ES UN NIÑO

El dolor seguía intensificándose, sin duda alguna manera mi hijo estaba a punto de nacer, no había tiempo, o lo tenía hora mismo o nunca lo iba a tener.

Mis ojos se llenaron de lágrimas y el miedo me agobio por completo, porque tan pronto como llegó justo cando no era el momento, no ahora.

Elrod, ¿Dónde estás? ¿Por qué no estás aquí? No puede seguir esperándote, no puedo seguir de esta manera, no cuando todo está saliéndose de mis manos.

Nuestro hijo, él no podrá soportar más, él se acerca y yo no tengo más opción, di fuerte un suspiro, Helena, quien estaba cerca de la ventana como le había indicado.

Me observo con preocupación, pero entonces noté que su mirada temerosa, cambio un poco, ella caminó hacia mi llena de preocupación y tomo mi mano con fuerza.

Estábamos en estos instantes, no sabíamos que hacer, pero no teníamos más opciones, por lo que ahora se podría decirse que teníamos la vida de ambas en nuestras manos.

Con la diferencia de que ella ahora no solo tenía la mía, también
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP