser feliz aunque sea por un breve momento, Deisy se encaminó hasta la casa donde se estaba quedando ese humano. Luego de despedir a Ría y pedirle que no la siguiera, ella se dispuso a seguir lo que dictaba su corazón.Estaba mal, estaba bien, no lo sabía… pero ella deseaba con todas sus fuerzas estar con ese hombre, fuese o no fuese lobo. Si todos podían hacer sus vidas, ¿Por qué ella no?La albina llego hasta la entrada de la casa a medio construir y antes de que pudiera poner un pie en el primer escalón de la escalera, él salió de la residencia con aquella mirada que le decía todo.—Haz venido al fin, te estaba esperando, Deisy.—¿Por qué pensaste que vendría?—Por lo que te he dicho, sé que sientes lo mismo que yo siento por ti.—¿Y si estas equivocado?Él camina hacia ella y la toma de la mano para jalarla dentro de la casa.—¡No lo estoy! —confirma con convicción —. Haz venido ¿no?, lo has hecho porque sientes esa necesidad de estar conmigo, yo te atraigo, y en estos m