Blake Hargrove, había sido compañero de Aaron y Kenneth durante la guerra, hasta el día en que su equipo entero fue aniquilado y Kenneth fue torturado por los rebeldes, la misión para rescatarlo había dependido enteramente de Aaron, un joven soldado llamado Nial, y Blake, quien solía ser algo inquietante en lo que respectaba a interacción social, hablaba poco pero se había ganado la confianza de Aaron en momentos importantes, protegiendo a su equipo cuando era importante, e incluso interponiendose entre una bomba y sus compañeros.

Aaron siempre lo había dado por muerto, nadie nunca había dicho nada al respecto, después de todo, habían visto explotar el tanque con sus propios ojos.

Aaron despertó sintiendose confundido y asustado, tenía una cánula de oxigeno en su nariz y podía escuchar las sirenas mientras lo trasladaban hacia el hospital, pero en su mente, solo podía ver nuevamente la explosión que pensó, le había quitado la vida a Blake.

Su conciencia estaba intranquila, mientras