Torpemente logré bajar las escaleras y cuando miré hacia el frente vi una casa de campo realmente preciosa, me he quedado muda ante la belleza de la finca que es igual de lujosa que la mansión principal aunque mucho más pequeña.
- ¿Te gusta? - me pregunta Leonard con una sonrisa.- Sí, realmente es hermosa - le digo cautivada - ¿qué clase de lugar es este? ¿cuál es su función? - pregunto con intriga, ya que estando en la propiedad de los Boure cualquier cosa se puede esperar.- Ya lo verás, vamos adentro. Ya puedes apagar tu linterna - me indica Leonard y yo apago el aparato.Entramos y las luces se encendieron solas, son de las que detectan la presencia de las personas. Al observarla me doy cuenta que es una construcción hecha de forma contemporanea.- Esta casa ahora es tuya también - me dice mi esposo con una enorme satisfacción y señalando todo el espacio con los brazos abiertos.- ¿De qué me estás hablando? - le pregunto - e- Los nuevos arquitectos están por venir - le avisé a Pablo desde mi computadora, que se encuentra exactamente en el mismo lugar de la última vez. - Descuida, ya todo está listo para su llegada - me dice mi amigo con alegría. - ¿Los nuevos usos de suelo ya están en orden? - le pregunto. - Sí, todo ya está en orden, puedes dar todas las indicaciones que te plazcan a los nuevos Arquitectos - me indica con una sonrisa. - Perfecto, ahora mismo voy a bajar para asegurarme de que todo esté perfectamente bien para para la llegada - le digo y bajo a toda prisa con los documentos y los contratos necesarios. - Espera, debo acompañarte - me dice Pablo y se levanta de su lugar. - Date prisa - le indico, ya que debemos llegar a tiempo para la firma del contrato. Bajamos mediante el asensor que hice que el personal lo arreglase por el bien y por la eficiencia de todos los que trabajamos en este lugar. - Buenas tardes
Saqué ventaja de la presencia de Roger y pude escapar de Martha y sus malas intenciones, a llegar a mi alcoba me doy cuenta que Pablo ya está esperando a que yo llegase - cierra la puerta - le digo intentando controlar mi respirtación. - Ambar mírate... ¿qué es lo que te pasa? - me pregunta mi gran amigo sin tener idea de lo que acaba de suceder. - Solo haz lo que te digo, cierra la puerta y asegurala. ¡No quiero que nadie entre a mi recámara! - me dejo caer sobre el sofá y Pablo va a hacer lo que le he dicho. - Ya está - regresa y se sienta a un lado mío - ¿Se puede saber qué pasó allá abajo? - me pregunta con sumo cuidado. - Espera un momento - me pongo de pie y me dirijo al teléfono de mi habitación que está conectado a la línea de toda esta mansión de pervertidos y marco el código necesario. - Diga mi señora ¿cómo es que puedo ayudarle? - me responde Ángel directo en su línea de servicio, al parecer no escuchó nada de lo sucedido. - Quiero que investigues qué es lo que van a
- Y bien... - empecé a hablar una vez que la puerta estuvo cerrada con seguridad - ¿qué fue lo que pasó allá abajo? - pregunté y noté que Pablo y Ángel se miraron con sumo nerviosismo. - Mi Señora... no creo que sea un buen momento para hablar de esas cosas, hay asuntos extremadamente delicados que se tienen que tratar, no son un juego y no deben estar al alcance de cualquiera - dijo Ángel haciendo referencia a que me lo diría una vez que estuviesemos solos. - Espero que tengamos el tiempo suficiente para poder actuar luego de que yo sepa todo de lo que debo estar al tanto - dije con seriedad, pues tratándose de una familia de dementes cualquier cosa puede pasar - ahora quédate con nosotros - le indico a Ángel - es una orden - compartirás la mesa con Pablo, con Amelia y conmigo - no estoy dispuesta a que uno de mis mejores aliados esté al alcance de Martha Boure. - Como usted lo ordene mi Señora - Ángel tomó asiento. - ¿Ya te sientes mejor? -
Se escuchó como eonard azotó la puerta al salir y a pesar de que no deseaba hacerlo terminé por dar un par de suspiros debido a la frustración. - Mi Señora - Ángel se acerca con cuidado - ¿todo está en orden? - me pregunta con el afán de calmar mis ánimos. - Sí Ángel - digo cerrando los ojos - todo está bien doy un último suspiro intentando controlar la frustración que siento - anda, ahora tenemos que encargarnos de Amelia - camino hacia donde están Pablo y mi hermana. - Si me lo permite mi Señora, quisiera ir a dar unas vueltas al rededor de la casa para no levantar sospechas de la señora Martha y para saber qué es lo que está sucediendo con los miembros de esta familia justo en estos momentos - al escuchar eso de forma interna agradezco su complicidad.- Puedes ir - al darle el permiso noto en mi garganta y mis labios secos. Ángel sale a toda prisa de la habitación. -¿Cómo te sientes Amelia? - le pregunto a mi hermana y me giro hacia donde está ella. - No lo sé - Amelia se enco
