Jackson Johnson
Sábado por la mañana estaba desayunando en mi ático, mi madre había venido la noche anterior para revisar los últimos detalles del evento, había terminado con un dolor de cabeza que ni la pastilla me lo pudo quitar.
— ¿Quiere más jugo de naranja, señor?—preguntó el ama de llaves.
—Gracias, pero no, me ha causado un poco de acidez, —ella arrugó su ceño—solo un poco de mermelada, por favor. —ella me entregó un frasco y seguí desayunando en la barra, mientras miré como ella siguió ordenando los pendientes del día. Al terminar, me lavé los dientes y pedí el auto a Richard, ya qué quería ultimar los últimos detalles en el salón para esta noche. Estaba ansioso, nervioso y de lo mismo, el estómago revuelt
Lilly Bradley Me miré en el espejo de cuerpo completo que tengo en mi habitación, había ido al salón que estaba a unas cuantas cuadras del edificio y había quedado maravillada por el peinado, me giré de medio perfil para revisar que todo estuviese perfecto, escuché que tocaron la puerta de mi habitación. —Adelante—anuncié sin dejar de mirarme en el reflejo del espejo. — ¿Estás lista? —preguntó Leah, cuando giré mi rostro hacia a ella, me sorprendió. —Estás hermosa. —susurré, era el primer vestido de noche que veía puesto en ella, al igual que a mí, ambas nos habían dejado el cabello muy bien arreglado, ella tenía medio recogido y el resto en ondas perfectas. El vestido largo era verde oscuro, de tirantes delgados y tenía pequeñas pedrerías adornando en forma de cinturón, se veía realmente elegante y hermosa. —Gracias, tú también. —dijo con una gran sonrisa en sus labios. Al salir, esperaba el chófer de Jackson p
Jackson JohnsonVi como la mirada de Georgina se quedó en Lilly, el padre de ella también pareció estar sorprendido por lo que había salido de mi boca.—Felicidades, Jackson. Es una hermosa mujer. —Comenzó a decir el señor Vans, luego miró a Lilly. — ¿Qué negocios tiene tu familia? —entendí lo que estaba haciendo John.— ¿Por qué la curiosidad te ha despertado, John? —arqueé una ceja, él se tensó al igual que Georgina.—Solo es simple curiosidad, tranquilo Jackson. —pero seguía observando con desdén.—Ella es extranjera y…—Lilly apretó mi brazo y sonrió.—Soy inglesa—dijo con una gran sonrisa en sus labios. —Mis padres son doctores y mi única hermana es arquitecta. &ique
Queridos lectores: Quiero pedir disculpas por mi poca actualización esta semana, me he visto en grandes apuros fuera del mundo de la escritura, una de esas, la falta de internet, y los tres capítulos que se actualizaron estos días atrás, fue a través de datos, -por cierto, lentísimos- pero, todo tiene su recompensa, hoy se ha renaudado mi internet, y estoy preparándome para darles muchos capítulos a partir de mañana sábado en ADELANTE, llegaremos al final y a sus capítulos extras de esta historia, llegan dos historias más que pronto verán en mi perfil: "amor inquebrantable" y "Asher: El seductor de la noche" esta última ya la encuentras con sus dos primeros capítulos, a partir del día lunes en adelante se actualizará un capítulo diario. Gracias por sus mensajes en mis redes sociales y mensajería, aquí estoy de vuelta.. ****No te pierdas los adelantos
