Alexander estaba en la sala de espera recostado en la silla hacia atrás con los ojos cerrados, la única imagen que inundaba su mente era el rostro de Dayana y lo hermosa que se miraba en la fiesta, era una lástima que terminara en ese lugar lastimada.— Señor Escalante... – Luis apareció en la sala, Alexander se puso de pie rápidamente.— Puede pasar a ver a Dayana acompañeme — ClaroAmbos hombres se fueron juntos por el pasillo, al pasar a las enfermeras y a otras mujeres se les iba la mirada sobre Alexander, tenía un imán natural integrado para atraer miradas, además de un aspecto físico y atractivo llamativo para las mujeres; al entrar en la habitación Leonel se puso rapidemente de pie para marcharse.— Bueno vendré a verte luego pantera...Leonel se despidió de Dayana y salió de la habitación junto con el médico Luis, cerrando un poco la puerta al marcharse, Dayana levantó la mirada, al toparse con los ojos azul oscuro de Alexander la invadió una sensación algo extraña.— ¿Como te
El resto del fin de semana se paso volando, Dayana como estuvo en el hospital se la pasó más que aburrida, durmiendo o viendo televisión, Leonel iba a las horas de visita para pasar el rato con ella; Alexander había estado muy ocupado así que no pudo ir a verla, más sin embargo había pedido el número del hospital y llamaba por lo menos dos veces al día para saber cómo estaba ella. Dayana había sido dada de alta en domingo en la noche, Alexander se moría por ir a verla y llevarla a su casa, pero lo más probable era que fuera su hermano por ella así que se quedó en casa pensativo......Al día siguiente en la escuela Dayana iba saliendo de una de sus clases cuando fue interceptada por Edgar.— Hola cariño ¿Cómo estas? Te me perdiste el fin de semana.Edgar paso su brazo por los hombros de Dayana, ella hizo un gesto de molestia ya que el dejo caer su peso encima, la herida en su costado estaba totalmente recuperada solo le causaba algo de molestia era una suerte que el vidrio no perfora
Los ojos oscuros de Tayler se fueron a ver el dinero, saco la paca de billetes pasando el dedo índice por ellos.— ¿De qué trato hablas? — Iré cada sábado a la casa de Edgar, necesito que busques la manera de hacerlo que se vaya de casa cuando yo esté ahí y me deje sola.— Si no quieres estar con el mejor no vayas ¿No crees? porque tirar tanto dinero de esa manera— No es tirar Tayler, me sobra el dinero para hacer lo que yo quiera y todo lo que hago tiene un propósito...— ¿Y que si no acepto y le digo a Edgar?Tayler se puso muy valiente tentando a la suerte, en realidad lo único que quería era no parecer un interesado por el dinero cuando en realidad si lo era, así que pensó que negarse un poco lo haría parecer menos miserable por traicionar a su amigo por dinero; Dayana sabía muy bien lo que el intentaba, solo quería que ella insistiera para después el ceder, pero ella no estaba de humor para esas cosas y pensó que era una buena oportunidad para darle una advertencia a Tayler si
Cuando Dayana entró a su departamento arrojó su mochila y se fue directo a la cocina, abrió la alacena y sacó una bolsa de papas que empezó a comer cuando tocaron la puerta de su departamento, ella ya sabía quien era así que sin revisar abrió la puerta.Tayler se quedó impresionado al entrar, el lugar era sumamente amplio y tenía un estilo contemporáneo muy elegante, lo primero que llamó su atención fue la gran y larga ventana de piso a techo que dejaba ver la cuidad desde lo alto. — ¿Tienes hambre?. – Pregunto Dayana al cerrar la puerta— ¿Eres... la hija de algún mafioso? Las mente de Tayler empezó a hacerse un sin fin de ideas sobre Dayana, al ver su caro departamento, el dinero que le había dado y su manera de ser y vivir pensó lo peor, después de todo no era algo tan descabellado, nunca se hubiera imaginado que ella fuera alguien de dinero, siempre mantenía un perfil bajo y una manera de vivir muy tranquila y nada llamativa.— No... mis padres tienen negocios — ¿¡De qué tipo?!
