NARRADORA— En complot con la jefa de las esclavas se realizaban todas esas operaciones. Limitaban a las esclavas de las cosas básicas que nuestro Alfa le suministraba, luego se las ofrecían, a cambio de ser violadas salvajemente por los mismos rebeldes carentes de mujeres entre ellos.“¡Maldit4 desgraciada!, ¡¿cómo podías permitir eso?!, ¡¡tú también tienes hijas!!”“¡Deberían darles sus hijas como esclavas a las manadas salvajes para que sufran en carne propia lo mismo que esas inocentes mujeres!”“¡¡Deben ser torturadas antes de morir!!”Esta vez las mujeres de la manada fueron las que comenzaron a gritarle indignadas a la jefa de esclavas, que solo lloraba con la cabeza abajo, atada en el bando de los traidores.Raven sintió una sensación de logro en su corazón.Por fin, las esclavas eran vistas como seres merecedores de compasión, mujeres que simplemente no habían tenido tanta suerte en su vida o un buen compañero, que las ayudara a existir con dignidad.Una mano masculina agarró
NARRADORA— Hay una noticia muy triste que les comunicaré después – muy pocos sabían de la muerte de Amalia, solo pensaron que estaba descansando en su habitación, de la cual casi nunca salía.— Lady Amalia distribuía todos los meses entre las lobas de la manada una infusión medicinal para ayudarlas a concebir – todas las lobas asintieron, nadie dejaba de tomársela nunca.— Lamentablemente, Lady Amalia quería hacerles un bien, pero solo estaba siendo engañada por una persona de confianza, la cual estaba combinando la Arruba con las demás plantas medicinales y pasaba desapercibida a su sistema, envenenando sus matrices poco a poco.— Esa persona, era su jefa de doncellas en la mansión y además, fue la que, al verse descubierta en esta rebelión por Lady Amalia, la asesinó a sangre fría.Raven anunció y el cadáver de Amalia fue traído al frente, la sábana se retiró, solo de su rostro y la indignación general fue peor que antes.Amalia Walker era la mente maestra detrás de todo, sin embar
CEDRICK— ¡Tráiganme el látigo!— ¡NO! ¡Alfa me lo prometió, me prometió que dejaría vivir a mi hijo! ¡¡¡Me dio su palabra!!! Ronan me ruge debajo del escenario, arrodillado, intentando zafarse de sus restricciones, pero es sometido por el guerrero a su lado.— Lo prometí, prometí que solo le daría un castigo a tu hijo, nunca hablé de perdonarle la vida, si sobrevive o no, ya depende de su capacidad – le respondí con sarcasmo, para luego dejarlo forcejeando y maldiciéndome y girarme para enfrentar al guerrero Marshall.— Ya no te veo tan valiente y seguro, recuerdo que disfrutaste mucho impartiendo tu castigo a mi espalda la vez pasada, ¿fue increíble someter al Alfa, cierto, te sentiste poderoso? Sonrío siniestramente mientras sus ojos llenos de terror y su rostro pálido, me mira desde su posición arrodillada.— A… al..fa todo es una equivocación… por favor perdone nuestras vidas… mi padre… mi padre lo ayudó a llegar a su puesto…— ¡Tu padre solo me dio una oportunidad para yo luch
CEDRICKSin pensarlo siquiera mi cuerpo se interpone entre mi Luna y las fauces mortales de Ronan.— ¡¡Cedrick, NO!! – escucho sus gritos y la exclamación de la manada.El dolor entre mi hombro y mi cuello es agonizante y siento cómo la sangre se escapa rápidamente por la herida, donde los colmillos afilados de Ronan se hunden sin compasión.Aun así, lo aguanto por el cuello con toda la fuerza de mis dos brazos y lo retengo, aunque eso me cueste la vida, porque si cedo, perderé a mi compañera, a mi Raven.— ¡No te dejaré ir, maldit0! ¡¡Nadie toca a mi mujer!! – le rujo hostil, forcejeando con él, que solo me arrastra por el suelo, queriéndose acercar como un demente a Raven.Planto mis piernas con fuerza sobre la madera, mis músculos tensos al máximo y no lo dejo avanzar. — ¡Vincent, protege a tu Luna, protege a tu Luna!Detengo a mi Beta cuando viene a ayudarme.Esta pelea, es algo que voy a resolver por mí mismo, aquí y ahora.*****RAVENNo sé en qué momento todo se volvió un caos