- ¿No tendrás ningún contratiempo si vamos a ese lugar? - verdaderamente me importa que algo malo pueda pasar con Leonard solo por el hecho de tomar una decisión precipitada.- Todo está en orden. Solamente algo saldría mal si esta noche matan a alguien y no creo que eso suceda Por qué las autoridades han desplegado operativos especiales debido a los recientes enfrentamientos - me informa con alegría mi esposo.- Bien, entonces acepto ir al lugar secreto que me has mostrado - le digo y hago una sonrisa sincera.- Perfecto, espera aquí, no tardaré - se va corriendo a uno de los almacenes que están cercanos a nosotr¿Enfrentamientos recientes? ¿ha habido enfrentamientos recientes en esta ciudad entre las mafias?, de ser así eso indica que hay conflictos de gravedad por la venta de mercancía o quizás sea por la pelea de territorios para ejercer a placer la trata de blancas. - Estamos listos - Leonard aparece en un carro de golf - sube ahora mismo antes de que alguien nos pueda ver - me
Volteo a ver a Leonard y no se inmuta en lo más mínimo, parece que una pelea de estas es lo más normal para él, en silencio me hace una señal de que no haga ruido y yo asiento con la cabeza,Gerad regresa una de las bofetadas a Marta, y solo eso bastó para mandarla a sentar medio metro hacia atrás, todo el pasillo retumbo con ese golpe. Sentí que me puse pálida y presioné la mano de mi esposo. - No te atrevas a volver a ponerme una mano encima - dice Martha al ponerse en pie - o de lo contrario tus genitales y los de tu amante terminarán siendo comida para cerdos - La amenaza de Martha suena escalofriante - recuerda que aunque ya no seamos líderes de la mafia la mayoría de nuestros socios y de nuestros empleados están de mi lado. Incluso yo misma podría entregarte a las autoridades en el momento que menos lo esperes. - ¿Qué diablos está pasando con todos ustedes? ¿Qué es todo este escándalo? - Roger aparece furioso - ¡Han interrumpido el sueño de Amelia! - reclama a todos los pre
- ¿Qué le parece este señorita? - pregunta 'la diseñadora a Amelia señalando una de sus exclusivas creaciones.- No lo sé - Amelia se sacude la cabeza para intentar aclarar sus pensamientos. Está aterrada por la noche de bodas.- No tienes motivos para sentirte presionada, tenemos todo el día para que escojas el vestido de tus sueños - le digo para intentar tranquilizarla - además puedes escoger dos o tres vestidos, o bien, todos los que tú quieras. No tenemos un límite de gastos, podemos comprar la boutique entera si así lo quieres y hacer todo lo que a ti se te antoje sin escatimar en la cuenta - le digo con una sonrisa un poco maldosa, ya que al ser la esposa del nuevo jefe de la mafia puedo hacer lo que se me venga en gana sin recibir reproches de nadie y sin tener que rendirle cuentas a nadie, únicamente a Leonard.- ¿Tenemos presupuesto ilimitado? - pregunta Pablo sorprendido.- Sí, lo tenemos - le contesto con orgullo.Veo que Ángel me hace una señal para que me acerque hacia é
- Buenos días - escuché una voz lejana a mí - buenos días, ya es hora de que se levanten - alguien jaló las sábanas de mi cama y yo me despierto espantada.- ¿Usted quién es? ¿Y por qué ha entrado en mi habitación? - le pregunto mientras estiro mis brazos.- Eso no es lo que importa ahora mismo, ustedes no tienen más de 40 minutos para bajar a desayunar y ponerse en pie, luego de eso los espero en el segundo jardín y más vale que lleven ropa cómoda puesta - sentencia - ¡Arriba muchacho! - le dice a Pablo - tienes que ponerte de pie porque tienes mucho que aprender a partir de hoy - lo sacude y le quita las cobijas de encima.- ¿Quién diablos se cree que e? - pregunta Pablo con enfado e intenta recostarse de nuevo pero la mujer es más rápida y le retira la almohada antes de que él recueste su cabeza y por consecuencia su cráneo resuena contra el piso.- ¡Oiga! - Pablo le reclama con bastante molestia - ¿qué es lo que cree que hace - al parecer la actitud de esta mujer lo tiene bastante