Por AlejoFlorencia se maneja en la casa de los padres de Karla como en su propia casa, ellos la tratan como si fuera su propia hija.Luego de almorzar, mi hermosa rubia preparó el café, lo sirvió la madre Karla, no tenían personal de servicio, pero sí iba una señora para hacer los quehaceres domésticos más pesados, el matrimonio vivía solo.Le mostraron a Sofi la habitación de Karla, en ella había dos camas, en una, muchas veces había dormido mi bella mujercita.Mi pequeña estaba feliz de conocer esa parte de la vida de su madre y de su tía.Por la tarde, temprano, volvimos a casa, Florencia me dijo que en el pueblo estaba Gabriel, su hermano, me preguntó si podía entrar unos minutos a la casa de mis padres.Definitivamente no se enteró que es mi mujer, que pronto vamos a formalizar y que si bien es la casa de mis padres, también es la suya propia.Mis padres van a decidir cambiar el color de alguna pared o colgar un cuadro nuevo, pero, nuestros amigos llegaban a esa casa y se maneja
Por AlejoEsperé que ella abriera la ducha, conté unos segundos y me desnudé, con cuidado de no hacer ruido, me metí al baño, la vi a través de la mampara, su cuerpo es el mismo paraíso y ella no quiere darse por enterada.Nuestro destino tiene que estar unido, lo afirmo cada vez que la miro.Flor giró porque escuchó la puerta, no fui tan silencioso, sin darle oportunidad a que saliera, me metí en la ducha, ella cruzó los brazos sobre sus pechos, pero yo ya no tenía paciencia.-Antes de vos no hay antes, no existen mujeres que merezcan la pena, tus caricias me encienden, tenés luz propia y eso ilumina mi alma, te entregás por amor y yo también me entrego a vos por amor, ni las estrellas te hacen sombra, sos mi rubia hermosa, un diamante perfecto y mi vida entera.Le tomé los brazos y con una mano se los sostenía en su espalda, mientras que me agaché para devorarle el pecho, Florencia temblaba, sé lo que le provocan mis caricias y mis besos, más allá de su inseguridad y su pudor.-Sos
Por Florencia.Alejo y Sergio salieron juntos y tuve una sensación terrible, tuve mucho miedo, porque adiviné a donde iban, no puedo decir nada, porque yo misma tenía ganas de vengarme de alguna manera de mi padre, en su momento solo pude huir y lo hice con terror, mi tía la pasó peor que yo, mi padre y mi abuelo mataron a su bebé, y ella se salvó de milagro.Me pregunté mil veces si ellos eran seres humanos, mi progenitor nunca sintió culpa, porque pretendió hacer lo mismo conmigo.Creo que el detonante para Alejo, fue el secuestro de nuestra hija.Alejo hubiera matado a Marina, si hubiera podido, eso lo entendí.Sofía se convirtió en la luz de los ojos de su padre, apenas supo de su existencia.Nunca imaginé lo protector que era como padre, solo tenía en cuenta lo pedante, lo presumido y vanidoso que era cuándo venía al pueblo, de todos modos yo lo amaba, aunque siempre lo vi como un imposible para mí.No sé si es que maduró o que sucedió, pero sé que por nuestra hija da su vida.Al
Por FlorenciaAl día siguiente, en el juzgado, volvieron a interrogar a Sofi, quisieron rectificar que mi hija las reconoció.No estaba Hugo, pero Karla actuó como mi abogada y se despachó, con altura y criterio, sumándole causas a esas dos porquerías que secuestraron a mi princesa.El día fue movido, porque almorzamos con los padres de mi amiga, luego Gabriel pasó por la casa de mis suegros.A última hora llegó Luciana y por fin se conocieron las primas.Eran idénticas, ellas se reían por su parecido y por suerte congeniaron enseguida.Mi cuñada es muy cariñosa y se brindó conmigo, su marido también es amable, lo conocí el día que secuestraron a mi hija.Esa noche no tenía excusas para alejarme de Alejo, pero estaba muy cansada, no hablo del cansancio físico, no quería saber nada con los juramentos que me hacía el padre de mi hija. Le dije que no quería casarme.Discutimos bastante, en realidad él me juraba que me amaba, que me deseaba, pero había visto a Marina y aunque reconozco q
Por AlejoEsa noche Florencia y Sofía se quedaron a dormir en casa por primera vez.Sofi estaba feliz con su habitación, ella había elegido gran parte de la decoración. Cuándo todos se fueron, estábamos rendidos, pero no iba a dejar de estrenar nuestra habitación.No permití que Florencia diera un paso, apenas entramos, la levanté en andas y caímos sobre la cama.Nuestra entrega fue total.Florencia todavía se siente insegura, pero de a poco está entendiendo que estoy cegado de pasión por ella, que la locura que siento en mi interior cuándo hacemos el amor, solo me la provoca ella.Sé que los recuerdos le hacen mal, voy a trabajar para curar sus heridas.La acaricié, suavemente, deleitándome con su cuerpo, pero el fuego fuecreciendo y la suavidad quedó a un lado.Solo existía nuestra imagen, amándonos.La siento y al estar dentro de ella, el fuego de su vientre es igual al mío.Sus uñas vagan por mi espalda y sus pechos contra el mío me erizan la piel del placer que me provoca, estoy
Por AlejoLa miro y estoy perdido, relámpagos de electricidad viajan por mi cuerpo.La deseo y eso va a ser siempre así, lo sé porque no me sacío nunca.La subo a mis piernas y su centro quedó apoyado sobre mi miembro, yo tenía dentro mío un volcán en erupción.Nos desnudamos en dos segundos y de nuevo me prendí a su pecho, goloso, desesperado, hambriento.Soy su dueño, porque ella también es mi dueña y yo me siento dueño de la luna y del sol, del aire, del viento y del mundo, solo por poseerla.No pasó mucho tiempo cuándo manoteó un preservativo, necesitaba estar dentro de ella.Florencia temblaba con mis embistes y se revolcaba de placer al sentir mi boca en su cuerpo.Los gemidos eran la música de nuestra habitación.-Te amo.Le digo con voz ronca y plagada de deseo.-Te amo.Repite mientras su boca hambrienta, recorre mi cuello hasta encontrarse con mi boca.Dios…se me erizó la piel cuándo sentí su lengua jugando con la mía.Le doy pequeños chirlos en su cola y luego, sin aguanta
Por Florencia No pude evitar ir a la playa, su familia tiene una casa en Punta del Este, en realidad a unas playas de allí, pero el lugar hasta es más exclusivo aún. El primer día estaba tapada con una especie de salida de baño, tipo kimono, de verdad tenía mucho pudor. Cuándo llegaron Walter y Karla, que no se separan por nada del mundo, ella me hizo una seña para que me saque el kimono. Antes de que insista, porque conozco a mi amiga, lo hace porque dice que tengo que lucir lo que tengo y sentirme hermosa, porque según ella, lo soy, me saqué el kimono lentamente y con mucho pudor. También estaba mi cuñada y su marido. Alejo me dice al oído, aunque creo que lo escucharon todos. -Si quisiste crear expectativa para calentarme, lo lograste. -¡Alejo! Le digo avergonzada. Su mirada recorre mi cuerpo y con poco disimulo, se acomodó su entrepierna. Yo era un tomate, muy maduro. Walter lo escuchó o lo vió, no sé, porque se reía a carcajadas. Por suerte las niñas estaban en su mu
Por FlorenciaMis padres no me permitían salir demasiado, pensaban que vivían en el siglo pasado, pero yo siempre me las arreglaba para salir, es que moría por ir a bailar, es verdad que la gente de los lugares a donde me gustaba ir, era un poco mayor que yo, pero varias de mis compañeras de colegio tenían más libertad e iban.Hace muchos años atrás, el lugar en donde vivo con mis padres y mis dos hermanos, era un pueblo, pero en este momento es una ciudad pequeña, en donde todo el mundo se conoce entre sí, al menos dentro de un mismo barrio, pero por eso no deja de ser una ciudad.El tema es que mi alma es más libre que la de mis padres o al menos somos de otra generación.Pretendo seguir una carrera universitaria, para eso me falta un año y medio.Entonces, al tener más herramientas para progresar en la vida, me voy a ganar el respeto de mis progenitores, sobre todo de mi padre.Él alienta a mis hermanos, solo por ser varones, Gabriel tiene 14 años y ya le está enseñando a manejar,