Liam me ayudo a levantarme del suelo, entrando los dos en el cuarto de baño, cogió unas gasas de un cajón del mueble para limpiarme la herida que me hizo su sicario en mi cara — Giovani ha venido para darme los documentos de divorcio firmados por el, ya no le perteneces mi amor, ya eres completamente mía y pronto seras mi mujer — me dijo — No mientas, Giovani no me haría eso — le dije — Ya no sangras, me voy a cenar con mi amigo, cuando venga esta noche te daré los documentos para que los leas y que te quede muy claro, que no suelo mentirle a quien amo, ciao bambina — me dijo Liam cuando se marchaba del dormitorio Estuve casi toda la tarde andando de un lado hacia el otro lado de la habitación muy nerviosa, esperando a que Liam regresara de su cena con Giovani, sin parar de decirme que Giovani no me podía hacer eso, que era imposible que consintiera aceptar divorciarse de mi, sin por lo menos buscarme y saber dónde estaba, o quién me había secuestrado ya que sabía perfectamente por
Subí al dormitorio dirigiendome directamente al cuarto de baño para mirarme la marca que me hizo Liam en el cuello, intenté disimularlo con maquillaje pero todo fue inutil ya que la marca era bastante notable. Después de retocarse el maquillaje, me marché del dormitorio volviendo al salón — Una de las cosas que te he comentado antes ya la he hecho ¿no quieres saber cual es la otra cosa que quería hacer? — me preguntó Liam — No gracias, no me interesa — contesté Me fije que Liam tenia un movil en la mano, marco ciertos números dandome el movil a mi cuando le contestaron la llamada — Habla, no querías saber de tu padre, pues es el el que está esperando a que le respondas — me dijo — ¿Papa? ¿Eres tú? — pregunté — Alexandra hija ¿cómo estás? — escuche la voz de mi padre preguntandome — Sí papá soy yo, ¿y tú cómo estás? — pregunté — Estoy bien, Alexandra hija, no te preocupes por mí, huye si puedes de ese mal nacido, Giovani te esta buscando, corre Alex hija, corre todo lo que pueda
Los días fueron pasando demasiado deprisa para mi, aunque después de vernos en aquella recepción ya no volví a saber nada más de Giovani. pero lo bueno es que consegui que Liam empezara a confiar un poco más en mí dejándome inclusive que me pasaran algunas horas en el calabozo donde tenía encerrada a mi amiga Bianca.haciéndonos mutuamente compañía — Hola cariño ¿cómo te encuentras hoy? — le pregunté a mi amiga Bianca una de esas mañanas que bajaba a verla — Alexandra, dile a Liam que me de mas heroina, tengo frio y no me encuentro muy bien — me dijo — No Bianca por favor, se pasará y con la heroína no saldras adelante — le dije — Pues sacame de aqui, Alexandra por favor si no en cuanto pueda te juro que me mato aquí, con cualquier cosa que coja de aquí dentro — me decía mi amiga llorando — Está bien Bianca, voy a ver de qué manera te puedo sacar y huir las dos — le dije intentando calmarla — Prometemelo Alex, prometeme que me vas a ayudar a salir de aquí — me dijo mientras me ab
Como Giuliano me dijo, Liam se marchó poco después de casa, me vestí poniéndome lenceria roja fina ya que sabía que a Giuliano le gustaba mucho, me acerque después a la entrada de la casa viendo el taxi que me mando un poco lejos de la casa, pero me dio lo mismo, cogi mi bolso y salí de la casa, bloqueando el paso uno de los sicarios de Liam — No puede marcharse, son ordenes de mi jefe — me dijo — Yo duermo y dejo que tu jefe me folle tambien, asi que no te tengo que dar ninguna explicación y menos a un subordinado como tu, aparte de mi camino ahora mismo — le dije — Sí señora, pero tendré que llamar a mi jefe para decirle que usted abandona la casa — me dijo — No la abandonó, voy a hacer unas compras y ahora vuelvo ¿te vale la explicación? — dije con sarcasmo El sicario se apartó de mi camino dirigiendome seguidamente hasta el taxi que me estaba esperando en el exterior, subí al vehículo y saludé al taxista sin recibir ninguna respuesta por él. El conductor paró el vehículo en la
