Aquel encuentro entre Bianca y Ricardo lejos de ser un acercamiento reconfortantante por lo mucho que se extrañaban, se había convertido en un encuentro de revelaciones inesperadas. Mientras Bianca sollozaba con la cabeza recostada del sofá de espaldas a él, Ricardo quien permanecía a su lado, se acercó, acarició la espalda de ella, el cuerpo de Bianca reaccionó al instante, ella no podía negar que el tiempo que se había alejado de él, lo había deseado bastante, y ahí estaban otra vez, ambos vulnerables, después de haber tenido cuatro meses alejados. Bianca respondió a aquella caricia, se incorporó de inmediato, se dió la vuelta para ver a Ricardo, el corazón de aquella mujer estaba destrozado, pero no olvidó que en los brazos de aquel hombre, había logrado encontrar el amor, aquel que ella se había rehusado a perseguir otra vez. Fijó sus ojos llorosos en Ricardo, quien la contemplaba con ternura, Ricardo se arrimó un poco mas a ella, tomó entre sus dos manos el rostro delicado
Luego de unos minutos de haberse alejado de la mansión ferrari, Bianca Y Ricardo, se adentraron a uno de los lujosos hoteles del joven ejecutivo, como siempre, el magnate fue recibido por el equipo de seguridad del hotel, conduciendolos a la suite, destinada únicamente para él.Inmediatamente, Bianca recordó aquellos tiempos vividos dentro de ese lugar al lado de Ricardo, desde una gran ventada, ella observaba el mágico paisaje que le desbordó tantos recuerdos, Ricardo se acercó detrás de ella, con dos copas servidas de champagne–Ricardo, ¿que es esto?–dijo ella sorprendida al darse la vuelta–Esto, es para que celebremos nuestro amor–dijo Ricardo–Pero Ricardo, no hay mucho para celebrar, estoy muy preocupada–afirmó ella, tomó la copa, y se alejo de la ventana, hasta una silla que había frente a ella–Yo tambien estoy preocupado, acaso crees que ha sido fácil para mi haberle ocultado por tantos años una verdad como esa a mi hija, y luego llegas tu y cambias todo mi mundo–alegó él m
Mientras Ricardo y Bianca disfrutaban de estar juntos, decididos a no pasar el resto de la noche escondidos dentro del cuarto de ese hotel, aunque esa habitación, tenia las mejores comodidades habidas y por haber, ella creyó que estar en compañía de otros, la iba a mantener lejos de la tentación de estar toda la noche metida entre la sabanas con aquel hombre, del que se había enamorado perdidamente.Agarrados de la mano como dos adolescentes, salieron de aquel cuarto, Ricardo miró a su costado derecho, mientras sostenía la mano de su novia, quien iba con su mirada fija hacia adelante, el y suspiró, le costaba caer en la realidad de que Bianca había vuelto, cuando aquella noche que la vio partir, había perdido todas las esperanzas.–¿Por qué me miras asi?–dijo ella al percatarse que Ricardo no dejaba de observarla–Solo quiero sentir que no es un sueño–dijo y le haló la mano para besarla, ella se detuvo y volteo a mirarlo–Me costó mucho dejarte, debes creerme, pero ahora ya sabes que
Bianca había instalado la duda en la mente de Ricardo, esa noche le costó conciliar el sueño pensando en la posibilidad de que Lorena y su difunta esposa le hayan hecho una mala jugada, pero sería muy perverso de ser cierto, ¿que beneficios sacarian de ello? y aquel doctor, el reconocido Ginecólogo, cómo podia estar involucrado, para Ricardo, esas hipotesis eran inverosímil, pero aun asi, lo atormentaba la duda, con la que no estaba dispuesto a quedarse.En veneciaEl siguiente día de la audiencia, Lorenzo seguia inquieto, inconforme con el resultado de ese primer encuentro en la corte, no durmió todo la noche, metido en su despacho, buscando como reforzar su caso para lo que le esperaba–Buenos días, Lorenzo, ¡amaneciste aca!–avisó Estefy esa mañana al entrar a la oficina de su socio y jefe, al ver el papeleo sobre la mesa, y las ojeras alrededor de sus ojos–No dormiste–dijo mirando el reloj, eran a penas las ocho de la mañana–No pude, me quedé leyendo toda la noche, buscando datos
