Es un error, sin duda uno muy grande muy desagradable.―Señora Calíope, acabo de ir al segundo piso y terminé de reorganizar todo como nos había indicado,Mary el ama de llaves llego muy animada, todo mientras observaba las dos enormes fotografías que estaban en las escleras.Aquellas que estaba mirando junto a Atlas, hacía unos segundos mientras pensaba que era una completa locura, una muy grande y demente.― ¿Cierto que las escleras es mejor que el pasillo del fondo? Ambos retratos están al Aldo del uno del otro, no puedo creer que sean tan lindos, miren esas expresiones, es como un puchero.Una pequeña risita vino de parte de Atlas, mientras que yo solo apreté mis labios en una línea recta, observé al niño vestido de marinero en una enorme silla.Mientras sonreía con una elegancia digna de admirar, su cabello rubio peinado de lado, y sus ojos azules llenos de vida.Mientras que sus mejillas estaban sonrojadas y parecía mostrar una pequeña sonrisa, era un niño hermoso, uno que rogab
Esto es molesto, no imagine que Elrod vendría tan pronto, pero esto será divertido, observe al hombre en el suelo y levante una ceja.Esperaba que le saltará a los pies de su señora, hablaba de la familia Elrod, como si fuesen dioses, por lo que estaba segura de que buscaría auxilio en uno de ellos.Pero no, el hombre lo obsérvelo tenso, lo observaba como si fuese no más que un pobre niño descubierto por su padre.Sin duda alguna demostrando que su lealtad no era con Elrod, no su lealtad era con la madre de Elrod, con el padre de este.Y estaba más que segura de que, cuando se trataba de darle información a estos, se los haría saber explícitamente a la madre de Elrod.Pues este había reaccionado justamente ante la mención de su nombre, por lo que me pregunta ¿Si presionó un poco más? ¿No sé cómo si dio lo que quiero?Mostré una pequeña sonrisa, mientras la mirada de Landleli estaba fija en el Eris, al parecer esperando cualquier momento para atacarlo y asesinarlo a golpes.―Ocurre que
―Mi señor, mi señor…―cállate, no quiero hacerte nada malo, estoy a punto de hacerte mucho daño, así que cállate…Mi voz se fue haciendo una octava más baja, en lo que el teniente Brian quien estaba a mi lado apretó sus labios en una línea recta.Como si le acabara de decir algo a él, y no al bastardo que tenía a mi lado, aquel que hasta ahora me enteraba de que le había estado dando drogas a Calíope en busca de que abortaraEstaba tan enojado, tan frustrado que solo podía pensar en el hecho sé que estaba a punto de asesinar alguien.―Mi señor…― ¿Por qué no te callas de una buena vez? ¿No te das cuenta de que estás a punto de ser hombre muerto si no te callas? ¿Quieres morir? Porque yo no quiero morir y estamos a esto…Él mostró sus dedos y pareció mostrar una pulgada, mientras que yo, aunque no quisiera herirlo, no pude evitar mostrar una pequeña mueca.Antes las tonterías del teniente Brian.―De morir ¿Eso es lo que quieres? ¿Eh? ¿Es eso? Tonto imbécil, ¿Cómo te atreves atacar a mi
―Oh dioses, podemos ver que la pareja al bailar se mueve como si fueran un solo cuerpo, eso significa ¿Qué debes tener esa conexión con tu pareja?La voz de la señora valencia se escuchó, aquella que tenía su brazo invicto en el mío, mientras observaba hacia la pista de baileJustamente donde uno de los cabos bailaba con su novia, aquella chica que había sido la comidilla de todo el lugar.Todo debido la echo de que esta era una mujer americana, que había venido solo de visita y al parecer había ganado por completo el corazón del cabo.Incluso las damas se habían mostrado un poco escandalizadas, algo que no le di mucha importancia mientras que ella parecía notarlo claramente.―No es la gran cosa…La imagen de noche junto a Elrod había venido a mi cabeza, aquella en la que solía buscarlo cada noche en busca de sus caricias, besos y mucho más.Digamos que Elrod estaba enojado, por lo menos lo estuvo los primeros días, ya después de un mes, se ha calmado un poco, Aunque no negaré que me
