Ambos sabían que tendrían que pasar por obstáculos y pruebas en el futuro, pero estaba convencido de que podrían superarlas juntos, ya fuera con apoyo mutuo o con la ayuda de sus familias. Después de ese día, las cosas fueron mejorando poco a poco entre ellos, aunque Sandro notaba que Carlotta segu
La mujer se dio cuenta de que había caído en una trampa e intentó salir airosa. —Yo solo quería bromear con Sandro… nosotros somos muy buenos amigos y tenemos una forma particular de llevarnos —sonrió tratando de apaciguar la molestia que había provocado su falsa acusación—. ¿Apuesto que no tenías
Él más orgulloso era Taddeo.—¡Ese es mi muchacho! —exclamaba emocionado en cada vuelta que daba Sandro, una vuelta tan rápida que terminaba rompiendo el récord de la vuelta más rápida que el mismo había ostentado por años.Fueron sesenta y una vueltas llenas de Adrenalina, emoción y bromas, pero su
Carlotta se acercó a su esposo y enseguida los periodistas comenzaron a fotografiar a la hermosa pareja con su hija, incluso le pidieron a Sandro hacerle una entrevista y él accedió. Después de hacerle unas preguntas sobre su vida laboral, las respondió con toda a disposición del mundo, luego le pre
Hablaron un rato y se despidieron… cuando lo hicieron, de inmediato recibieron una llamada de los padres de Sandro, Mike y su novia… los dos se quedaron sorprendidos al ver la pareja de su hermano, mas un gesto de la chica invitó al silencio, mientras cargaba a un bebé, de la misma edad que Sandra.
Viajaron a al Gran Premio de Japón y como ocurrió en la última carrera, Sandro Hamilton se impuso, fue el primero en llegar a la meta, con una diferencia bastante amplia respecto al piloto que llegó de segundo. De nuevo se llevó a la pequeña Sandra a recibir el premio con él en el pódium, sin embar
Carlotta no podía creer el descaro de ese hombre, ¿Cómo se atrevía a presentarse a su casa como si nada hubiera pasado entre ellos? Massimo se giró hacia ella. —Carlotta, por favor, necesito hablar contigo… estuve reflexionando y quiero pedirte perdón por cómo me comporté en el pasado, fui un inmad
Las chicas bajaron los colchones al piso y se acostaron boca abajo mientras Carlotta empezaba a preguntarle. —¿Qué hiciste cuando me fui a Chicago? Debes contarme todo —pidió Carlotta, ya ansiosa por saber todos los detalles. —Está bien, lo haré. Los recuerdos del pasado se abrieron paso en los p