RAVEN— ¡Cedrick! – me acerqué hasta las escaleras y lo ayudé enseguida con mi pequeño cuerpo a darle estabilidad.— Espera Luna, estoy lleno de sangre, no te ensucies – intenta detenerme, pero no me importa, yo lo abrazo y me cuelo debajo de su brazo libre, para que me utilice como soporte.— No importa, soy pequeña, pero fuerte, no tengo miedo, te puedo sostener – subo la cabeza y lo miro, intentando sonreírle un poco, aunque imagino que me habrá salido peor que llorar.Estoy angustiada porque sé, que gran parte de esa sangre es de su propia herida, que él aprieta con un trapo contra su cuello.— Si hay alguien que me puede sostener aquí, eres tú, mi hembra— baja su cabeza y me besa el cabello, susurrando palabras que calientan mi alma - ¿estás bien, no saliste herida?— Estoy bien, vamos, vamos a la mansión a que te vende esa horrible herida. El Beta se hace cargo de todo aquí, no te preocupes.Custodiados por los guerreros, regresamos a la mansión del Alfa.Todo está hecho un caos
RAVEN — Pero si vamos a iniciar una guerra, necesitamos más personas, esa es una realidad. Mientras estés a mi lado a salvo, todo va a salir bien, ¿sí? Solo mantente a mi lado. Me pide y eso es todo lo que deseo, poder formar parte de su vida, suceda lo que suceda. — Siempre estaré a tu lado, prometí darte el trono del Rey Alfa y lo cumpliré. Acerca su hermoso rostro al mío y nuestros labios se unen en un suave y delicioso beso. Su mano sube a acariciar mi mejilla y mi cuello. Me apoyo en sus anchos hombros y dejo que invada mi boca con su lengua, que me explore y me tome a su antojo. Gimo cuando chupa mi labio inferior y sus afilados caninos me mordisquean, sensuales y provocativos. Debajo, contra mi muslo, siento su deseo despertando y entre mis piernas mi centro se humedece. Su olor masculino a bosque nevado salvaje me está haciendo perder la cabeza y deseos excitantes pasan por mi mente. — Luna, me estás poniendo duro, no podemos jugar ahora… mmm… necesito reunir al Con
RAVENCuando estuve en el salón de las reuniones, frente al Concilio, fue algo intimidante.Todos eran Alfas y guerreros poderosos, los mismos que había visto de lejos durante el juicio de los traidores y los recordaba del recibimiento al festival.— Alfas y Guerreros aliados, les presento de manera oficial a mi Luna, Raven Centuria, aunque para los demás es Raven Walker – la voz imponente de Cedrick sonó a mi lado.— Bienvenidos de nuevo a nuestra manada y gracias por su ayuda durante los momentos caóticos que vivimos hace poco. Los miro con toda la fortaleza que me da mi Alfa, de frente y sin temor, a pesar de sus auras poderosas.Sé que ahora mismo están esperando a ver si Cedrick les mintió o no, con mis poderes.— Soy descendiente del Clan de las Centurias y este es mi poder – levanto mi mano y me concentro.Ya no sufro como al inicio que casi me ahogo en mi propio vapor.Una hermosa llama roja, naranja y amarilla, sale cubriendo mi mano y mi brazo hasta el codo.Sin verme, sé q
RAVENCorro hacia él y con la agilidad de mi pequeño cuerpo comienzo a pegarle puñetazos que él esquiva y bloquea.Intenta agarrarme y hacerme una llave, pero en vez de escapar, como él me enseñó, lo dejo que me aprisione contra su cuerpo, quedando mi espalda contra su fuerte pecho.Me retuerzo “intentando” zafarme, cuando lo único que estoy haciendo es restregándole todas mis nalgas contra su bragueta.— Luna, no juegues conmigo – me susurra peligroso al oído y siento su respiración pesada contra mi cuello.— Yo solo estoy entrenando Alfa – le respondo igual agitada, pero sigo provocándolo.Me muevo y bloqueo, de tal manera que sus manos siempre me rozan un seno, o una nalga, caigo sobre él “accidentalmente” y ya siento en cada roce, como un duro bulto comienza a crecer en sus pantalones.¡BAM!Caemos ambos al suelo en cuatro y me encuentro inmovilizada, con el rostro contra la colchoneta.Todo el poderoso cuerpo de Cedrick agitado y excitado, encima de mi espalda, en la posición de