—El día que cumpla su primer mes.“Perfecto allí estaré”, se despidieron y enseguida llamaron a la futura madrina, sería su prima Renella, ella era perfecta para eso.—¿Estás de acuerdo mi amor? —Stefano sonrió ante la pregunta de su esposa, porque era una pregunta con trampa.—Si mi amor, como tú d
—Claro que no mi amor, no pasa nada malo, todo es perfecto, me puse melancólico, recordando mi niñez, lo solo que me sentía cuando era un niño, deseaba jugar con otros chicos de mi edad, pero a veces los niños puedes ser muy crueles, me decían que mi mamá no me quiso por eso no tenía.—Quizás era lo
Sandra no podía contener su emoción, después de haber estado una temporada fuera regresaba a las pistas, eso no hubiera sido posible si su abuelo, su padre y su esposo, no hubieran hecho lo posible porque ella pudiera entrar y estar allí, pero ya no sería como Santos Ferrer, sino como ella como Sand
Sandra corría disparada como una flecha, recorriendo la pista como si eso fuera lo más fácil que había hecho en la vida. Los gritos y los aplausos no paraban, todos estaban impresionados por lo que veían. Era como si ella irradiara energía, su presencia era innegable y todos estaban emocionados por
Matrimonio Pactado SinopsisKarl Hamilton era un chico orgulloso, creído, que como ha crecido obteniendo todo lo que desea, cree que no hay nada que no pueda obtener hasta que conoce a Brenda del Pino, una chica rebelde, alocada, divertida y aventurera, acostumbrada a su libertad, se enamoró de man
Después de un recorrido de treinta minutos llegó a la fiesta, andaba más molesto que nunca, porque la chica que había invitado a acompañarlo a la fiesta, cuando estaba bajando por las escaleras, se resbaló, se cayó y se lastimó un pie, por eso llegó tarde y en ese momento estaba entrando solo a la f
La gente comenzó a moverse frenéticamente, algunos para socorrer al hombre, otros para buscar a un médico, otros para curiosear e incluso ver a Brenda más de cerca, distintas personas gritaban en la confusión. Entretanto, la joven terminó lanzándose encima de su padre, llamándolo con desesperación.
—Ese es dinero de tus padres, no tuyo, tú no te lo has ganado —debatió el hombre.—También tengo mis propias inversiones, no me interesa… —de nuevo Genaro lo interrumpió.—Mira muchacho, la plata nunca está de más, así que no te vengas a hacer el desinteresado conmigo —expresó con seriedad.—No esto