Eso debió ser suficiente, observe como Emiliano se marchaba con la mandíbula, apretaba, demostrando sin lugar a duda que estaba más que molesto.Mientras que yo, estaba tan divertida con la situación, que solo pude hacer un gran intento en no reír a carcajadas como una maldita maniática.Todo en lo que observaba como Emiliano perfectamente corría hacia ellos, esto podría haber sido divertido de ver.De no ser porque ahora mismo, podía hacer más, solo debía confiar en que ellos tendrían un muy mal día, o posiblemente una carrera arruinada.De todos modos, si este no informa o hace algo sobre lo que dije, estaría violando la ley militar―Señora Elrod…Observe a dos hermosos militares, estos eran al parecer de la academia, uno de ellos tenía las mejillas completamente sonrojadas.Mientras lo alejaba ni por un segundo la mirada de mí, mientras que el otro el chico más animado, hablo lleno de entusiasmo hacia mí.―Por favor perdone nuestra pésima manera de interceptarla, pero mi amigo solo
¿Te amo? ¿Cuándo aquellas palabras habían salido de mi boca? ¿Lo hice? Y no lo recordaba, fue entonces cuando logré estar un poco más estable.Observe al teniente, aquel que seguía allí, solo observándonos, un poco incómodo, mientras podía notar que no sabía cómo abarcar la situación entre nosotros.― ¿No es así teniente? Solo estaba echando los cumplidos que decía de mi esposo…El hombre tan rojo como un tomate hablo afanado, mientras Elrod, solo me observaba fijamente a mí.―Por supuesto, el capitán es la perfección en persona, no solo para las mujeres, es…― ¿Crees que ese tipo dé respuesta ayudaría ¡maldito iglesias…? ¿Pero siempre serás un bastardo, hasta que puede que seas otra cosa…?―Pero mi nombre es Emiliano costas…El pobre chico parecía derrotado, mientras que yo no podría creer que este hombre fuese del tipo que amedrentaba a sus hombres.Sin duda me confunde de don, deviene tan irritación, cuando al final de cuentas Elrod, era un obstinado increíble con sus subordinados.
―Me estoy volviendo loco Calíope, un completo demente, solo dime ¿Qué debo hacer ahora mismo? ¿Qué debo hacer para poder ser un hombre normal? Uno que logre estar cerca de ti, sin sentir esto que siento.Él empujó más hacia mí y yo gemí un poco mientras él parecía que aquello, solo había sido una invitación para qué continuará―No lo sé, tal vez debas comportarte como un hombre normal…Dije esto en medio de pequeños jadeos, mientras que él solo sonrió un poco divertido por mis palabras, mientras parecía que no sabía, tendió diferencia de mí―Es imposible comportarse como un hombre normal, cuando tienes una mujer como la que tengo, es imposible simplemente ser un alguien que piense con tranquilidad, caudino tú eres aquella que lo me enloquece de principio a fin…―Calix… Ah…―Si mi amada, Calíope, Calix… Justamente tu esposo, el hombre que está jodidamente loco por ti, eso soy precisamente yo…Él estaba encima de mí, su pequeño gemido se entrelazó con los míos, mientras empujaba más y m
Calix ― ¿Estás diciendo que ella, aunque esta estable debemos estar más alerta?―Solo digo que es de cuidado, después de todo, debes tener en cuenta que está en sus últimas semanas de embarazo, aparte de ahora ella puede tener un parto en cualquier momento.―Creía que solo tenía veintisiete semanas de embarazo, ¿Qué nuestro hijo no está muy pequeño para nacer?―los hijos nacen cando ya estén listo, algunos no esperan él clicó completo, puede incluso nacer desde ahora, desde lo siete meses, son el último ciclo de embarazo y debemos estar más la pendiente…Asintió a las palabras del doctor, mientras este me observaba fijamente, como si esperaba una repuesta de mi parteUna que no sabía cómo darle, pues era más que claro que para tomarla tenía que hablarlo con Calíope y no sabía muy bien, como era que esta aceptaría sin poder excusasO siquiera molestarse conmigo por intentar manipular nuestra vida, pues esta era una mujer que no me asustaba que interfieran en su vida―entiendo por qué