"Joven Amo Harvey, ¿verdad? '¿Se atreve Fane a matarte?' ¿Qué piensas de esta frase ahora, ja?".

Fane sonreía con ironía, mientras añadía: "Podrías haberme devuelto el dinero cuando te lo pedí por primera vez, pero ahora...".

"¡Yo te los daré! Por favor, ¡déjame ir! Te lo ruego".

Rubén se arrodilló ante Fane, rogando por su lamentable vida. Solo se había dado cuenta de lo estúpido que era provocar a un veterano ahora que había experimentado su destreza en carne propia.

"Bien. Te perdonaré la vida. Pero haz una llamada a tu querido padre y pídele que te envíe tres millones ochocientos mil dólares ahora mismo. Tienen que ser tres millones ochocientos mil dólares, ¡ni un centavo menos!".

"Fumaré un cigarrillo. Pero déjame advertirte primero, ¡más vale que no hagas ningún truco sucio! Sería inútil después de todo. ¡Y no querrás que el Clan del Dios Dragón tenga problemas!", añadió Fane en tono relajado. El muslo de Rubén estaba gravemente herido; la sangre salía a montones por la heri