CAPÍTULO 34Mark volvió a la especie de cuartel general de la banda.—Mark—Cash se levantó de la mesa del comedor en donde estaba con su grupo de amigos tras ver como su amigo cruzaba la puerta del comedor privado, furioso—¿Qué haces aquí?—¿Luz está aquí? —les preguntó a todos, acelera y se enteró de que la protagonista femenina estaba detenida en el calabozo. Entonces, supo que su tío había ordenado a alguien que secuestrara a la protagonista femenina.Los hombres y mujeres que trabajan para Hardi se miran entre ellos. Todos tienen un uniforme oscuro, pero Mark sabe diferenciar sus nombres.—Creo que deberías ir a ver a tu tio, Mark. Nosotros no nos meteremos en ese juego—le dijo uno de los hombres de su tio, poniéndose de pie tras empujar un poco su comida hacia atrás sobre la mesa.Mark supo con esa respuesta que la tenían en el edificio.—¡Mark! —le gritó Cash, pero ya era tarde porque su amigo ya se había cruzado las puertas del comedor.Tras subir al ultimo piso, Mark tenia la
CAPÍTULO 35Mark no podía hacerlo. No podía asesinar a Luz. Y es por eso por lo que tomó una drástica decisión que iba contra las leyes de Hardi: desobedecerlo a través de una mentira:—Lo haré a mi manera si quieres que la asesine. No quiero que muera tan fácil. —le mintió a su tío diciendo que no quería que la protagonista femenina muriera tan fácilmente y que quería que sufriera.Ambos se dirigieron al galpón en donde estaba Luz y la joven levantó la cabeza tras ver que la puerta se abrió y vio que ambos se hicieron presentes ante ella.—Mark—la voz y los ojos de la Luz reflejaron miedo, agotamiento y todo lo que un ser humano no debe pasar: desesperanza.Mark apretó los labios, con tanta fuerza que se resistió para no—¿Estás seguro qué quieres hacerlo a tu manera? —Hardi desenfunda su arma y los ojos de ella se abren muchísimo.—¡Mark! ¿Qué está pasando? —gritó Luz, buscando su atención y así intentar persuadirlo.—Lo voy a dejar en tus manos, sobrino—le da una palmada en el homb
CAPÍTULO 36 (37)Nick regresó a informar luego de ver que Luz seguía viva. Cabe mencionar que cuando vio que estaba a salvo sabiendo su triste final, agradeció a Dios que siguiera viva.Jamás se esperó que Hardi diera esa orden ni tampoco le dijo por qué decidió ese trágico destino para ella y no otro.Pero no podía contradecir al jefe porque lo tenia atado de manos a él también. La madre de Nick corría peligro porque Hardi sabia todo sobre ella y si él hacia algo en falso, la mataria.—Está muerta—fue lo primero que Nick dijo tras ingresar a la oficina de Hardi.Él hombre estaba contando fajos de billetes encima de su escritorio por lo que cuando levantó la vista, sonrió, satisfecho.—¿Qué tan seguro estás, doctor? —le pregunto, usando su profesión de manera despectiva.—Lo estoy señor, la tiraron en el rio dentro de una bolsa y los hombres de Mark junto a este se fueron en cuanto procuraron que nadie los haya visto—le explicó Nick, sin titubear en ningún momento—. Era en medio del b
CAPÍTULO 37 Mark y su tío compartieron una charla antes de volver cada uno a su auto. El tío sospechaba que él sabía algo, porque se lo veía demasiado callado, más de lo normal.Pensando en lo que había escuchado, Mark sintió que la relación entre su padre y su tío no era como él pensaba, que las cosas eran más oscuras y turbulentas. Así que tomó como tarea pendiente investigarlo en secreto.***La noche anterior, Mark y Luz llegaron a la cabaña en plena noche. El cantar de los gritos y el sonido del silencio les susurró que ambos estaban seguros…al menos por ahora.Mark tomó de la mano a Luz en un instinto inusual en él y ella se lo quedó viendo, extrañada. Ninguno de los dos dijo nada, mientras esperaban a que uno de los hombres de Mark abriera la puerta de la cabaña con un arma en la mano para ver si era seguro y no hubiera nadie dentro.—Despejado, señor—le dijo el hombre, tras salir de la casa y ya con las luces del interior encendida.Ambos soltaron el aire que estaban contenie
