Tony se sorprendió ante la pregunta de Eliza y titubeó unos segundos. — ¡Oh no, me gustas tu mi bella princesa!— exclamó él— Solo que me encanta bailar como ella, no me digas que estás celosa. — No, es que se veían tan compenetrados bailando que imaginé cosas— dijo ella. — A mi me gustas tu Eliza— dijo Tony— estoy enamorado de ti, y me gustaría que me dieras la oportunidad de salir, que seas mi novia. — Eres tan dulce Tony— dijo ella— también me caes muy bien y ¿por qué no? Acepto salir como novios y allí nos vamos conociendo. Él la atrajo suavemente hacia su cuerpo y la besó con ternura en los labios, Eliza, al inicio se sorprendió un poco con aquella dulce caricia, no se lo esperaba, pero correspondió a lo que Tony demandaba de ella. En ese momento, Harry asomó su cuerpo en la oficina de Eliza, la puerta había quedado entreabierta y él no se preocupó en tocar, así que pudo ver cuando se estaban besando. Un dolor intenso atravesó por su estómago hasta radicarse en su corazó
Se sentía celoso de ver a Marleny con su amigo, y preguntó:—¿Hay alguna razón en especial por la que están acá, o nos están persiguiendo? Harry arrugó el entrecejo al escuchar lo que su amigo preguntaba; ¿acaso notó un dejo de tristeza en la voz de Tony? Respondió:— Estamos celebrando que Marleny y yo nos hicimos novios hoy— dijo Harry. En ese momento se escuchó le voz de la novia de Harry. — Parece que todo lo tenemos que celebrar juntos— dijo ella en tono mordaz. Extrañado por el tono de voz de Marleny, Tony dijo:— ¿Te molesta eso?— preguntó él. Marleny recuperó prontamente su actitud jovial y dijo:— ¡Oh no! Para eso somos muy buenos amigos— respondió en tono alegre, disimulando su incomodidad. A pesar de que todos sonreían por la felicidad, había cierta tensión en el ambiente, pero ninguno de ellos dijo nada más, se dedicaron a brindar y a disfrutar de una cena maravillosa. Después Harry rompió el silencio y dijo:— Debo llevar a mi novia a casa, mañana debemos trabajar
Marleny salió directo hasta la oficina de Eliza, tocó y escuchó la voz de decir que pasara, abrió y directamente fue al grano. — Buenos días, amiga sabes que estuve hablando con Tony y con Harry, para tener la celebración de nuestro noviazgo en el departamento y hacer una fiesta a lo grande, a tu novio le pareció espectacular; ¿Qué te parece a ti?— dijo ella. — No soy muy amante de las fiestas, pero si ya Tony consintió, no me queda más que ir— dijo Eliza. — ¡Entonces no hay problemas, al salir de acá nos arreglamos para encontrarnos con Tony en su departamento— dijo Marleny con entusiasmo. Eliza vió salir a la chica, se veía felíz, al parecer era la única que se sentía entusiasmada por estar de novia con Harry, al final había conquistado el corazón de éste hombre maravilloso. La tristeza quiso invadir su mente y su corazón y sacudió su cabeza, no podía permitir que pensamientos negativos le inundaran, ella había elegido a Tony y debía esforzarse por enamorarse de él. A la hor
Marleny escuchó el sonido de la llamada de Harry y Eliza , se sentía bastante nerviosa por lo sucedido entre ella y Tony, pero se justificaba repitiendo a su cabeza que así era el amor, cuando invade tu mente y el corazón. Respiró profundamente, se miró al espejo que estaba en la entrada y noto que nada se notaba por fuera, en cambio su corazón latía alocado, llevaba una copa de licor en la mano. Abrió y allí estaban ellos con sus sonrisas, Harry le dio un beso en la mejilla al igual que Eliza, quien exclamó al ver toda la hermosa decoración en el departamento. — ¡Wow! ¡Qué bonito Marleny! — dijo Eliza. También Harry elogió el buen gusto de la chica. — ¡Te felicito por el buen gusto!— dijo Harry. — ¡Entren mis amigos!— dijo Tony alegre— ¡Están en su casa! — ¡Gracias Tony!— dijo Harry— ¡Ya veo que empezaron la fiesta sin nosotros! Marleny miró con incomodidad a Tony, este llenó dos copas, una para Harry y otra para Eliza. — Sí, estoy demasiado felíz— dijo él— tenerlos como mis
