Cuando se hablaba de vampiros que se creían más poderosos de lo que eran, Bruce Alatar era el nombre que debía tenerse en cuenta. Con poco más de cien años, llevaba casi diez viviendo en la ciudad.A Bruce parecía no importarle que en la zona, la ley la impusieran los Dracul, su actitud era de macho dominante, actuando a espaldas de Vlad, sin medir realmente las consecuencias. Y aquella mañana, estaba reunido con los ancianos del pueblo y con el alcalde, justo antes de la llegada de Christie.Todo el asunto de la elegida, era el que lo había llevado ahí. Conocía a la familia Sackville y lo que querían lograr con la elegida, lo ponía a él y a muchos, en grave peligro.Los cazadores de almas eran quienes habían sido designados como protectores de la elegida, debido a la profecía que estaba escrita en los libros antiguos.Y el cazador, de la mano con la elegida, derrotará a los demonios y establecerá la paz y el orden.¿Por qué ellos? Solo los cazadores podían custodiar las almas sin que
Luca apareció entonces en su mente, y lo que le dijo la llenó de preocupación. Recordaba lo del sigilo, así que ya no actuaría, en teoría, como un enamorado sino como su protector, por lo que debía hacerle caso.¿Cierto?¿Por qué entonces seguía desconfiando de él?Christie, ha sucedido algo. Es importante que no te acerques al castillo de los Dracul, no del todo.Debo llamar a Gabe.No, hay personas que saben de tu llegada, por eso es importante que no te vean ni cerca del castillo, ni actuando de forma sospechosa. ¿Regreso a mí casa? No, llega al pueblo y busca una casa para vivir, hemos puesto en el banco una inmensa suma de dinero. No puedo aceptarlo. Es el dinero que te corresponde, cada una de las elegidas recibirá la misma cantidad. ¿Qué casa debo de comprar? Lo sabrás cuando la veas. No menciones que me conoces, debes actuar como alguien que quiere vivir aquí, solo eso. Suerte. Después de varios minutos, se detuvo frente a una hermosa casa, el rótulo de la agencia de bi
Aquel hombre se fue sin prestarle atención y ella empezó a conducir hacia el pueblo. Trataría de averiguar quién era. Mientras se alejaba observó más autos llegar a la casa, pero esa vez vio personas con cámaras de fotos. Raro, muy raro. Una vez en el centro de la ciudad decidió dejar el auto cerca del supermercado y caminar, la gente la miraba con recelo. Sin darse cuenta se vio atrapada por una pequeña multitud que se aglomeraba en la acera, para observar una caravana de al menos veinticinco vehículos que avanzaban lentamente. Encabezando semejante desfile estaba el hombre de la casa. ¿Lo más aterrador? Encontró la mirada de Christie entre la multitud y le sonrió con complicidad. A los demás también los rodeaba cierto halo de misterio, infundían temor. Todos aquellos que observaban la caravana murmuraban, pero su misión era otra. Continuó su búsqueda, era prioritario encontrar al alcalde para manifestarle su interés por la casa. Una vez allí, fue sometida a una inmensa tortur
El viaje de regreso estuvo tranquilo, al llegar descubrió que aquellos turistas se habían marchado, podría conocer su nuevo hogar con calma. Cualquiera diría que comprar un lugar tan antiguo y abandonado desde hacía tantos años era una locura, pero debía hacerlo, no tenía muchas opciones. En cuanto al alcalde, este en definitiva era un personaje curioso. Había evitado deliberadamente responder sobre el hombre misterioso al que Luca llamaba criatura. En cuanto a la casa, miedo no sentía, esos fantasmas locales jamás la asustarían tanto como los demonios de sus sueños. Así que estaba tranquila sobre el entrar a su casa y vivir en ella. Para muchos podía parecer que estaba loca, cosa que ella misma sentía a veces pues creía que de verdad podría estar embrujada, pero después de tantas pesadillas y encuentros con criaturas demoníacas, aquellos posibles fantasmas no podían molestarla. El “problema” de lidiar con entes demoniacos era que nada le daba tanto miedo, así que si el mismísim
