Emma se sintió más nerviosa que nunca , pero hizo acopio de valor y respondió:— Necesito un analgésico, por eso vine a la habitación tuya Meredith, ¿podrías ayudarme?— respondió ella asomando su cabeza— no sabía que estabas con Benja.— ¡Bueno ya lo ves! ¡Estamos ocupados!— dijo Benjamin.Meredith puso una mano en el muslo de su hijo y respondió:— En el baño creo tener unos, ya los traigo.— Gracias, disculpen por interrumpir— dijo ella avergonzada.Benjamín la miró con desprecio y dijo:—¡Tu siempre tan inoportuna mujer inútil! ¡Deberías por lo menos darme un hijo!— No puedo embarazarme si duermes en otra habitación— se atrevió a refutar Emma.— ¡Ah vaya, está valiente hoy mi amada esposa y me ha contestado, necesitas una pasada de mano para aprendas a responder solo cuando se te pida, inútil!— gritó Benjamin.Seguido de ésto se levantó y la tomó por los cabellos haciendo que Emma gritara de dolor y miedo.— ¡Benjamín! — exclamó su madre—¡Suéltala!— ¡No me digas que hacer con mi
Nathaniel Hastings subió nuevamente hasta las habitaciones de su madrastra y hermanastro y nuevamente tocó a sus puertas. Ellos salieron con la altivez dibujada en sus rostros y sus cuerpos y Meredith dijo:— ¿La servidumbre puede bajar nuestras maletas?— Claro, no soy un tirano querida madrastra — dijo Nathaniel —ya les pedí que vinieran.— ¡Oh, olvidamos por completo a Emma— dijo Meredith— déjame llamar a su puerta.— ¡Hazlo!— ordenó Nathan.Ella de inmediato tocó fuertemente la puerta llamando a la esposa de su hijo.— ¡Abre Emma!— exclamó Meredith con voz fuerte.La chica salió con aire de confusión preguntando:— ¿Qué sucede?— ¡Nathaniel Hastings nos ha echado de ésta casa, recoge tus cosas, nos vamos!— dijo Meredith.—¡No! ¡Nathan no me dejes ir con ellos, por favor deja que me quedé!— gritó Emma.Luego se volvió hacia Charlotte que estaba allí de pie sin decir nada.— ¡Charlie dile a Nathan que ellos son malos, me maltratan, no dejes que me lleven por favor! — suplicó Emma ll
— Entonces podría decirse que no estaba en sus cabales, — dijo Nathaniel — a ese punto quería llegar, todos los que estamos acá conocimos a mi padre, era el hombre más metódico que conozco, nunca tomaba decisiones apresuradas, todo lo pensaría muy bien antes de dar su opinión.— Eso es cierto — dijo él viejo Browning— a veces me desesperaba esperar por una decisión suya.— Entonces; ¿Porque hacer un testamento de última hora, él ya había redactado uno, lo recuerdo, apenas se casó con Meredith me lo informó — dijo Nathan— eso es algo con lo que no estoy satisfecho, ¿dónde está el otro testamento? ¿Quién lo destruyó? Además; ¿quienes fueron testigos de esa redacción?— La verdad muchacho estoy a oscuras con eso del testamento anterior, no sé quién los destruyó, y tienes razón, tu padre era un hombre metódico, y con respecto a los testigos,se que una de las empleadas domésticas estaba el día que firmé, no sé cómo se llama — dijo él procurador.— Hay algo que podemos hacer Nathaniel Hast
El doctor Swan abrió los ojos por la sorpresa y preguntó:— ¿Y quién lo autorizó a consultar a tu padre?—Me imagino que Meredith, yo la verdad no estaba muy pendiente de esas cosas papá nunca dió que hacer en materia de salud — dijo Nathan. — Así es, yo era su médico de cabecera y cuando me enteré que había fallecido, me sorprendió, porque yo había acudido semanas antes por una mala digestión, recuerdo que le pedí a la esposa que realizar exámenes porque no me gustó el color cenizo de su piel,— dijo el doctor— pero los dos, tanto tu padre como la esposa dijeron que no me preocupara, que ya estaba mucho mejor, por eso me desentiendo de la situación, tu papá era un hombre muy sano.— ¿Usted dice que ese médico Byrne está dado de baja por parte del colegio de médicos?— quiso corroborar Nathan.— Si, estoy muy seguro de eso, el tiene prohibido ejercer por muchas irregularidades que ha cometido a lo largo de su vida profesional, ¿Estás seguro que estamos hablando del mismo médico?— qu
