Alexander no le quedó de otra que ayudar a Esmeralda a levantarse, le tendió su mano así como lo hizo con Dayana pero al tomarla esta empezó a quejarse más. — Me duele mucho Alex, no puedo levantarme, podrías cargarme y llevarme a una silla porfavor...— Claro... - Alexander no muy animado por la idea termino cediendo a ayudarla, apenas iba a ponerla en una silla cuando su madre llegó.— No Alex llévala dentro de la casa porfavor un doctor ya va para allá a revisarla.- El suspiró y se llevo en brazos a la delicada mujer.— Dayana o querida ¿Estas bien? Vamos dentro para que un médico te revise.— No es necesario estoy bien gracias.Dayana sonrió ampliamente queriendo dar inca pie a sus palabras, Georgina le creyó completamente miro la parte donde Dayana tenía puesta su mano había una mancha oscura que cubría gran parte del vestido hasta abajo.— Querida tu bonito vestido esta todo empapado, debes de tener frio, vamos dentro, te mandaré perdí otro vestido.— No no.. en verdad estoy bi
Alexander se llenó de pánico y preocupación al ver la sangre en su mano y a Dayana cada vez menos lúcida, su corazón empezó a latir desesperado y ansioso el chófer del auto se bajo y les abrió la puerta.— Suban porfavor tengo órdenes de llevarla al hospital.El no se paró a preguntar quién era ese hombre o a que hospital irían, tomó a Dayana en brazos y subió junto con ella en la parte tracera del automóvil. El chófer era rápido y hábil para manejar, era consiente que llevaba a una joven en un estado crítico quizás, estaba nervioso por regarla en algún sentido, después de todo fue uno de los doctores más importantes del hospital privado quién lo mandó a buscarla. — Dayana no te duermas porfavor...Alexander empezó a acariciar la mejilla de Dayana con cariño, ella apesar de estar algo débil era consiente de todo, si no fuera por su falta de energía abría retirado la mano de el hombre pero en verdad no podía, en ese instante los ojos de ambos se encontraron, Alexander tenía una mirad
Alexander estaba en la sala de espera recostado en la silla hacia atrás con los ojos cerrados, la única imagen que inundaba su mente era el rostro de Dayana y lo hermosa que se miraba en la fiesta, era una lástima que terminara en ese lugar lastimada.— Señor Escalante... – Luis apareció en la sala, Alexander se puso de pie rápidamente.— Puede pasar a ver a Dayana acompañeme — ClaroAmbos hombres se fueron juntos por el pasillo, al pasar a las enfermeras y a otras mujeres se les iba la mirada sobre Alexander, tenía un imán natural integrado para atraer miradas, además de un aspecto físico y atractivo llamativo para las mujeres; al entrar en la habitación Leonel se puso rapidemente de pie para marcharse.— Bueno vendré a verte luego pantera...Leonel se despidió de Dayana y salió de la habitación junto con el médico Luis, cerrando un poco la puerta al marcharse, Dayana levantó la mirada, al toparse con los ojos azul oscuro de Alexander la invadió una sensación algo extraña.— ¿Como te
El resto del fin de semana se paso volando, Dayana como estuvo en el hospital se la pasó más que aburrida, durmiendo o viendo televisión, Leonel iba a las horas de visita para pasar el rato con ella; Alexander había estado muy ocupado así que no pudo ir a verla, más sin embargo había pedido el número del hospital y llamaba por lo menos dos veces al día para saber cómo estaba ella. Dayana había sido dada de alta en domingo en la noche, Alexander se moría por ir a verla y llevarla a su casa, pero lo más probable era que fuera su hermano por ella así que se quedó en casa pensativo......Al día siguiente en la escuela Dayana iba saliendo de una de sus clases cuando fue interceptada por Edgar.— Hola cariño ¿Cómo estas? Te me perdiste el fin de semana.Edgar paso su brazo por los hombros de Dayana, ella hizo un gesto de molestia ya que el dejo caer su peso encima, la herida en su costado estaba totalmente recuperada solo le causaba algo de molestia era una suerte que el vidrio no perfora
Los ojos oscuros de Tayler se fueron a ver el dinero, saco la paca de billetes pasando el dedo índice por ellos.— ¿De qué trato hablas? — Iré cada sábado a la casa de Edgar, necesito que busques la manera de hacerlo que se vaya de casa cuando yo esté ahí y me deje sola.— Si no quieres estar con el mejor no vayas ¿No crees? porque tirar tanto dinero de esa manera— No es tirar Tayler, me sobra el dinero para hacer lo que yo quiera y todo lo que hago tiene un propósito...— ¿Y que si no acepto y le digo a Edgar?Tayler se puso muy valiente tentando a la suerte, en realidad lo único que quería era no parecer un interesado por el dinero cuando en realidad si lo era, así que pensó que negarse un poco lo haría parecer menos miserable por traicionar a su amigo por dinero; Dayana sabía muy bien lo que el intentaba, solo quería que ella insistiera para después el ceder, pero ella no estaba de humor para esas cosas y pensó que era una buena oportunidad para darle una advertencia a Tayler si
Cuando Dayana entró a su departamento arrojó su mochila y se fue directo a la cocina, abrió la alacena y sacó una bolsa de papas que empezó a comer cuando tocaron la puerta de su departamento, ella ya sabía quien era así que sin revisar abrió la puerta.Tayler se quedó impresionado al entrar, el lugar era sumamente amplio y tenía un estilo contemporáneo muy elegante, lo primero que llamó su atención fue la gran y larga ventana de piso a techo que dejaba ver la cuidad desde lo alto. — ¿Tienes hambre?. – Pregunto Dayana al cerrar la puerta— ¿Eres... la hija de algún mafioso? Las mente de Tayler empezó a hacerse un sin fin de ideas sobre Dayana, al ver su caro departamento, el dinero que le había dado y su manera de ser y vivir pensó lo peor, después de todo no era algo tan descabellado, nunca se hubiera imaginado que ella fuera alguien de dinero, siempre mantenía un perfil bajo y una manera de vivir muy tranquila y nada llamativa.— No... mis padres tienen negocios — ¿¡De qué tipo?!
Al día siguiente las horas se pasaron rápido entre clases, Dayana recibió un recordatorio que tenía en su celular y se fue directo a buscar a Leonel.Su hermano estaba recostado en el pasto apoyando la cabeza sobre las piernas de su novia Amanda Lizarraga, era una chica dulce y gentil, tenía el cabello castaño claro y los ojos color miel, además de un bonito y esbelto cuerpo, Amanda era una chica de vestidos y faldas, accesorios por doquier y zapatos lindos, Dayana odiaba estar con ambos, su romanticismo y muestras de afecto la hacían sentir incómoda, pero esta vez necesitaba a Leo. — Leonel... – Dayana se acerco a ellos, en cuando la miraron Leonel se acomodó y Amanda la saludó.— Dayana ¡hola!— Que tal Amanda. ¿Como estas? — Bien gracias ¿y tu?— Bien gracias por preguntar.– la voz de amanda era melodiosa y suave, aveces le irritaba un poco a Dayana. — Cariño debo irme, tengo unos asuntos que atender con mi hermana.Leonel se puso frente a ella para darle un tierno beso en los l
Esmeralda y Alexander llegaron a un bonito restaurante que estaba en una plaza comercial muy transcurrida de la cuidad, el abrió la silla para Esmeralda, ella se sentía totalmente realizada y encantada, varias mujeres del establecimiento miraban a Alexander con asombro, cosa que hizo a Esmeralda sentirse a un más importante al ser su pareja.En el mismo restaurante entró Leonel con Amanda, curiosamente se sentaron en la mesa de al lado de Alexander y Esmeralda. Cuando Leonel estaba con Amanda era como si nada más existiera por lo tanto no se dio cuenta de que su "Cuñado" estaba en la mesa de al lado con otra mujer.Leonel le pasó por mensaje a Dayana el nombre del restaurante donde estaban, ella tenía el ánimo por el piso, se sentía preocupada no sabía como tocar el tema de la inyección con Leonel, salió de el hospital y se dirigió al restaurante, llevaba el brazo doblado con un algodón en la vena, ya que al doctor Luis se le ocurrió sacarle sangre para unos exámenes al último momento