Samara se mira al espejo, comprobando que su vestido estuviera bien. La hora de la fiesta había llegado, Lucca se había ido para saber si todo estaba listo con el chofer, hoy no conducirían ninguno de los dos. Al levantar la mirada, se encuentra con el hombre recargado sobre el umbral, mirándola. Samara tenía que admitir que en su ropa deportiva se veía sensual, pero dentro de un traje, las cosas se ponían de otra manera. —Estás hermosa —le dice él mientras mantiene los brazos cruzados, sin atreverse a caminar hacia ella El vestido rosa brillante había sido una buena elección, sin dudas atrapaba las partes que debía y dejaba relucir su barriga, la cual ya no se disimulaba. Samara había decidido que le gustaba verse así, aunque dudaba que volviera a estar embarazada alguna vez. —Tu deberías acomodarte eso —dice mientras camina hacia élv, igual te ves guapo. Lucca mantiene su boca cerrada cuando ella queda tan cerca de su rostro. La idea de que ella estuviera a solo unos centímetros
Si había algo que podía coronar a la noche como una completa mierda, era la presencia de Zyan allí. Aún no sabía cómo diablos había dado con el lugar exacto en donde estaría esa noche, pero estaba segura de que en algún momento tenía que resolver toda la mierda junta.Estaba claro que sus nervios estaban disparados, pero no le demostraría todo lo que causaba, ya demasiado había tenido que pasar para que él se diera el lujo de burlarse.—Por favor, habla conmigo —le dice él mientras se acerca—. Hemos estado huyendo por mucho tiempo, no te vuelvas a ir.Ante sus palabras, los ojos de Samara se elevan hacia los suyos, como si pudiera apuñalarlo con sus pupilas. Pensaba que no podía ser más hipócrita, él parecía que nunca iba a hacerse cargo de toda la mierda.—¿Qué dices? —pregunta ella, mientras aprieta los dientes—Estoy diciendo que se acabó, que no hace falta pelear más. Sé que todo esto fue una mierda, y que probablemente fueron los meses más difíciles para ambos, pero podemos soluc
La mirada de Zyan podía asesinarlo ahora mismo, pero él sabía que tenía razón. Tenía que admitir que algo se removió dentro de él cuando Samara lo apuntó, esto no se lo hubiera esperado nunca. Ni siquiera recordaba alguna vez que se haya atrevido a defenderlo a él de una situación similar.—Vas a arrepentirte —le advierta a Lucca—No, no lo haré. Y si no quieres que llame a seguridad, es mejor que te vayas ahora.—Esto es una locura —es lo que dice antes de salir de allí.Samara deja salir el aire contenido y baja el arma cuando el hombre sale de aquel lugar. Lucca cierra los ojos por un momento mientras que piensa en lo que acababa de suceder. Ninguno de los dos pudo decir mucho, porque en el momento que Samara escuchó pasos y tuvo intenciones de levantar el arma de nuevo, los padres de Lucca se hicieron presentes.—¿Qué están haciendo en este lugar? —dice Ismael con una sonrisa—. La subasta comenzará en un momento. ¿Por qué no vienen con nosotros?—¿Hay algún problema? —pregunta su
Pov Samara Mientras me remuevo en la cama, siento las suaves sábanas sobre mi cuerpo desnudo. Eso me hace sonreír, no me sentía de esta manera desde hace mucho tiempo. Definitivamente no me arrepiento del sexo, ni de darle esa case de confianza a él, pero me intriga como seguirá todo esto. Va más allá de cualquier cosa que tuvimos, él incluso se comportó diferente a lo que creí que sería,me invitó a dormir a su cuarto. Mientras intento abrir mis ojos, siento su mano caliente en mi barriga mientras me abraza por detrás, así que no sé como debería actuar ahora mismo. He tenido relaciones casuales con un puñado de hombres en la universidad, pero francamente jamás lo hice con el padre de mis hijos, el cual ni siquiera tengo relación alguna. ¿Entonces qué es lo que sigue? Maldigo en voz baja por lo bien que se siente estar recostada en su cama, pero necesito largarme de allí. Por lo que me levanto con lentitud, tratando de no hacer demasiado fuerza y tomo una larga bocanada de aire. —
