–¡Me canse! -Mire a Thomas con dureza, mientras que no grité para nada, solo hable un poco más fuerte de lo usual. –No es justo que hables de esa manera, de la mujer que te tiene comiendo como un cerdo. -Thomas y Mark de inmediato se sorprenden, de que este hablando con fuerza. –Deberías de ser más agradecido con ella, de que es buena mujer contigo. -Tome mi bolso dispuesto a retirarme. –Tienes tanta suerte de que ella este contigo, porque sé que ninguna mujer aguantaría lo que haces con ella. No pude más y salí de la casa, quería caminar sola por las calles, hasta llegar a mi casa, pero antes de que lo hiciera, Caroline salió tras de mí corriendo. –¡Lisa! -Me detiene. –¿Qué paso? -Me pregunta como si no supiera, que su esposo es un idiota. –¿Qué no lo notas? –Le pregunté furiosa, mientras mis ojos se abren. –Tú esposo estaba hablando de ti, como si no valiera nada y tú solo haces como si no pasara nada. –Lisa…-Pero no dejo que ella continúe. –Sí eso es lo que a ti te gusta, no c
El sábado llego, toda la familia y amigos de los Morgan, estaban en el hipódromo de Ascot, solo la crema y nata podía asistir a esta clase de eventos, en donde todos vestían ropa de coctel muy fina. El lugar estaba lleno de comida y bebidas, mientras toda la gente socializaba, hablando mal de la otra gente.¡Qué malo era ser millonario! Así solo puedes hablar mal de los que te codean, supongo que no pueden hablar mal de las personas pobres. ¡Qué suerte tienes lo pobres! Ya que se codean con muchas personas, y si, quizás hablen mal de ti a tus espaldas, pero no creo que hablen de ti, como lo hacen los ricos. Ese hermoso día de sábado, estaba usando un bello vestido de flores color crema. Usaba también unos tacones altos y un sobrero muy hermoso, mientras que mi esposo, estaba usando un traje muy sencillo pero muy costoso, de color café. Sus pantalones eran blancos, usando también unas botas negras, que lo hacían ver como todo un príncipe. Lástima que estaba muy lejos de serlo. La ma
–Se me olvido totalmente, retirar su invitación. - su madre es la que me responde. –Lo lamento. -Se disculpa con seriedad. –No me quedaré aquí, compartiendo el mismo aire que esa estúpida mujer. -Les dije a los dos muy molesta, ya que esto no me parecía como un accidente, sino que era algo armado. Así que me levante de mi asiento, mientras dejaba las gafas caer al suelo. –Mi amor. -Mark me toma del brazo. –Por favor no te vayas. -Me ruega. –Cariño, quédate. -Me pide ahora Nora, mientras que yo no puedo ser tan estúpida, como para quedarme y ver que esa mujer mire a mi esposo. –En este momento, creo ser yo la persona, que sobra en este lugar. Me retire de los asientos, mientras que un hombre me siguió el paso. Era un joven guardaespaldas, que en ese momento no se me hacía conocido.–Señorita Morgan. -Llama mi atención, así que de inmediato lo miré, dándome cuenta sorpresivamente, que era el guardaespaldas personal de Mathew. –¿Richi? -Pregunté sorprendida de que me hablara. –Mi
–Más tarde regañare a Mark por lo que hizo, pero tú te tuviste que quedar en tu lugar.–No iba a quedarme en el mismo lugar, en donde está la zorra de mi marido -Exprese con odio. –Sí estuve en el lugar, de la supuesta novia de Mathew , es porque su hijo tuvo compasión por mí, al ver que Lisa estaba en el lugar. -Ahora le hago frente. -Al menos una persona de esta familia, tuvo piedad por mí. -La mujer no sabe que más decir, supongo que si su esposo la hubiera engañado como el mío lo hizo, no compartiría ni siquiera el mismo aire con aquella mujer. Y menos sabiendo, que Nora es una mujer realmente orgullosa. Así que deje a Nora hablando sola.Había una gran parte de mí, que solo se preocupaba por Mathew , así que acudí de inmediato a la enfermería, pero cuando llegué al lugar, solo estaba un viejo hombre con bata, limpiando su escritorio.–¿Disculpe? -Llame la atención del viejo hombre, que de inmediato me mira. –¿Y Mathew Morgan? -Es lo único que pude decir, ya que había corrido bast