CAPÍTULO 38“La protagonista femenina volvió al orfanato. Había estado en contacto con el personal del orfanato hace ya tiempo y no le resultó extraño buscar refugio allí. Podían cuidarse mutuamente, y con ellos, ella no se sentiría sola”.—¿Luz? —la señora que la atiende entrecierra los ojos a través de sus anteojos. Los abre grandes cuando la reconoce—¡Mi Luz! —la mujer no tarda en abalanzarse sobre ella para abrazarla con fuerza.Tras sentir ese abrazo, Luz respiró. Respiró sin miedo, sin que sea el ultimo aliento. Simplemente lo hizo, aliviada, porque después de tanto tiempo, había llegado a su casa. Su hogar.—¿Puedo quedarme aquí por un tiempo, tia Maria? —le preguntó Luz, con miedo a que sea rechazada.Maria se apartó de aquel abrazo con suavidad para verle la cara. La chica tenia un aspecto cansado, el cabello descuidado y unas manchas grises por debajo de sus ojos que llamaba ojeras.No era la misma Luz que se había ido para triunfar. Algo no andaba bien y lo supo con tan sol
CAPÍTULO 39 (40)Un mes.Un mes sin Mark y su vigilancia, y aun así me sentía peor de lo que me encontraba hace un tiempo atrás. La panza aún no se notaba, no iba a crecer de golpe y eso lo sabía, pero sí se notaba mi malestar, mis nauseas, dolor en el cuerpo y mi rostro chupado porque la criatura que estaba creciendo en mi vientre se estaba ocupando de succionar mi vitalidad y todo lo positivo en mí.Si esto hubiera ocurrido mientras yo ejercía en la medicina, con mi sueldo y el acompañamiento de mi ginecóloga y alguna obstetra, seria un embarazo sin soledad.Sin embargo, ahora tenia que llevarlo sola porque si pisaba la calle, puede que intenten matarme otra vez.Lo bueno de esto, es que Mark respetó mi espacio y no insistió en querer cuidarme. Sin embargo, me sentía vigilada.Yo sospechaba que era Mark, pero no estaba segura. Quizás fue la sensación de tenerlo todos los días conmigo y que de golpe ya no esté.Sabia que tarde o temprano también debía irme del orfanato porque tampoco
LUZ MARTIN.Llegué a una gasolinera con las piernas temblando y deseando que las cosas mejoren un poco. Tenía suficiente dinero para alimentarme y poder vivir en un hotel hasta no tener otra opción y tomar un autobús a cualquier otro sitio fuera de esta ciudad que no paraba de recordarme mi identidad.A partir de ahora me llamaría Elizabeth hasta que pueda volver a mi vida normal. Porque deseaba que eso al menos se cumpliera y pensaba que eso seria momentáneo hasta que Hardi se olvidara por completo de mi existencia.Tras llegar a la gasolinera, entré al almacén que estaba abierto la 24hs, o al menos eso decía el cartel luminoso de neón rojo que cambiaba a verde y luego a azul.La chica que atendía el puesto me preparó un té con leche y un sándwich para acallar el hambre.—¿Puedo pasar la noche en la silla de mi mesa? —le pregunté, avergonzada.Me miró de mala manera y no me quedó otra que llevarme una mano al vientre para darle el indicio de que estaba embarazada.—Sí, pero si se ata
CAPÍTULO 41“Luz sintió lástima por lo que había pasado su compañero. Lo consoló pero dijo claramente que aunque podía entender su comportamiento, no lo perdonaría. Luz se dispuso a marcharse y le dijo a su compañero que quería alejarse de todas las bandas. Esperaba que su compañero no la siguiera más. El compañero aceptó”.La doctora soñó con eso toda la noche por lo que le fue imposible conciliar el sueño. Lo único que deseaba era encontrar la paz algun día ella también mientras acariciaba su vientre.***Mark y Nick se reunieron en un café que estaba prácticamente a las afueras de la ciudad. Cuando Nick estacionó frente al café, supo que era mala idea seguir en contacto con el sobrino del tipo que lo chantajeó toda la vida con la vida de su madre.Ni siquiera sabia por qué estaba allí, supuso que no le quedaba opción saber qué era lo que deseaba Mark.Después de regresar, el colega fue a contarle a Mark la verdad. Envió el correo electrónico y Hardi le ordenó que le mostrara delibe