Cuando el abogado se fue abracé a mi esposa, princesa es un proceso difícil, pero debemos poner de nuestra parte el dolor, no sé irá nunca. Ahora necesito que seas fuerte, por lo menos delante de los niños quiero que Joan y Esmeralda se acostumbren a nosotros y se integren, ya no quiero que nos vean como sus tíos sino como sus padres. Sé que no será fácil, sobre todo para Joan, pero no dejaré que las personas los señales como los huérfanos Fuente Mayor.

Quiero convertirlos en mis hijos legalmente la niña necesita crecer con una familia igual le hablaremos de sus padres, pero quiero evitar futuras burlas en la escuela los niños suelen ser despiadados, no permitiré que nadie les haga daño, pero eso será más adelante por ahora vamos a comenzar a preparar las cosas para el viaje debemos regresar a casa.

— Gracias, mi amor, por todo el apoyo, por quererlos tanto y siempre estaré de acuerdo contigo.

— bueno, nosotros iremos a casa y mis padres se irán con diamante, no quiero arriesgarnos más, seguiré investigando, pero mi prioridad es estar con los niños, quiero que se acostumbren que se sientan cómodos y sobre todo Joan lo acompañaré en todo el proceso.

— sí, amor, vamos, al salir vemos a los niños haciendo una guerra de cojines con mis suegros, ellos gritan, corren, pero lo mejor de todo es que sonríen. Sé que el camino no será fácil, pero juntos lograremos seguir, nos unimos al juego.

— ya estoy cansado, ustedes tienen mucha energía, debemos arreglar todos porque vamos a casa.

— sí.

— todos fueron a buscar sus cosas mientras nosotros nos encargamos del operativo de seguridad, decidimos enviar a los niños a dormir para salir a las cuatro de la mañana.

— mi amor, ¡ya estamos listos! Vamos.

— aún falta una hora.

— no quiero correr más riesgo, aprovechemos el momento.

— está bien, cada uno agarra a un niño, los llevamos a las camionetas y vamos al aeropuerto donde nos esperan dos aviones, el que llevara a mis suegros con diamante y el nuestro abordamos rápido y nos vamos.

— Llegamos a casa y cada niño fue a su habitación menos Esmeralda, que por alguna razón no se ha querido despegar de Keelan así que la llevamos a nuestra cama, y él se acuesta con ella hasta que se duerme.

— mami, yo iré con Joan, a escoger todos los muebles para su nueva habitación, no quiero tomar decisiones por el que ¿te parece? Le pediré a Leandro, que nos acompañe.

— muy bien, amor, yo revisaré algunas cosas por internet para la habitación de Esmeralda.

— ha pasado un mes desde que llegamos a Grecia y quisiera decir que las cosas van muy bien, pero no ha sido así Joan está muy rebelde, sí, nos han citado varias veces a la escuela ahora voy a buscarlo porque se peleó de nuevo lo he dejado ser para que se acostumbre, pero hoy tendremos una plática sería.

— Tío, ¡vámonos de aquí! — vamos, él sube al auto y lo llevo a la playa. — ¿Qué hacemos aquí?

— vamos a comprar helados, bajamos, voy a la tienda, pido unos helados y camino hacia la playa me quitó los zapatos bajo su atenta mirada, luego comienzo a hablar, ¿qué paso hoy? — esos niños son molestos, ¡ya no aguanto más!

—¿por qué no me la habías dicho antes? ¡Sabes que esa escuela es nuestra! — porque no tiene sentido.

— para mí todo lo que me te suceda tiene sentido, no importa que tan tonto creas que sea, te voy a contar una historia, le cuento todo lo que viví en mi adolescencia con mi antigua novia, como me aleje de mis padres y que luego solo conté con ellos porque ella me traicionó.

— ¡Tío, eres un tonto, ¿cómo le hiciste eso a los abuelos?

— cuando uno es joven crees que no necesita ayuda y actúa de forma infantil, pero no quiero que eso pase contigo, yo estoy aquí para escucharte y dedicarte el mismo tiempo que le dedico a tus hermanos — pero no debes hacerlo.

— cierto, pero quiero, me gusta estar para ustedes, en todo momento son mi familia y eso es sagrado para mí.

— los niños me han estado llamando huérfano.

— lo observo, tiene sus manos hechas puños y lágrimas contenidas.

— son unos tontos, pero y tú ¿Cómo te sientes al respecto?

— son tontos, eso lo sé, pero igual me siento mal porque esa es la realidad de mi hermana y mía.

— ¡no tiene que ser así!

— ¡eso no se puede cambiar, tío!

— sí, se puede, obvio solo si tú lo deseas.

— yo quiero adoptarlos y darles mi apellido, sé que es pronto, pero no quiero que nadie los menos precie, tu hermana crecerá y deberá enfrentarse a eso, la gente olvida y al presentarse como Salvatore nadie los llamará huérfanos de nuevo. Pero eso es solo si tú lo deseas, mi intención no es usurpar el puesto de sus padres, sino convertirlos en mis hijos, quiero que sean formalmente parte de mi familia. Ahora no solo tendrás a tus hermanos, sino que seremos una familia de ocho integrantes.

Sabes que en poco tiempo será inevitable que Esmeralda nos vea como sus padres, eso es algo que debes tener muy claro. Igual mande a ampliar una foto de tus padres para siempre tenerlos presentes, pero la vida sigue y debemos evolucionar, no quisiera que te quedarás atrapado en el pasado.

— creo que tienes razón y no es por mí, yo no quiero que mi hermana viva, lo que yo estoy viviendo, es horrible que te observen como el pobre niño que quedó huérfano.

— lo abrazo, siempre podrás contar conmigo, seré como un padre para ustedes, ahora vamos a casa, debemos darle la noticia a tu tía y seguro, Esmeralda nos está esperando.

— sí, tío, gracias, por todo le doy un fuerte abrazo, él siempre tiene las palabras correctas para, mi. Nos ha cuidado, incluso nos preparó unas habitaciones a nuestros gustos.