Samara sintió que podía ser libre de hablar realmente con alguien sobre sus sentimientos, incluso si esa persona fuera la hermana del involucrado. Jena se comportó muy abierta con sus pensamientos al respecto, le dio bueno consejos para que lo pensara, pero sabía que la desconfianza no se iba con tanta rapidez.Había muchas preguntas que ella se hacía de todo esto?¿Qué sucedía si ella lo amaba y le entregaba el único control que tenía sobre ella?Samara quiso a Zyan, pero quizás no de la manera que comenzaba a sentir que lo quería a este hombre. Esto era diferente. De Zyan le había atraído su poder, le resultaba sexy y encantador, el hombre le había dado seguridad cuando se quedó sin nada, e incluso en un momento pensó que podía prosperar.¿Entonces qué era lo que sentía por Lucca?Todo parecía fácil y encantador, él era un buen hombre que se preocupaba por ella, pero también tenía cosas que lo hacían dudar. Odiaba el hecho de que se sintiera vulnerable en su presencia e incluso que
Había demasiadas cosas para resolver en su vida, y Samara lo sabía. No podía seguir escapando de su pasado, ni de su familia, en algún momento debía enfrentarse a ello aunque sea para terminar de cortar los lazos.No quería seguir cargando con el peso de saber que no era aceptada por sus padres. Zyan ya no estaba en el medio, y ella había dejado de ser gran parte de la imbécil que solía ser, así que quizás podría funcionar.¿Por qué todo tenía que ser tan dramático?Cerrando los ojos y dejando que todo su cuerpo se sumerja en la tina del baño, piensa en la posibilidad de decirle que si, que podían tomar aunque sea un café. Hacía años no veía a su madre, pensaba que hasta había olvidado el sonido de su voz, y eso era triste.Infla su pecho en una profunda inhalación cuando siente un beso en su frente. Había sido tan inesperado que casi se sienta desesperada si no se hubiera encontrado con aquella risa baja de Lucca.—¿Te habías quedado dormida? —ella se queja por lo bajo y lo mira—No,
Zyan no era una persona con demasiados escrúpulos, y Georgina no es alguien que sienta realmente culpa, y eso los complementaba. Ninguno de los dos había soportado sentir un pequeño porcentaje de humillación, a pesar de que fueron realmente los culpables de las rupturas amorosas con sus ex parejas. Lo único que necesitaban es tener la razón al final del día, y Zyan supo que ella era capaz de llegar tan lejos como él cuando un brillo extraño se situó en su mirada al escuchar sus opciones.—En mi opinión, no es un matrimonio real, pero algo vi en ellos dos. Algo que no me gustó para nada.—Sexo. Puede que ellos estén manteniendo una relación sexual ahora mismo, pero dudo que se hayan enamorado —asegura ella—Samara es una mujer demasiado sentimental, no descarto que falte poco tiempo para que eso suceda.—Bueno, pero nos conviene. ¿No es mejor que ellos se quieran en algún punto para que sufran más?—Si, pero hay algo inevitable. El embarazo.—Ciertamente no estoy dispuesta a matar a un
Jude Daft sabía que tan decida era su hija, si la dejaba irse con aquella imagen sobre ella, entonces no volvería a tener otra oportunidad de verla. Existía una mínima posibilidad en ella que pensara que la mujer no era capaz de ver el otro lado que tenía su esposo, pero tratándola de aquella manera solo la alejaría, por lo que tendría ua buena charla con Marc sobre regresarla a casa antes de qu sea demasiado tarde.Quizás la familia Birdwhistle no tenía nada que ver a los asuntos con los que Zyan Crusoe se relacionaba, pero estaba claro que no le gustaba que ellos se fusionaran ahora mismo. La guerra fría entre Margot y su esposo venía desde hace tiempo.—No te vayas, por favor. Siéntate hija, al menos permíteme que pueda cambiar de opinión al respecto. Estoy dispuesta a hacerlo si eso permite que te quedes.Samara frunce el ceño por un momento, observando a su madre. Pocas veces en su vida la había visto bajar la guardia, pero tampoco era momento para ser tan pretenciosa con el asu