— Se que ahora no crees en mí, pero un día verás que te amo y deseo envejecer a tu lado y que me des muchos besitos y seas mía todos los días hasta que muera— dijo él.Ella le sonrió y respondió:— Sigue esforzándote, voy a ver a mi bebé.Está conversación se daba en el comedor,ella subió, su bebé estaba dormido a esa hora, pero ella necesitaba salir de la presencia de su esposo, si no iba a terminar claudicando ante sus promesas.Mientras Meredith y Benjamín ya tenían un plan de acción con la informó que tenían de Charlotte Lewis, se dirigieron al edificio donde él tenía su oficina, se acercaron a la chica que estaba allí para recibir a los visitantes y expresaron su deseo de hablar con Austin Wilson.— Señores para tener una conversación con él debe haber una cita previa— dijo la chica con firmeza— y no veo sus nombres en agenda.— Por favor, comuníquese con el y dígale que tiene que ver con su hijo— dijo astutamente Meredith.— Ya le dije que está ocupado señora— insistió la mu
— Disculpa Charlotte, soy una estúpida al decir lo que dije, tú siempre tratando de ayudar y yo mal agradecida, lo siento— dijo Emma. — Está bien, mira allí viene tu comida— dijo Charlie aún confundida. “¿Qué le pasaba a esta a esta chica? Acaso tenía lapsus de locura? Bueno lo mejor era llevarle la corriente para ver qué estaba sucediendo en la cabeza de Emma. ” Estos pensamientos estaban pasando por la mente de Charlotte mientras almorzaba en compañía de la ex novia de Nathan. Después de terminar de almorzar, Charlieinvitó a Emma para conversar. —¿ Por qué decidiste quedarte y abandonar a Benjamín,Emma? — preguntó Charlotte. Emma levantó su rostro hacia ella, porque hasta entonces estaba mirando al piso y respondió:— No quiero que él vuelva a pegarme, a humillarme, esa noche antes lo había decidido y aunque Benjamín golpeo mi puerta para entrar no abrí, me juré que al día siguiente me iría lejos de él, por eso cuando vi la oportunidad de alejarme, quedarme no lo pensé dos vec
— Quiero que imagines nuestra vida juntos amor mío, haré todo lo que esté en mis manos para demostrar cuánto me importa tu bienestar— dijo Nathaniel— ahora vamos a cenar, muero de hambre. Ella sonrió aún con ciertas expectativas, tenía temor de abrir por completo su corazón, pero Nathaniel cada día le demostraba la sinceridad del cariño que sentía por ella, quizás ya se había desentendido de Emma y no estaban juntos nuevamente. Aunque haberla dejado en casa fue un riesgo para su relación de pareja que recién iniciaba, no había visto acercamiento de parte de él para con Emma, eso la tranquilizó un poco. En casa Rosemary estaba sentada descansando un reto después de atender al bebé que iba creciendo a pasos agigantados, ya pronto tendría cuatro meses, se veía muy hermoso el pequeño Jeremiah, así quiso que se llamara Nathaniel y Charlotte no vió la necesidad de negarle ese privilegio. Escuchó que abrían la puerta lentamente y se incorporó alerta para ver de quien se trataba; era la
Un momento después Nathan le dijo:— Veré que puedo hacer por tí, yo te sugiero que vuelvas a tu familia y si de verdad deseas independizarte, estudia una carrera profesional, ya Charlotte empezó. — Gracias por tu consejo Nathan, pensé que te agradaba que viviera acá, pero si, tienes razón, voy a buscar algo que hacer, pensé que lo de ser niñera podría funcionar— dijo ella compungida. — Me extraña tu sugerencia Emma— dijo Charlie— ya Rosemary tiene varias semanas atendiendo al bebé. — La verdad no lo había notado, estaba tan metida en mis problemas, casi no notaba mi entorno— se justificó la chica. — Te entiendo— dijo Charlotte. Nathaniel se levantó y se dirigió a la salida dejando a las dos chicas conversando entre ellas, obviamente que Charlotte aún no se sentía muy amiga de Emma, pero toleraba su presencia por ser empática con la situación que vivió con Benjamín, no toleraba a los hombres abusadores y como mujer sentía que era su deber apoyar a la muchacha. Ese día llegaría