Todo lo que Sophie Gates siempre quiso en la vida era ser como su padre, un hombre que sirvió a su país con honor y se había ganado múltiples medallas por sus sacrificios, desde pequeña ella soñaba con empuñar un arma mientras las demás niñas jugaban a las muñecas, su madre que era muy conservadora constantemente la estaba criticando por arruinar todos sus vestidos en sus intentos de camuflarse en los arbustos o entre los árboles, pero a pesar de todo siempre la apoyó, tal vez en parte lo de ser hija única y no dejarle otra opción había equilibrado la balanza a su favor, con el paso del tiempo y la ausencia de su padre en gran parte de su vida, se propuso como misión nunca decepcionarlo y seguir sus pasos, mientras otros niños iban en el verano a campamentos normales, ella se alistó a los boy scouts intentando aprender cosas que podrían aportar algo al futuro que se había trazado, años después al terminar el colegio ingresó a una academia para convertirse en una agente especial del gobierno, quiso alistarse al ejercito pero después de la muerte de su padre en una misión no tuvo corazón para abandonar a su madre por periodos tan largos, quería estar para ella cuando la necesitara.
Su primer año fue bastante difícil, porque debido a su apariencia sus compañeros no la tomaron en serio, sufrió por corto tiempo sin embargo, pues gracias a sus estudios extracurriculares y el apoyo de su padre ella ya era una experta en el manejo de las armas y en artes marciales, cuando se metían con ella en el entrenamiento les daba una lección, pronto sus superiores vieron su potencial y le incentivaron a estudiar cursos alternativos para especializarse en idiomas, psicología y actuación, querían que ella fuese un agente de campo, con su apariencia inocente y su entrenamiento sería un arma mortal. Cuatro años después se había convertido en una mujer temible, su apariencia antes delgada a pesar de curvilínea, ahora era perfectamente tonificada y bronceada, le gustaba correr y practicar ciclismo, se pasaba horas entrenando física y mentalmente para prepararse para distintos tipos de situaciones que podrían darse en las misiones que tendría en el futuro, sus evaluaciones psicológicas habían facilitado su solicitud para ingresar en los grupos de élite, pero lo que habían convencido a sus superiores fueron sus calificaciones perfectas en tiro y combate cuerpo a cuerpo, a pesar de no tener más de 170 centímetros de altura y pesar 61 kilos fue capaz de derribar a compañeros más fornidos y bien entrenados, aparentemente tenía una personalidad dócil, pero sus años de entrenamiento le ayudaron a controlar todas sus emociones y no transmitir siquiera un pensamiento a través de algún gesto instintivo. Una de sus especialidades era la infiltración, podía actuar como una adolescente alocada y al minuto siguiente ser una chef profesional, manejaba las armas blancas con la misma facilidad que las armas de fuego. Cuando se graduó su madre lloró tanto que tuvieron que sostenerla hasta que terminara la presentación de todos los egresados, fue uno de los días más felices de su vida, su madre estaba tan orgullosa y con ello sintió que de alguna manera su padre estaba allí agasajándola.
En su primera misión tuvo que trabajar como camarera en un bar que según los rumores que llegaron a la policía comercializaba drogas a estudiantes de distintos colegios locales, no tardó ni 2 días en conseguir el empleo, se mudó 2 semanas antes haciéndose pasar por una chica que había venido para estudiar Literatura clásica, se registró en la universidad usando su alias para que no hubiera ninguna sospecha sobre su persona, su personalidad era de una pueblerina que tenía el sueño de conquistar la gran ciudad y que necesitaba urgentemente de un empleo de medio tiempo para sobrevivir allí, fue fácil, un vestido ultrapasado, un peinado conservador, una sonrisa cálida y el dueño le había dado el trabajo a pesar de que no necesitaban una camarera adicional, una semana después había descubierto el código para hacer los pedidos y cómo se daba las transacciones de las drogas, los alumnos venían o llamaban para comprar un ítem específico del menú detallando la cantidad y el dueño iba a hacer la entrega en algún punto de la ciudad, como era nueva le habían dejado en la cocina los primeros días lavando platos, al cuarto día una compañera se enfermó y tuvo que reemplazarla atendiendo a los clientes, allí escuchó lo necesario para deducir que “tarta de uva” y “tarta de kiwi” no estaban en el menú, dos días más tarde ya tenía pruebas suficientes para apresar al dueño del local, pero sus superiores estaban interesados en desmantelar la banda completa, así que ella solo siguió los rastros y juntó evidencias que permitirían obtener más información sobre los cabecillas, después de eso consiguió todas las rutas de distribución de cada banda que investigó, en dos años viviendo con alias ella se había hecho una experta en infiltración y obtención de informaciones cruciales para resolver crímenes organizados. Seguía actualmente a una banda que traficaba drogas y armas de grueso calibre a pandillas criminales menores, habían rumores de que pronto traerían una carga muy valiosa, que si salía a las calles incluso podría destruir pueblos completos, ese tipo de armas eran utilizadas por los grupos criminales para hacer atracos, estaba muy de moda hacer explotar los bancos para robar las bóvedas de seguridad aparentemente impenetrables para ladrones impulsivos sin sofisticación. Sophie fue asignada a esa misión de última hora porque la persona que habían enviado había sido descubierta y tuvieron que sacarle de urgencia para salvar su vida, los criminales odiaban a los policías, pero odiaban más a los topos, y ella era una de las mejores en ese juego.