Al dia siguiente ya era casi de noche y yo estaba en mi dormitorio cuando escuche a varios coches llegar al exterior de la casa, me asome por la ventana del dormitorio y vi bajar de esos vehículos a varios hombres armados como si estuviera haciendo de escoltas de unos hombres que bajaban de esos vehículos muy bien vestidos con trajes muy caros, fijandome que entre esos hombres también se encontraba Giovani. Entraron en la casa y supuse que se habían ido o al despacho de Liam o al salón, me marché de mi dormitorio sin hacer ningún ruido hacia el salon que era donde estaban las luces encendidas, mirando primero que no hubiera ningún sicario vigilando la puerta para que me pillara, me acerqué todo lo mas que pude para escuchar lo que estaban diciendo. — Señores, los reunido en mi casa para celebrar nuestra sociedad, la venta y fabricación de nuestra heroína, será un completo exito, asi que brindo por nuestra sociedad — escuche decir a Liam y luego un ruido como si hubieran chocado copas
El coche donde me tenían detenida, paro enfrente de la comisaría, uno de los policías abrió la puerta trasera indicando que bajara del vehículo, me cogieron del brazo y entramos en aquella comisaría, llevándome hasta una de las oficinas donde había una mujer y un hombre muy serios, me quitaron las esposas obligándome a sentarme en una de las sillas que allí había. — ¿Qué quieren de mí? yo no he hecho nada, ni soy traficante — pregunte — Queremos información, quien trata la heroína, quien la manda, y quien es el jefe de los mafiosos — me dijo el hombre — Yo no sé nada, estaba secuestrada en esa casa — le respondí — No me mienta por favor, si nos ayudas a encerrar al principal jefe, nosotros te ayudaremos — me dijo, en el mismo momento que entró en aquella oficina, otro policía entregando unos documentos — ¿Qué tengo que hacer para que me dejen en libertad? — pregunté — Alexandra Conte,--leyó el documento– divorciada de Giovani Conte otro mafioso, si nos ayuda a ser nuestra confide
Después de una perfecta noche de amor con Giovani, me levanté de la cama dándome cuenta de que estaba sola, entré en el cuarto de baño, me asee y volví al dormitorio, cuando me vestí me marché del dormitorio hacia la cocina para tomarme un vaso de zumo, viendo a Felisa preparando ya la comida de ese dia — Buenos días Felisa, Giovani se marchó de la casa pronto ¿no? — le pregunté — Si cielo, me dijo que tenía cosas que hacer ¿quieres un café o un zumo? — me preguntó — No café no que me hace vomitar gracias, mejor un zumo — respondí Me senté en una de las sillas de la cocina para tomarme el zumo tranquilamente cuando de pronto empecé a escuchar el sonido del movil que la policia me dio, me levanté enseguida de la silla para ir a la entrada de la casa, donde tenía mi bolso colgado en una percha que había, saque el movil marchandome al salón para que Felisa no me escuchara hablar con la policía — Dígame — respondí, nada más descolgar el auricular — Alexandra soy la inspectora Salas,
Para ir a la celebración en la casa del jefe de Giovani, me vesti de acorde con mi embarazo y con el vestido que yo sabia que mas o menos iba a deslumbrar a aquellos hombres, ya que mi intención era que confiaran en mí para poder son sacarles información, aunque sabía que Giovani se enfadaría conmigo y mucho al verme coquetear con esos mafiosos, pero era mi posibilidad de poder salvar a los dos seres que más quería, mi amiga Bianca y mi padre y sabia que tenia que hacer lo posible para que volvieran conmigo, aunque me costase la desconfianza del hombre que amaba. Cuando ya estábamos vestidos, nos marchamos de la casa fijándome en que el chofer ya tenía la puerta de la limusina abierta, ya que Giovani prefirió ir en ese vehículo y no en el suyo, por si en la cena bebía más de lo normal en él. Al llegar a la casa de su jefe, el chofer nos abrió la puerta de la limusina como siempre hacía, bajando los dos y cogida del brazo de Giovani entramos en la casa ya que la puerta de la entrada est