Le envió un mensaje de texto a Eliza:— «Surgió una emergencia, te llamo mañana»"Ya la llamaría al día siguiente para explicarle" Pensó Harry, pero aquel mensaje de su madre al parecer no era nada de manipulación, realmente necesitaba volver a casa, al parecer su padre lo necesitaba. Leyó nuevamente lo que su madre le decía: "Alexander, tu padre está en la clínica, necesito que vengas, ésto es serio".Mientras iba en un taxi hasta la mansión de sus padres, buscó el número de su madre y le llamó, después de oír sonar el teléfono tres veces, ella contestó. — Hola mamá; ¿qué le sucedió a papá?— dijo Álex preocupado. — ¡Hola hijo, por fin te comunicas! — dijo Evie— a tu padre le dió un infarto hace cuatro días, te he enviado mensajes. — Pensé que eras tú, manipulando para que volviera— dijo Alex— ¿En qué clínica estás? La madre de Alex le indicó cuál era la dirección del lugar, y le pidió al taxista que condujera hasta dónde su madre le había indicado, al llegar pagó y bajó rápidam
— Realmente el me envió un mensaje a medianoche que vi ésta mañana;me dijo que había surgido una emergencia, por eso no creo que sea esa la razón por la que no esté acá hoy— dijo ella. — ¿Una emergencia ?— quiso saber Tony— ¿Qué pudo haber sucedido? — No lo sé, pero algo le debió pasar, la verdad no tengo idea— confesó Eliza. Estuvo todo ese día inquieta, no pudo concentrarse en su trabajo, su mente estaba llena de preguntas pensando. ¿Qué podría haberle sucedido a Harry? Intentó varias veces llamar nuevamente, sin obtener resultados. Ese día Alvin había reaccionado favorablemente, tenía algunos reflejos activos, aunque sólo había abierto los ojos unos instantes y los había vuelto a cerrar, era un progreso, esa tarde, Alexander se reunió con los ejecutivos, poniéndose al tanto de toda la situación que estaba ocurriendo en las empresas. Uno de ellos le dijo:— El día que al señor O'Sullivan le dió el infarto, estuvimos hablando sobre lo que sucede en una de las sucursales en
Samantha se quedó muy quieta con los, ojos muy abiertos y Arnold dijo:— ¿Y si estuviera embarazada,habría algún problema? Simone miro a su esposo y luego a su hija y respondió:— ¿Saliste de casa solo a buscar una barriga?— preguntó indignada. — Mamá, no salí a buscar un bebé, solo que me enamoré de alguien y estuve con esa persona y si no lo mencionas no lo tomó en consideración— dijo Samantha. — Míralo por el lado bueno querida, seremos abuelos— dijo Arnold. — ¡Pero será una madre soltera!— exclamó ella. — ¡Por favor Simone, no seas absurda! Es una época diferente y nuestra hija tiene derecho a organizar su vida— dijo Arnold. — ¡Vaya que vida tan organizada!—— exclamó Simone. — Mamá, si te sientes tan avergonzada, tomaré mis cosas y me iré— dijo Samantha— lo menos que deseo es ocasionar problemas. — Deberías buscar al padre de tu hijo y casarte— sugirió Simone— ¡Basta de sandeces! Samantha se queda y Simone te callas!— gritó Arnold. Las dos mujeres se quedaron muy quieras
Al día siguiente Alexander se dirigió al restaurante de Tony Rizzo, necesitaba saber de Eliza, al llegar se dirigió a las oficinas del restaurante. — ¡Hola Tony! ¿Cómo estás? — saludó Alex. — ¡Mi querido amigo! ¡Cuanto me alegro de verte!— respondió Tony, dándole palmadas en la espalda—¿Dónde te habías metido? — Mi gran amigo, no tienes idea de lo que he vivido en éstos días— respondió Alex. — Tú lo has dicho, hemos estado en ascuas contigo y no tenemos idea de lo que ha sucedido para que hayas desaparecido todo éste tiempo— dijo Tony. Alexander empezó por el relato de cómo esa noche después de salir de la celebración de ellos cuatro, se había ido con Eliza y después de llevarla a casa se enteró de la gravedad de la salud de su padre. — ¿Y por qué no avisaste?— preguntó Tony. La cara de Alexander denotaba preocupación. — Increíblemente esa noche extravíe mi celular en el taxi, perdí los contactos— explicó Alexander. Tony Rizzo se quedó mirando a Alex y dijo:— ¿Entonces tu