Esa mañana cuando despertó no tenía planeado hacer nada en específico, había concluido recientemente una misión y estaba como diría su madre de “vacaciones”, pero cuando su superior la llamó no pudo estar más contenta, ya no se acostumbraba a tener tiempo de ocio para sí misma, le gustaba estar en las calles haciendo el bien, a pesar de que en los últimos años no había tenido mucho tiempo para vivir su propia vida, sentía que esa era la existencia que ella quería, la que le daba satisfacción personal, su padre estaría contento de saber a cuantos criminales ella había sacado de las calles gracias a sus trabajos de encubierto.
Un año atrás integrantes de esa misma banda habían matado a un compañero suyo, y ella se había prometido que atraparía al criminal que lo mató a sangre fría, tenía que apresurarse si quería empezar a trabajar hoy mismo en su nueva misión.
Construir un alias no era simplemente crear datos digitales en el sistema como la mayoría de las personas pensaba, implicaba crear todo un personaje con características individuales y un pasado que fuese creíble, requería invertir tiempo y esfuerzo para transformar el cuerpo y lucir como la persona que se interpretaría, luego hacerte de una reputación muy mala en el barrio para que fueses aceptado sin sombra de dudas en una pandilla criminal, infelizmente ella no tenía mucho tiempo para hacer todo ese proceso, tendría que improvisar, por suerte después de trabajar tanto tiempo en las calles ya tenía sus propios contactos, personas del bajo mundo que le debían favores y le ayudarían a crear una historia rápidamente para infiltrarse con facilidad en algún lugar o fingir ser la persona que quisiera, tomó sus llaves y salió de su departamento.
Al llegar a la oficina, se encontró con un colega con el que siempre tenía algún problema que cobrar
Subió al auto y abrió el sobre y empezó a leer los avances del caso, cuando llegó a la página en donde le daban información sobre su nueva identidad espetó disgustada
- ¡Mierda!
No estaba molesta por el alias en sí, pero no se esperaba que fuese algo tan elaborado, pensó que se haría pasar por una traficante sin embargo no era el caso, el papel que iba a interpretar requeriría de mucho esfuerzo para camuflar su apariencia actual y no tenía el tiempo para perfeccionarlo como estaba acostumbrada a hacer para cada misión, era una situación de emergencia así que llamó a la persona que podría salvarle en esa situación
Gracias a Dios Francine siempre le ayudaba cuando era necesario, como profesional de maquillaje artístico ella era una experta en crear disfraces, efectos especiales y cualquier cosa que uno necesitara, incluso aparentar más edad o menos peso, en su caso ella estaba en forma, demasiado a decir verdad, ahora necesitaba parecer una mujer débil y enfermiza, su nuevo rol era el de una adicta a la heroína.
Dos horas más tarde estaba sentada frente a un espejo, su amiga preparaba todos los materiales necesarios para su transformación, nunca dejaba de sorprenderle ese lugar, tenía tantos artilugios que parecía un museo, desde máscaras de plástico hasta disfraces de payaso, ella era conocida por su valentía pero sinceramente ese lugar le ponía los pelos de punta, su amiga le pidió que se parara para observarla mejor
Tenía la esperanza de que su amiga asumiera su identidad como mujer y sacara provecho de su belleza brutal, volvió a mirar el cuerpo irrealmente bello que tenía en frente, su tez bronceada, sus curvas proporcionales, su cabello castaño claro, los ojos aguamarina, esa mujer no tenía idea de lo bella que era.
Cuando su amiga terminó el trabajo estaba irreconocible, parecía haber perdido al menos 10 kilogramos, se veía pálida y con una ojeras fantasmales, no le extrañaba que Francine trabajara para las grandes productoras de cine, era increíblemente talentosa, se giró para ver su atuendo que parecía haber salido de un basurero mal oliente, se veía como una persona que vivía en la calle, levantó un poco la falda de su vestido mugriento para ver sus piernas, ahora parecían débiles y estaban llenos de moretones típicos de alguien que no cuida con quien anda o lo que hace, simplemente era perfecto, si no la tocaban demasiado jamás notarían sus músculos firmes bajo aquel pedazo de tela desgastado, sonrió, si su madre la viera ahora tendría un ataque
Condujo hasta un viejo hotel abandonado que ahora servía de prostíbulo, una conocida vivía allí y le servía de espía para obtener información de las calles, su primera parada era para ocultar el vehículo de escape y sus armas, dejó el auto en el depósito de la planta baja, era su base de comando cuando estaba por esa zona, entró por la puerta principal del edificio que ya se estaba cayendo a pedazos, tuvo cuidado para no apoyarse en nada mientras subía por las escaleras, tocó 7 veces la puerta para anunciarse a sí misma, era el código que habían combinado con madame Carmen, aguardó unos segundos antes de que le abriera la puerta, a pesar de ser una mujer de mediana edad la madame seguía en muy buen estado pensó al verla semidesnuda ajustando su bata, estaba con un cliente notó
La mujer cerró la puerta y Sophie bajó a la planta baja, odiaba esa parte del burdel, estaba lleno de hombres borrachos y con exceso de hormonas, se sentó en una de las mesas y aguardó a que bajara la madame, esperaba que no tardara mucho, si alguno se acercara a ella a hacerse del gracioso tendría que ponerlo en su lugar y no quería arruinar todo el trabajo de su amiga Francine
Sophie no durmió casi nada, se pasó la noche planeando la estratagema que emplearían para atrapar al jefe de la banda de los tiburones, ella sabía lo que tenía que hacer, ya lo había hecho muchas veces, haría el juego de atrapa al ratón, haciéndose pasar por una mujer inofensiva y despreocupada, una vez que estuviese en la guarida vería la manera de estar a solas con el hombre para someterle y mandarle la señal al equipo de respuesta que ingresaría al lugar disparando sin ningún miramiento, solo necesitaban al jefe de la banda vivo para obtener la información que querían, cuando ella garantizara su seguridad los demás podrían ir al infierno, y bien que lo merecían pensó, esa gente arruinaba millones de vidas cada año, era una mujer piadosa, pero a los contrabandistas y malhechores aprendió a verlos como objetos, personas inhumanas que no merecían misericordia, ella siempre disparaba para inmovilizar, pero en ocasiones matar era necesario, pensó en la pobre Carmen que casi fue asesin
El zumbido la dejó desorientada por unos instantes, apenas pudo reaccionar a tiempo de moverse unos metros más lejos del viaducto que se partió por la mitad y empezó a derrumbarse rápidamente, Sophie intentó alejarse lo suficiente para evitar ser aplastada por los destrozos, había calculado mal el ángulo del disparo y la estructura había cedido hacia ambos lados dejándola también en la ruta directa del derrumbe inesperado , mientras intentaba salvar su vida y el pánico se apoderaba de ella, no percibió que los camiones que venían a gran velocidad al ver el derrumbe intentaban frenar desesperadamente, corrió lo más rápido que pudo pero al ver que venían en su dirección dudó y paró un instante, lo suficiente para ver como uno de los vehículos blindados entraba debajo del camión levantándole las ruedas traseras hac
Parte 1 – Clark ¡Mierda! creo que está muerta — espetó al tomarle el pulsoCuando vio los cortes de la mujer estuvo seguro de que ya no tenía vida, entonces tomó el teléfono y llamó a recepciónBuenas tardes, soy Tomas Clark Henderson de la habitación 315Buenas tardes ¿en qué puedo ayudarle señor?Necesito que envíe al gerente inmediatamente a mi habitación¿Tiene algún inconveniente señor?Nada en especial, pero necesito que la persona a cargo venga a vermeSi me indica su problema trataré de ayudarlo señorNo creo que usted pueda resolver mi problema — dijo molestoCualquiera que sea el inconveniente puede decirme y yo lo resolveré — le prometióDe acuerdo…. sucede que aca
Parte 1 SophieSophie llegó a la sala de autopsias, ese lugar apestaba a cloroformo, aún no se acostumbraba a acompañar al médico en su revisión, en su empleo anterior ella no tenía que hacer esas cosas, todos los cadáveres que ella había visto eran malnacidos culpables que se merecían lo que tuvieron, no eran cuerpos de víctimas inocentes como sucedía ahora en la mayoría de sus casos.Hola Doc¡Gates!, pensé que este caso era de WilsonY lo es, pero parece que la víctima encaja en la victimología de uno de mis casos abiertosYa veo, qué debo buscar exactamente — ella miró el cuerpo de la joven, no podría tener más de 23 años, era una rubia muy bella pensó, bueno lo era antes de ser masacrada de esa manera, sintió mal estar de pronto enfocó su mirada
Parte 1 - GatesDos horas antes del atentadoA Gates le habían dado el caso de Wilson, estaba contenta de tener total acceso a la investigación, necesitaba determinar cuál era la conexión con entre ambos casos, su capitán personalmente le había pedido que estuviera al mando a pesar del disgusto de su colega que al parecer estaba ofendido, solo podía ser obra del señor Henderson pensó, lo vería más tarde, necesitaba hacerle más preguntas muchas cosas no encajaban en la historia, entendía por qué un imitador usaría los métodos de un asesino serial para matar, los psicópatas infelizmente tenían fanáticos, pero ¿por qué habían matado a la mujer en la habitación del señor Henderson?, eso no tenía ningún sentido para ella, no podía ser una mera coincidencia,
Sophie estaba hipnotizada por aquellos ojos tormentosos que de pronto se volvieron cálidos, aún le estaba sujetando la mano cuando él le dijo de forma casual que lo llamara Clark, eso la sacó de su ensoñación y la puso en guardia nuevamente ¿Ya se siente mejor? — le preguntó para cambiar de tema Sí — dijo él sonando poco convincente, entonces ella agregó Es normal que se sienta abrumado, acaba de pasar por una experiencia traumática, déjeme que le ayude a pararse — ella se levantó y le extendió ambas manos Estoy bien — respondió él de forma indiferente, rechazando su ayuda y volviendo a ser el hombre frío de hace unos instantes — puedo hacerlo solo — agregó parándose con dificultad, Sophie lo miró intrigada ¿qué le estaría pasando? De acuerdo, quiero hacerle algunas preguntas antes de que llame a mis compañeros Está bien ¿Conocía al hombre? — él miró el cadáver y dijo: No, pero él si al pare
Sophie pensó que había escuchado mal, pero él la miraba muy divertido, algo en su interior hizo sonar todas sus alarmas¿Qué dices?Tú serás mi escolta¡Eso no puede ser posible!¿Porque no?Yo soy una detective muy ocupada — le dijo como excusa, sabiendo que no era válidaTú misma me dijiste que soy una persona de interés en este caso y tu jefe estuvo de acuerdo en que esto sería lo mejor para ambosSeñor Henderson…— dijo de forma condescendiente — tenemos un excelente personal que puede hacerse cargo de usted¿Personas como él? — espetó señalando con la cabeza a Wilson que pasaba por allí en ese momentoHummm…Sabes que estoy metido en este lío por culpa de la policía… — ella no pudo negar ese h
Parte 1 – Clark Cuando llegó a casa sintió que por fin podía respirar, realmente pensó que hoy sería su último día en la tierra, cuando el agresor le sujetó y le apuntó con el arma a la cabeza, todo su cuerpo reaccionó devolviéndolo al pasado, a uno de los peores momentos de su vida, luchó con todas sus fuerzas para mantenerse en el presente y estar atento a la situación que lo rodeaba, pero a cada contacto con su atacante, su ansiedad aumentaba y solo quería salir corriendo, cuando escuchó la voz de Gates en el estacionamiento, sintió un alivio tan grande que por un momento se le olvidó que aún era el rehén de un psicópata asesino, ella controló la situación de forma magnánima, supo exactamente lo que tenía que hacer para distraer al hombre y tomar ventaja de sus acciones despreocupadas, cuando le disparó a su agresor pensó que le había dado a él, sus piernas le fallaron y cayó al piso, en ese momento perdió la compostura y no fue capaz de contr