Al terminar ese beso tan romántico, que me robo varios suspiros, lo miré a los ojos. Sus ojos grises ya no lucían opacos, sino que ahora lucia unos ojos brillantes, que demostraban que estaba realmente feliz.–Tus labios siempre sabrán bien, al lado de los míos. -Murmura mientras limpia mi boca, ya que quizás mi labial este por todas partes. Yo no puedo evitar sonreír como si estuviera enamorada, y aun que quisiera negarlo y no decirlo, realmente estaba enamorada de Mathew .–¿Tú crees eso? ¿Tan seguro estas de ti? -Le pregunté mientras alzaba una de mis cejas.–No lo creo, lo sé. -Pone de nuevo sus manos en mi cintura. –Te has dado cuenta que estas locamente enamorada de mí. -Suspira. –Pero solo lo quieres negar, porque aún te sigues culpando, por lo que Mark te hizo.Era cierto lo que decía, así que solo suspire profundamente, mirando el suelo y recordando como esa mujer se vino a colar a esta fiesta.–En este momento, quizás este con ella. -Ahora lo miré realmente preocupada.Quizá
La joven Lisa a pesar de ser la amante de mi esposo, estaba más preocupada por su colección de perfumes caros, así que toma su celular en mano, para poder llamar a la policía. Por otra parte, Mark y Mathew se estaban golpeando con fuerza. Era la primera vez que Mark no actuaba como un marica, respondiéndole a los golpes a su hermano. Pero a pesar de que Mark estaba haciendo el intento, Mathew fue más fuerte y hábil que él, logrando romperle su labio inferior, para después pegarle un puñetazo en su ojo izquierdo, que de inmediato se empezó a tornar de un color oscuro.Las cosas no pintaban muy bien, pero cuando llego la policía, supe de inmediato que esto ya se había arruinado. Lisa de inmediato acuso a Mathew de haberse metido a su casa, sin su consentimiento, mientras que yo aún seguía en shock por lo que decían.Mathew era bastante listo y sabía que no dejaría, que lo llevaran a la cárcel. Así que pidió hablar con el jefe de policía, que venía con varios policías novatos. Mathew de
–Se que es tu casa, pero no debiste ponerte tan cómodo. -Camine hacía la cama, para sentarme a un lado de él.–Estoy hecho una m****a, me caí de un caballo y después tuve una pelea con el idiota de mi hermano. ¿Qué esperabas? -Me pregunta mientras ve como abro la caja, para sacar un poco de algodón y desinfectante. Después mojo el algodón con el líquido desinfectante, para acercarme a su labio, que estaba bastante abierto. Tenía que quitar la sangre seca, mientras que también tuve que limpiar su quijada, que estaba manchada de sangre.Pero a pesar de que quería ser una enfermera profesional, no pude evitar perderme en sus labios regordetes color carmín. Mientras que el hombre mira cada cosa que hago, así que, con su mirada gris, sigue mi mano que le cura con mucho cuidado. Su mirada gris se junta con la mía, en cuanto el algodón se despega de sus labios rojos. Mis mejillas se sonrojan al ver esa mirada tan provocativa, que siempre me muestra cuando me mira solo a mí.Nerviosa aparto m
Después todo el pudor que nos quedaba, se acabó al sentir como pasa su lengua por los labios de mi feminidad, haciéndome reaccionar con un jadeo fuerte. El hombre vuelve a dar un lengüetazo a mi feminidad, logrando hacerme sentir un gran estímulo, que yo misma no estaba preparada para sentir. Pero a pesar de que quería seguir sintiendo sus estímulos, siento que estoy preparada para poder devolverle el favor. Así que tomo su cara con mis manos, para besarlo con pasión, mientras siento diferentes sabores en mi boca.Después le sonreí, para pasar mis labios por su nariz respingada. Mathew de inmediato empieza a demostrar algo que no había notado antes, y aunque ustedes no lo crean, sabía que era amor. Sabía muy bien como era el sentimiento, mientras que mi corazón, me indicaba que estaba sintiendo lo mismo por él. Pero para evitarme el romance, me subo encima de él, mientras Mathew pone sus brazos detrás de su cabeza, admirándome como todo un “play boy”. Yo no puedo evitar sonreír, al v