Al día siguiente las horas se pasaron rápido entre clases, Dayana recibió un recordatorio que tenía en su celular y se fue directo a buscar a Leonel.Su hermano estaba recostado en el pasto apoyando la cabeza sobre las piernas de su novia Amanda Lizarraga, era una chica dulce y gentil, tenía el cabello castaño claro y los ojos color miel, además de un bonito y esbelto cuerpo, Amanda era una chica de vestidos y faldas, accesorios por doquier y zapatos lindos, Dayana odiaba estar con ambos, su romanticismo y muestras de afecto la hacían sentir incómoda, pero esta vez necesitaba a Leo. — Leonel... – Dayana se acerco a ellos, en cuando la miraron Leonel se acomodó y Amanda la saludó.— Dayana ¡hola!— Que tal Amanda. ¿Como estas? — Bien gracias ¿y tu?— Bien gracias por preguntar.– la voz de amanda era melodiosa y suave, aveces le irritaba un poco a Dayana. — Cariño debo irme, tengo unos asuntos que atender con mi hermana.Leonel se puso frente a ella para darle un tierno beso en los l
Esmeralda y Alexander llegaron a un bonito restaurante que estaba en una plaza comercial muy transcurrida de la cuidad, el abrió la silla para Esmeralda, ella se sentía totalmente realizada y encantada, varias mujeres del establecimiento miraban a Alexander con asombro, cosa que hizo a Esmeralda sentirse a un más importante al ser su pareja.En el mismo restaurante entró Leonel con Amanda, curiosamente se sentaron en la mesa de al lado de Alexander y Esmeralda. Cuando Leonel estaba con Amanda era como si nada más existiera por lo tanto no se dio cuenta de que su "Cuñado" estaba en la mesa de al lado con otra mujer.Leonel le pasó por mensaje a Dayana el nombre del restaurante donde estaban, ella tenía el ánimo por el piso, se sentía preocupada no sabía como tocar el tema de la inyección con Leonel, salió de el hospital y se dirigió al restaurante, llevaba el brazo doblado con un algodón en la vena, ya que al doctor Luis se le ocurrió sacarle sangre para unos exámenes al último momento
Dayana permaneció en shock por unos segundos antes de reaccionar, en sus ojos verdes había una mirada desconcertada, mientras en los ojos azules de Alexander había un toque de desesperación. — ¿¡Que haces tu aqui?! .– Pregunto Dayana molesta.— Yo te hize una pregunta primero.Alexander soltó a Dayana y se separó unos centímetros de ella, se puso recto y serio observándola, pero ella no se sintió ni un poco intimidada ante tal presencia.— No contestaré nada hasta que me digas ¿cómo llegaste aquí? ¿Tu como sabes donde vivía? Ella cruzó los brazos molesta y le habló igual de firme que el, Alexander se empezó a sentir nervioso, no ante la actitud de Dayana si no que ¿Como iba a decirle que estuvo como acosador siguiendola el otro día y así era como el sabía cuál era su edificio?, mintió tratando de mantener una imagen respetable.— Edgar me lo dijo— El no sabe en qué departamento vivo...El quedo sorprendido ante tal respuesta, estaba seguro de a ver respondido de la mejor manera pe
La necesidad de estar con ella iba aumentando cada vez más, su cuerpo pedía a gritos sentir la piel de esa mujer."Es puro deceo, estando con ella esta vez estoy seguro que desaparecerá"Con eso en mente Alexander sin previo aviso camino hacía Dayana y comenzó a besarla, esto la tomó por sorpresa, hace un segundo estaba pensando en como correrlo y ahora lo tenía tan cerca de ella. Su cabeza le pedía a gritos apartarlo, le exigía deshacerse de ese hombre, pero su cuerpo no le permitía hacerlo, la sensación de tener los labios de el sobre los de ella nuevamente la llenaba de éxtasis, las manos de Alexander empezaron a recorrer su cuerpo, a meterse bajo la tela de su ropa para acariciar su espalda desnuda, eso hizo que un inmenso placer despertara desde su interior, así que ignorando las voces en su cabeza por primera vez decidió seguir a los instintos de su cuerpo, a la necesidad que tenía de la piel de ese hombre.Al sentir la suave piel de Dayana bajo sus manos y probar nuevamente el