En una hermosa pradera llena de Myosotis, un Ángel de alas negras reposaba junto a las flores violetas. La pradera le brindaba una paz interna que nunca había sentido antes. Sus sentidos estaban embriagados con la serenidad y la suavidad de la brisa. Se sentía familiarizado con el lugar y eso borraba sus inquietudes. El aroma de aquellas flores subyugaba su olfato y sentía una nostálgica esencia en estas. Un aroma que cargaba la esencia de alguien que extrañaba demasiado. Un peso repentino se hizo presente encima de su abdomen y una sombra eclipsó la luz del sol que hace unos segundos brillaba sobre él. Fastidiado, abrió los ojos y se encontró con aquellos ojos celestes y brillantes que amaba más que su propia existencia. Sus labios trazaron una sonrisa inconsciente tras verla encima suyo, con su mirada cargada de amor y su sonrisa llena de alegría y esperanza que tanto destacaba en ella. No pod&iacu
Rainer permanecía estático, sus labios presionaban los de Eve con delicadeza, no sabía si continuar o quedarse quieto, solo sentía la textura de sus labios en esos momentos, nada más. Su mente no hacía más que pensar en ella. Harto de permanecer en esa posición incómoda tuvo el coraje de mover sus labios, experimentando aquella fricción luego de mucho tiempo. Asustado por sí mismo, no pensó que Eve despertaría tan rápido.Eve sentía una sensación que le gustaba, aunque su consciencia estuviera un poco afectada por el sueño. Sabía que esa sensación se la brindaba Rainer, si no era él, ¿quién más? Su mente y corazón sabían que era él, y no le molestaba en absoluto. Disfrutaba recibir su cariño y experimentar las intensas emociones que solo él le generaba. Hasta que sus sentidos fueron
Hace muchos años, cuando Heradise no era más que un espacio inexistente. Una hermosa doncella se posó en aquel vacío. No había materia, no había energía, no había vida. La dama quién poseía unos ojos brillantes como un astro de energía radiante, miraba con mucho entusiasmo algo que todavía no había sido creado. Sus delicadas manos se alzaron con imponencia y brillaron con fuerza. Un extraño fenómeno se reprodujo en ese instante. Una compresión a nivel atómico que se desencadenó como una expansión explosiva y terminó por crear un espacio poblado por grandes masas incandescentes que, con el tiempo perdían energía y se volvían meteoros, planetas o satélites naturales. Un nuevo universo había sido creado a manos de una divinidad que deseaba dar vida a cinco seres capaces de gobernar, capaces de darle forma a su Uni
Al día siguiente. Dante había despertado antes que todos. Una extraña sensación lo invadió y recordó los sueños lúcidos que se volvían frecuentes cuando intentaba dormir. Lo empezaba a preocupar porque cada vez que despertaba, sentía el vacío que una vez sintió cuando Pandora le trató mal antes de su exilio. Era un sentimiento que lo asfixiaba en sus mañanas. Su respiración serena y su mirada perdida lo hacía ver como si estuviera congelado en el tiempo. Revivía todo lo que había pasado en todo el transcurso de su vida.«Me… cuesta creer que mi vida ha dado varios giros inesperados. Por desgracia, de aquellos que sólo empeoran la existencia de uno», pensó, dejando que su espalda volviera a tocar el suelo de aquella pequeña pradera escondida. «Bueno, no puedo dejar que esto me siga afectando. ¡Debo per
El patio trasero acabó sumido en silencio por la repentina irrupción de aquella terrana. Estaban congelados, sin saber qué hacer o cómo actuar ante ese imprevisto, mientras el wendigo se recuperaba del inesperado ataque.Clementine inhaló una larga bocanada de aire por la sorpresa.—¡Por fin te encuentro!—Dante. Has cambiado bastante —dijo Dorian, desenvainando su espada.Clementine trazó runas en el aire e invocó una ráfaga de rayos que atacó al wendigo en distintas partes de su cuerpo. Dorian esgrimió su espada con maestría y lo desmembró junto a Kleit y Nyroh, decapitándolo y cortando sus piernas desde la cadera. Lo habían asesinado gracias a Clementine.—¿Cómo llegaron aquí?—Mm, bueno… —dijo Clementine, intentando organizar sus ideas—. Aquí en Terra; existe
Luego de la plática medio problemática entre sus compañeros. Kleit se alzó con energía y solo dijo dos palabras.—¡A comer!—¿Eh? —dijeron todos en confusión.—¿Mm? Había dicho que los llevaría a cenar a un restaurante donde hacen el mejor estofado que haya probado en ¡mis siglos de vida!—Ah, cierto… —dijo Dante, volteando a ver a sus compañeros quienes seguían tensos por la plática entre Dorian, Clem y Eve.Habían discutido por situaciones del pasado. Eve no confiaba en que Dorian haya podido erradicar su impureza en tres años.“La impureza lleva más que tres años en curarse. ¡No lo creo!”, dijo con seriedad, mientras Rainer se sentía mal. Eve había estado ignorándolo desde que llegó. Pero sabía que lo mejor que pod&
El hechicero se maldecía por dentro tras haber escapado de aquella trampa que había elaborado para Dante. La batalla se había ido de sus manos y eso le enfurecía bastante. Le molestaba saber que tendría que volver a buscarlos y eliminarlos. Era una situación tan exasperante que no podía evitar expresar su completa ira. Sus gritos llenos de odio y desesperación se escucharon redundantes en la habitación oscura y cerrada en la que se encontraba. Sólo una pequeña ventana permitía que la luz de la luna entrara e iluminara un poco su interior. Permitiendo que el rostro pálido y arrepentido del hechicero se reflejara contra su tenue presencia.—Estuve cerca… Pude asesinarlos, pude completar mi misión en un encuentro. ¡Pero me dilaté! Mi juicio me prohibió jugar sucio contra ellos… ¿por qué me es difícil ser maligno? &md
Habían pasado 20 minutos tras la aniquilación inevitable de Ronan y toda su creación. Kaleb se había ido con la confianza de haber acabado con todos los Vitores, pero todavía quedaban dos con vida.Caín corría hacia Victoria. Su maná había quedado en cero tras la defensiva fallida contra el Leviatán que atacó y destruyó Magnolia. Estaba desarmado y su cuerpo tenía heridas casi incontables para él. Pero tenía algo más importante en mente que pensar en qué tan herido estaba. Le importaba saber si todo había salido de acuerdo al plan de su creador. Si todo había salido de acuerdo a lo planeado, debía continuar con lo último que faltaba. Era algo que lo consideraba estúpido y raro. Pero fue la última petición de Ronan que tendría que seguir después de su muerte.“Cuando todo acabe y e
Nyroh caminaba junto a Kleit y Konan. Esperaban que la reunión se llevara a cabo en unos días, pero Konan logró movilizar todo para que la reunión fuera lo antes posible. Ambos miraban con sorpresa a Konan mientras ella con una mirada seria les respondía: El tiempo es corto, no podemos perderlo. No sabemos si en dos días, Kaleb volverá a atacar. Tal vez siguen dos vitores con vida y puedan soñar el futuro, pero no podemos confiar en ello. No más.Nyroh seguía a Konan y Kleit con la mirada perdida, su mente seguía interna en sus dudas. Sentía que no era el momento, pero sabía que no existiría otro momento para hacerlo. Era en ese momento, o nunca. Caminaban por la calle principal de la capital de Gilius, Ephany. Los ángeles veían con sorpresa a Konan y a Kleit. Nyroh pasaba inadvertido por muchos debido a su mirada cabizbaja y sus movimientos neutros. Cruzar