Lilly BradleyDesvié mi mirada mientras Jackson y Georgina bailaban en la pista, mis dedos aprisionaron un poco de la tela de mi regazo intentando controlar los celos que habían aflorado sin más, Jacob y Leah se fueron a bailar en cuanto llegué yo a la mesa, los padres de Jackson estaban saludando a un grupo de personas que vestían bastante elegante, se veía que eran de sociedad.—Señorita Bradley, ¿Me permite una pieza? —me tensé al escuchar la voz masculina a un lado de mí, levanté la mirada y era el señor Paige.—Gracias, pero prefiero quedarme en la mesa, los tacones me lastiman... —mentí, pero él se dio cuenta, tiró de la silla a mi lado para sentarse, pero mientras lo hacía puso una sonrisa en sus labios, cuando me miró de frente, no pude desviar la mirada en busca de Jackson, pero hab
Georgina Vans—Deberías de mirar hacia a otro lado—susurró mi padre al inclinarse hacia a mí—Llamarás la atención. — Lo miré cuando se enderezó, luego asentí, Isidora hablaba de manera animada con el resto de los invitados de la mesa, yo era la que estaba fuera de todo lo que conversaba, solté un largo suspiro y miré en dirección a una mesa, capté la mirada del hombre y este hizo un movimiento breve en afirmación, respondí disimuladamente de la misma manera. Miré al resto de la mesa.—Me disculpo. —me levanté e Isidora preguntó de inmediato a donde iba.— ¿Necesitas algo, Georgina? —negué.—Solo al servicio. —estaban sirviendo la cena cuando me retiré de la mesa, llegué al área donde este hombre me estaba esperando
Jackson JohnsonEdificio Tower Chippifierld.Dejé un par de besos en la espalda desnuda de Lilly, tenía su rostro de lado, recostado en la almohada. Su cabello estaba suelto y caía de lado. Su mirada estaba fija en algún punto de la mesa de noche. Habíamos llegado a su nuevo departamento, el que yo le había regalado. Aunque aún faltaban muchas cosas, era lo de menos para nosotros en este momento. Al llegar, no dejamos de besarnos, de tocarnos, hasta llegar a estaba habitación e hicimos el amor muy apasionados, dos veces, hasta quedar así, dejando besos en su desnudez.— ¿Tienes hambre? —ella negó lentamente sin mover mucho su cabeza. — ¿Qué piensas? Te veo bastante pensativa.—En nada…solo estoy en la nube de relajación después de nuestros clímax…—apenas
Lilly Bradley Empresas Johnson Había visto pasar al señor Paige en dirección al elevador con carpeta en brazo, noté que estaba nervioso ya que se pasaba su mano por su cabello de manera repetida. ¿Habrá pasado algo? Me concentré en mi trabajo por un rato más, ya había adelantado varios contratos, revisé los detalles de mantenimiento de unas propiedades y las informé al equipo. —Señorita Bradley—levanté la mirada de mi computadora y vi a Jackson debajo del marco de la puerta, no había escuchado al llegar como solía hacerlo. Sonreí pero mi sonrisa se desvaneció al notar su rostro tenso, serio y la mirada cargada de un sentimiento de ¿Molestia? ¿Ira? Me puse de pie de un movimiento y arrugué mi ceño. — ¿Qué pasa? —Me alerté— ¿Ha pasado algo? —él no contestó, entró y cerró la puerta detrás de él. —Siéntate. —ordenó, lo hice mientras él dejó sus manos en el respaldo de la silla frente a mi esc
Jackson Johnson—Eso es lo que me estoy empezando a cuestionar, todo apunta a ti, las cámaras, los tiempos, la cuenta bancaria, entonces me pregunto: ¿Te conozco? —ella abrió sus ojos de par en par, sorprendida a mis palabras.—Dime que no has dicho eso, Jackson. —presioné mis labios con fuerza, necesitaba controlarme, tenía que callar hasta escuchar su versión.—Solo dime por qué tienes una segunda cuenta bancaria fuera del país con treinta millones de dólares. —ella palideció y no dijo nada. —Es la primera vez en años que me abrí a alguien, que le di entrada a mi casa, a mi familia, a mi empresa…—No digas nada más porque lo vas a lamentar y yo no te lo voy a perdonar, Jackson. —su mirada color marrón estaba cargada de ira contenida al mismo tiempo que su labio infer