Si te hubiera contado que mi hija es brillante me dirías “por supuesto, como cualquier niño”, luego yo te diría “de verdad es brillante”, y te contaría de sus logros. Entonces tu dirás que la veo con el amor de un padre. Y yo por supuesto coincido contigo, mi amor por mis hijos es infinito, cuando ellos llegaron mi vida se transformó y también la de su madre, Luca por su parte siempre estaba pegado a ella, se parecen mucho, tienen la piel blanca como la crema, pero el rostro de Luca es redondeado como el de un niño, sobre todo cuando sonríe ingenuamente mientras corta todas las flores del jardín para ofrecerle un ramillete a su madre que llora junto al manzano, las acerca a sus pies, ella las ignora.
Hable con mi padre hoy, me regaño por ser imprudente, por supuesto. Ori estaba molesto y Reznor ya estaba dormido, me había acostumbrado a la presencia de Artemisa, que me seguía siempre pero ahora no estaba.No tenia con quien hablar, así que solo me dirigí a la cocina buscando fideos instantáneos. Este lugar era enorme para ser un apartamento, tenia una preciosa terraza enfrente que dejaba ver las luces de la siempre bulliciosa ciudad. Casi como por instinto preparé dos tazones de fideos y caí en cuenta que solo estaba yo.¿De verdad pedirle a la computadora que te cocine es tan horrible también? - me sobresalte al oírlo, realmente me encontraba distraídaSiento que es lo mismo que comer comida congelada. ¿quieres? - le tiendo los fideos con temor a ser rechazadaGracias- tomó los fideos y solo me siguió a la terraza.¿Sigue
Alguien tocaba la puerta. La luz que se filtraba por las ventanas era escasa, por lo que probablemente fuera estaba amaneciendo. En Eón la mayoría de los días estaba nublado, y cuando el sol se filtraba entre las nubes era un sol abrazador e intenso. debido a eso la mayoría de la actividad era o muy temprano o después de las 5 o 6 de la tarde.Me levanté sin comprobar mi aspecto, abrí la puerta de mi habitación y vi a Ori afuera con una sonrisa. Probablemente se reía de mí, llevaba mi pijama de cerditos y el cabello desordenado como siempre.Perdón por despertarte, pero tenemos visita.¿visita? ¿Quién vino?Un amigo de la familia, está subiendo ahora, vamosNo, ¿cómo voy a ir así?, dame un momento para cambiarmeSe supone que dormimos en la misma habitación, difícilmente podría decir
El vestido era color azul intenso, el corte era asimétrico y caía en cascada hacia atrás acentuando sus curvas, las cuales siempre ocultaba con ropas holgadas. Los diminutos cristales salpicaban la tela como pequeñas estrellas perdidas en el cielo nocturno balanceándose al ritmo de sus caderas cuando caminaba. Le habían peinado el cabello con ondas delicadas que llegaban a su cintura, ella se negó en redondo a que la maquillaran demasiado, lo cual fue un acierto, su apariencia ya era encantadora.Las multitudes me incomodaban mucho, generalmente no iba a este tipo de eventos, pero me sentía extrañamente seguro, sabía que iba ante una jauría de reporteros que tratarían de destrozar mi vida privada y socavar la información para llenar un reportaje de chismes en la primera plana del diario matutino. Y lo único que me preocupaba era Evie, que se pusiera ansiosa o molesta con alg&uacu
¿A donde van los que mueren? Todos los días después de la muerte de mi hermano me plantee esa pregunta, aunque la respuesta era siempre la misma: Desaparecen. Cuando su calidez, su risa, sus abrazos se evaporan entonces no queda nada salvo los recuerdos alimentados por lágrimas.Los recuerdos de la noche anterior me inundan, y se entremezclan con las pesadillas que me asediaron durante la noche, el rostro de Luca, las luces del baile. Recuerdo que él me invito a bailar y luego en la pista su rostro se deformo de manera vivida hasta convertirse en Pyron quien sonreía mientras bailábamos al compás de alguna música que yo no alcanzaba a percibir. Una insípida sonrisa se instalo en su rostro mientras me decía al oído “Me recuerdas” para luego hacerme girar y desvanecerse con un exagerado ademan de reverencia y caer sin ninguna gracia al suelo para convertirse en el cuerpo de mi hermano