Norma no le sacaba la mirada de enciama a su amigo Alesandro, quien estaba inquieto, un tanto nervioso, sus manos habían dejado de temblar después de la charla amenazante que tuvo con su jefa, ella no podía entender como aquel hombre con semejante estatura y con tanto brío para la investigación, había caido en el juego de aquella mujer, quien lo tenía comiendo de sus manos, por la supuesta historia de abuso del que ella lo había salvado.–Ahora que es lo que piensas hacer, ¿ ir a rendirle pleitesía a esa señora? –cuestionó Norma con molestía–Como se ve que no estas en mis zapatos–dijo él moviendo las piernas, para levantarse de allí–Pero por qué le tienes tanto miedo, acaso hay algo mas que no me estas contando? –cuestionó ella–No Norma, sobre este caso ya te lo he dicho todo, y me arriesgué demasiado, ya te dije lo que puede suceder si ella decide hablar sobre mi caso–Pero no lo hará, lo usa solo para chantagearte, ella tiene mucho mas que perder que tu–No lo creo, ella es abo
La pareja de novio, luego de disfrutar una larga ducha juntos en el baño, salieron del hotel tan pronto como pudieron, Lorenzo había convocado una reunión de urgencia esa misma mañana con su nueva socia en su oficina, para avisarle de su viaje repentino a Venecia, y de paso, había nunciado a su madre, que Bianca iría a desayunar esa mañana.Un poco tarde su madre recibió la notica, ordenó a alfred que prepara otro desayuno especial, para su hijo y su invitada–No hubiera sido mejor desayunar en el hotel–sugirió Bianca mientras iban en el auto de camino a la mansió–No cielo, además debo organizar algunas cosas antes de irme–Es que no quiero incomodar a tu madre, o a Carmina–Esta bien amor, mi madre ya sabe que volvimos, Carmina debe estar en la escuela, yo soy un hombre adulto, crees que debo estar dándoles explicaciones a todo el mundo–cuestionó el, soteniendo sus dos manos fuertemente al volante–Pues no, solo que–Descuida, será rápido, iremos y desayunaremos, luego yo subiré a
El ejecutivo salió apresuroso de allí, al entrar a la casa, miró por todos lados en busca de Bianca y no la halló–Alfred, has visto a Bianca–preguntó el al mayordomo, quien daba la orden a los demas empleados de servicio, que llevaran la valija del magnate al auto, que aguardaba por él afuera–Creo que lo esta esperando allí–contesto el hombre señalando hacia la salida, y continuó con su taréa, Ricardo salió hasta la entrada principal, encontró a su novia parada, observando hacia el basto jardin que adornaba la entrada de aquella residencia, caminó hasta ella, Bianca se percató de que alguien se arrimaba por detrás, y se dio la vuelta–Ricardo, nos vamos, ¿encontraste a tu madre?–Si, respondió, Bianca vio que el humor de su hombre había cambiado, el permanecía callado, parado fuera del auto con las dos manos metidas en los bolsillos delantero de su pantalón, mientras esperaba a que su chofer acomodara el equipaje dentro del auto, Bianca aguardaba igual que el, parada, pero no dejab
Ricardo y Bianca avanzaron hasta el sillón, Ricardo quiso hacer todo lo posible para no levantar sospecha delante de Lorenzo, de acuerdo a las advertencias de su novia, se sentaron el el mismo sofa, pero separados, Estefy que conocia lo que pasaba entre eso dos, controlo su risa todo lo que pudo, al ver a su amiga, intentando disimular delante de Lorenzo.Estefy al igual que Ricardo, le había advertido a Bianca, que aquello era una pesima idea, que Lorenzo podia enterarse de mala manera, pero ella, persistió en su silencio. El aspecto del abogado en ese momento, era de total seriedad, seguia sentado frente a cientos de papeles que rebalsaban su escritorio, Bianca observaba cada movimiento en silencio, no queria ser ella quien encabezara la charla, pero tal parecia, que todos estaban esperando a que ella hablase, habia ido a Florencia en busca de información importante, una que determinaría el rumbo de la siguiente audiencia–mmm–carraspeó Bianca para empezar, Lorenzo levanto la mirada