Después de charlar con Jenkins y buscar algo de comida para aparentar que la necesitaba, regresó a su nuevo hogar. Bajó al sótano e inspeccionó nuevamente los fusibles, pero no se había equivocado, solo quedaba esperar por el electricista. Para sorpresa suya, aquella zona había sido remodelada también. Cielorraso y pisos nuevos, un mueble lleno de jabones para ropa, una lavadora y una secadora.De pronto no estuvo sola, aunque era solamente una voz, sintió miedo.Christie…—¿Quién está ahí?Christie…Miró alrededor esperando ver a su visitante, pero se encontraba sola. Salió tratando de no darle importancia a lo sucedido, quizás era presa del agotamiento. Y las cosas siguieron empeorando, pues el famoso electricista nunca llegó. Y no es que necesitara que arreglara nada, pero si quería que las personas de verdad creyeran que en ella no había nada raro, necesitaba electricidad.Así que decidió buscar ayuda en otro sitio, razón por la cual se vio forzada a ir al pueblo vecino. Por supue
Mientras caminaban intentó obtener algo más de información. Necesitaba distraer al hombre. Christie debía recordar mantener una actitud despreocupada, pero al estar junto a Jenkins se sentía sombría. Llena de ira. Quizás debido a las mentiras sobre la casa, o su miedo ante un posible acoso.Él la observaba de reojo, tratando de descifrar a la joven mujer. Tenía miedo, pero jamás lo admitiría. Los fundadores estaban ansiosos. Ellos tenían poder, de la clase de poder capaz de paralizar a una persona. Esas cosas como demonios eran reales, las había visto y la joven que caminaba a su lado sin saberlo, era quien estaba manteniéndoles a raya. Había sin embargo una situación que necesitaba resolverse o acabaría muerto y no exageraba. Margaret su esposa la quería fuera. Pero debía lograr que dejara a Christie en paz, porque si ella se marchaba del pueblo se vería en graves problemas. Su vida y la de los suyos estaban en manos de Christie. Además, le gustaba, era una mujer guapa, de esas qu
Mientras la estrechaba entre sus brazos, con una urgente necesidad de querer llevársela con él, percibió la presencia de Luca. Y saberlo cerca de Christie y ser consciente de que no había intervenido para protegerla, lo hizo sentir furioso. Eso sin dejar de lado que aunque en menor grado, las emociones de posesividad del cazador, seguían presentes.Ella es mía.Gabe, el sigilo inhibe mis afectos, pero no quiere decir que no piense en ello.Si la amaras de verdad, habrías intervenido. Te lo advierto cazador, si ella resulta herida lo pagarás con tu vida.No pueden verme cerca de ella, lo que tú has hecho es una estupidez, ya que debemos dejarla sola.Tienes poder, sabes que quien ha hecho esto es un humano, detenerlo es fácil. Y si protegerla significa que sepan que es mi compañera, que así sea. Te lo advierto, caminas por una línea muy delgada, y sé que entiendes perfectamente lo que significaría tener a los míos como enemigos.Luca cortó la comunicación de inmediato sabiendo que enfr
De pronto un inmenso lobo blanco apareció frente a ellos y avanzó hasta situarse junto a Christie. Miraba fijamente a Jenkins mientras le rugía causando que este diera un paso atrás, liberándola del feroz agarre al que estuvo sometida. Y aunque su experiencia con un animal así no había sido buena debido a Salomón, en ese momento no sentía miedo ya que ese lobo era su amigo, —ese que era solo una voz en su cabeza—. Lo tenía claro y no sabía cómo podía manifestarse de esa forma, pero la prueba estaba ante ella.Hola, Christie, lamento haber llegado tarde. Si necesito protegerte tomaré posesión de la mente de este lobo.¡Es hermoso!Y es muy noble. Sé que Salomón usaba un lobo para asustarte, pero este que he traído a ti te protegerá. Llámale Custos, que significa el guardián.De acuerdo, es bueno sentir que tengo una especie de perro gigante para que me proteja. Gabriel está muy preocupado y sé que saber que tengo a Custos le dará paz.Gabe estaba conmigo, Christie. Así que sabe del lo