Son cerca de las 6 de la tarde y empieza a oscurecer, estoy muerta de hambre, y en el taller aun queda una montaña de trabajo, mi padre esta ahora soldando una mano mecánica y Reznor no vino a trabajar hoy. Finalmente me rindo con un suspiro y decido ir a comprar comida.Papá, ¿Quieres algo de comer?Mi papa esta tan ocupado que apenas asiente ligeramente, no quiero interrumpir lo que hace. Hoy fue un buen día y decido podamos darnos un pequeño lujo. A unos 10 minutos de aquí venden la comida china mas deliciosa en todo Eón, bueno eso creo yo, a penas y he visitado algunos lugares cerca de donde vivimos. En lado norte de la ciudad hay un pequeño barrio de clase media, es un lugar bullicioso lleno de comercios en todas las calles, la gente del centro de la ciudad viene aquí a buscar servicios: reparar sus computadoras, adquirir droids de limpieza, reparar sus droids sirvientes, etc.; aquí es donde vivo yo, en el distrito comercial de Eón.Ya es algo
Tres días... ese era el tiempo que llevaba inconsciente. ¿Cómo puede alguien que acaba estar a punto de perder la vida lucir tan prolijo? su negro cabello estaba bien recortado y no había ninguna marca en su piel salvo por el reciente corte ligeramente a la izquierda en su pecho y la horrenda quemadura que se veía roja, definitivamente su camisa había quedado inservible; y su torso quedaba al desnudo dejando ver unos músculos bien formados, no me había percatado antes pero era un tipo alto, probablemente 1.90, y su piel se veía ligeramente bronceada, en su rostro la nariz era recta, fina, como tallada a mano, su rostro anguloso enmarcado por sus pómulos lo hacía lucir como un ángel dormitando; aunque seguramente aun sentía dolor, porque la arruga en su entrecejo arruinaba aquella imagen casi perfecta.Reznor hacia una mueca cada que lo veía, y me decía en broma que s
Me ardía el pecho, y dolía a partes iguales, escuchaba voces entre sueños, pero la oscuridad sobre mí era tan densa que apenas podía pelear con ella. oía risas, discusiones amables, metal caer y una voz dulce como la miel "papá, ¿vas a estar enojado eternamente?", luego más oscuridad....Mis sueños eran oscuros, veía a una mujer sonreír descaradamente mostrándome sus labios color carmín mientras un monstruo me arrancaba las entrañas, destruyendo carne y hueso, rasgando mi corazón, arrancándolo de mi cuerpo, quise detenerlos, pedirles que pararan, la mujer reía más y más fuerte, sabía que el monstruo me mataría si no me levantaba. Luché contra la oscuridad obligando a mi cuerpo a levantarse pese al dolor en mi pecho un grito amenazaba con salir; pero fue tos lo que atacó mi garganta, la luz era escasa pero aun a
- ¿en serio?- ¡si! Quiero arroz frito y unos rollos primavera, anda- ¿Por qué no mandas a uno de tus empleados?, o ve tu- ¿Qué van a pensar de mi si voy a ese lugar?- ¡eres tan molesta!, de acuerdo, ya voy yo; pero mas te vale que esta vez de verdad te comas las cosas-¡Graciasgraciasgracias! Eres mi salvador- dijo ella con voz cantarinaSimplemente la ignoré y me dispuse a satisfacer su deseo. Camino al restaurante me sentía molesto, la ultima vez que la traje casi me arranca la cabeza “Pensé que íbamos a algún lugar importante” dijo ella señalando con una mueca su vestido caro. Era consciente de lo poco elegante o romántico que puede resultar un restaurante de comida china; sin embargo, era un lugar importante para mí. Aquí había compartido muchas comidas con mi madre, quien adoraba el pollo agridulce y